El festival convierte el cortometraje en el centro de la vida cinematográfica madrileña durante una semana. En esta edición, además del tradicional impulso a la creación regional a través de diferentes secciones, el festival cuenta con Italia como país invitado y con una selección del Festival Internacional de Clermont-Ferrand, uno de los certámenes de referencia mundial. Entre las actividades paralelas organizadas para esta edición destaca el primer Foro Profesional de Cortometraje, que contará con la presencia de productores, distribuidores, actores, directores y demás profesionales del sector que participarán de encuentros, presentaciones y actividades que buscan incentivar la creación dentro del formato. A estas actividades se suman los 35 talleres y actividades formativas organizadas a lo largo del festival y abiertas a la ciudadanía interesada en la creación cinematográfica.