Manuel de la Fuente Soler es profesor de Comunicación Audiovisual en la Universidad de Valencia. Su investigación se centra en los efectos sociopolíticos de la cultura e imparte clases sobre cine y música popular y es un experto zappiólogo, siendo el autor del libro Frank Zappa en el infierno. El rock como movilización para la disidencia política (2006). Además, ha traducido las memorias del músico estadounidense, La verdadera historia de Frank Zappa (2014) y de su secretaria Pauline Butcher ¡Alucina! Mi vida con Frank Zappa (2016) y publicado la primera biografía en español del músico norteamericano: La música se resiste a morir. Frank Zappa. Biografía no autorizada (Alianza Editorial, 2021).
Su último libro, como editor y antólogo es Obra Lírica Completa de Frank Zappa (Libros del Kultrum, 2024), donde recoge y fija todo el corpus de canciones zappianas que el propio músico y artista norteamericano dejó referenciados antes de su muerte, ofreciendo al lector en castellano, por primera vez, una panorámica completa de las letras del genio de la contracultura en versión castellana.
Para conocer más sobre este cancionero y sobre la figura de Frank Zappa, conversamos con Manuel de la Fuente.
- ¿Qué es lo que más destacarías de Frank Zappa para alguien que no lo conozca?
Es un músico que trasciende los límites del rock y uno de los artistas más inteligentes de la segunda mitad del siglo XX. Su obra recorre la historia del rock hasta los años noventa. Publicó más de sesenta discos que exploran todos los géneros musicales, desde las vanguardias, el jazz y el rhythm and blues hasta la contemporánea y electrónica, filtrados por un humor sarcástico que critica la sociedad de su tiempo. Sus canciones ridiculizan el poder, potencian el espíritu crítico y reflexionan con acidez sobre la condición humana. Pionero en diversos campos, como el rock teatral o el videoclip, su obra conserva toda su vigencia y nos sirve para explicar muchos aspectos de nuestro presente. Quien se sumerge en su música queda atrapado de por vida con su sonido hipnótico y sus letras hilarantes.
- ¿Por qué recopilar las letras completas del músico norteamericano en un solo volumen y ahora?
Lo sorprendente es que no se hubieran recopilado hasta ahora. Su cancionero constituye un hito literario de la cultura contemporánea. Fue un letrista muy prolífico y meticuloso, que empleó una amplia variedad de recursos lingüísticos, figuras literarias y dobles sentidos, siempre con el objetivo de provocar la carcajada. Son unas letras que suponen, como dice Julián Hernández en el prólogo del libro, “una explosión arrolladora de ideas, tramas, situaciones, personajes, formatos, descripciones, discursos, diálogos, guiones de cine, folletos publicitarios y lo que se tercie”. Con su Obra lírica completa publicada por Libros del Kultrum se ha intentado reparar este vacío bibliográfico y situar en su justo lugar la producción literaria de Frank Zappa. Se trata de una edición crítica bilingüe, basada por lo tanto en tres ejes: fijar el canon de los textos en inglés (dado que tampoco se habían publicado íntegramente en el mercado anglosajón); acometer una traducción literaria que garantizara una correcta comprensión en castellano; y dotar a la obra de un aparato crítico, con textos introductorios a cada disco y notas al pie explicativas que aclararan tanto las soluciones de traducción como el sentido y las abundantes referencias culturales de los versos de Zappa.
- Este es tu quinto libro sobre Frank Zappa, háblanos de los anteriores.
Frank Zappa siempre me ha parecido un artista fundamental que requería una atención bibliográfica similar a la de otros músicos o cineastas que han merecido numerosos estudios sobre su vida y obra. En 2006 se publicó Frank Zappa en el infierno. El rock como movilización para la disidencia política, donde me propuse analizar sus letras, especialmente las de los años ochenta, en las que interviene directamente contra las políticas de Ronald Reagan. A continuación, me encargué junto a Vicente Forés de la traducción de sus memorias, La verdadera historia de Frank Zappa (que permanecían inéditas en castellano), y las de su secretaria Pauline Butcher, tituladas ¡Alucina! Mi vida con Frank Zappa. Aparecieron respectivamente en 2014 y 2016. Al cabo de unos años, en 2021, la editorial Alianza lanzó al mercado La música se resiste a morir: Frank Zappa. Biografía no autorizada. Se trata de la primera biografía en nuestro idioma, para la que recurrí a fuentes primarias (hemerotecas y bibliotecas estadounidenses, así como entrevistas con el entorno familiar y profesional del músico) con la finalidad de situar a Zappa en su contexto social, cultural y político.
- ¿Qué nos dicen las letras de Frank Zappa y su actitud política sobre nuestra actualidad?
A diferencia de la mayoría de las canciones pop, las letras de Zappa renuncian a la sentimentalidad y optan por la expresión de ideas. Así, cuando Zappa hace canciones de amor es para burlarse de este tipo de canciones. La característica principal de sus textos es el humor, que utiliza para poner en cuestión todos los discursos institucionales, tanto los provenientes de la Casa Blanca como de la contracultura oficial. Su obra reivindica la individualidad y la libertad de pensamiento, y siempre se ocupó de intervenir en los temas más conflictivos de su tiempo, como la censura artística, la libertad creativa o el uso de la mentira en política. Son temas que siguen de actualidad, de modo que sus letras parecen escritas recientemente, ya que arrojan mucha luz sobre temas como las fake news o el señalamiento de músicos por sus canciones. Con su constancia en la defensa de la libertad de expresión y la burla del poder, la obra de Frank Zappa enseña un compromiso ético y una manera de estar en el mundo.
- En Zappa es importantísimo su lucha y activismo por la libertad de expresión. Háblanos sobre ello.
Frank Zappa abogó desde el principio de su carrera por la libertad creativa y de expresión. En los años ochenta, con la llegada de Ronald Reagan a la Casa Blanca, percibe un cambio profundo en su país: si hasta entonces la mentira había sido una línea roja en política (con la dimisión de Nixon por el Watergate), el reaganismo incorpora la mentira como elemento habitual del discurso político. Además, el Partido Republicano se alía entonces con el fundamentalismo cristiano y se pone en marcha una campaña moral que fija su atención en el rock. Diversos grupos de presión elaboran listas de negras de cantantes y artistas por el contenido de las canciones y piden que se impriman etiquetas de advertencia en las carátulas de aquellos álbumes que incitarían al sexo, la violencia, el consumo de drogas o las prácticas satánicas. Frank Zappa califica la campaña de coartada censora y advierte que el país se encamina hacia una “teocracia fascista”. Además de ridiculizar este movimiento reaccionario y el reaganismo en sus canciones, en 1985 comparece en el Senado estadounidense para oponerse al etiquetado de los discos y defender la libertad de expresión. Su testimonio, emitido por televisión, supone un alegato fundamental en la lucha contra la censura. Zappa se mantuvo firme en su postura: hasta su fallecimiento en 1993, reivindicó en infinidad de ocasiones, en sus discos y entrevistas, este derecho, de modo que su ejemplo inspiraría a numerosos artistas y cineastas como Matt Groening o Michael Moore.