Publicidadspot_img
-Publicidad-spot_img
Mientras tanto5 preguntas a Oriol Alonso Cano sobre David Cronenberg

5 preguntas a Oriol Alonso Cano sobre David Cronenberg

Sestear absorto y pálido   el blog de Jose de Montfort

 

Oriol Alonso Cano (Martorell, Barcelona. 1984) es doctor en Filosofía, así como grado en Psicología. Profesor en diversas universidades, ha realizado múltiples estudios y trabajos de investigación que han sido publicados en revistas nacionales e internacionales especializadas de Filosofía, Psicología, Antropología o Medicina.

Escritor y articulista en varios medios de comunicación es autor de Encarnaciones del capitalismo (Carena, 2014) y Sociedad débil (EUF, 2015), Experiencia de la ausencia (Anthropos, 2015), La caricia del Fantasma (Cuadernos del Laberinto, 2018) y Clinamen (Cuadernos del Laberinto, 2021) y coordinador y autor de Archipiélago. Retrato polifónico de Rafael Argullol (Ediciones del Subsuelo, 2015). Algunos de sus poemas han sido publicados en varias webs de relevancia (Tacte Barcelona, Aullido) y en antologías como Laberinto breve de la imaginación.

Su más reciente libro es David Cronenberg. Infecciones y mutaciones narrativas (Ediciones del Subsuelo, 2024), donde investiga el afán del genial director de cine canadiense por la escritura, investigando cómo se ha servido de su filmografía para escribir a través de los otros, traduciendo al lenguaje fílmico obras literarias para acabar finalmente encontrando su propia voz con Consumidos (Anagrama, 2016), su primera obra de ficción literaria.

Para conocer un poco mejor este aspecto de la obra de David Cronenberg le preguntamos al autor sobre el particular.

 

  1. ¿De veras David Cronenberg siempre quiso ser escritor?

Sí, aunque parezca sorprendente, el verdadero deseo de Cronenberg siempre fue (y es) el de escribir. Tal vez fuese porque su casa estaba llena de libros, seguramente fuese porque su padre se dedicaba intermitentemente a la escritura, pero él, desde que tiene memoria, anhela escribir. Obviamente que este afán escritural ha ido pasando por diversas fases: desde la ensoñación romántica de ser un novelista, hasta alcanzar el punto de madurez en el que su manera de relacionarse con el mundo (interno y externo) urge de la intermediación necesaria de la palabra; ahora bien, siempre ha necesitado expresarse a través de la escritura (más que con la imagen).

 

  1. ¿Qué es lo más destacado que has descubierto sobre la obra de Cronenberg gracias a tu investigación para la escritura de tu libro?

Sobre todo me ha permitido ver de una manera más profunda la imbricación que hay en su obra entre su pulsión de escritura y su narrativa audiovisual. Es decir, he podido observar detalladamente que su manera de narrar cinematográficamente está muy atravesada por el estilo, ritmo y planteamientos de sus escritores predilectos (Nabokov, Kafka, Burroughs, Eliot…). Sus imágenes son narrativas en el sentido que están repletas de metáforas, metonímias y demás recursos que buscan tener un alcance literario.

Asimismo, la escritura del libro me ha posibilitado introducirme todavía más si cabe en la complejidad de la mente cronenbergiana, en la vastedad de su universo, en las vicisitudes que componen su imaginería.

 

 

  1. Para alguien que no conozca la obra de Cronenberg, ¿por dónde le recomendarías que empezase?

Es una pregunta muy difícil porque la obra de Cronenberg tiene muchas sinuosidades. Personalmente, recomendaría Dead Ringers (Inseparables, 1988) porque ahí está toda la propuesta cronenbergiana concentrada de una manera muy sofisticada pero no exenta de fuerza narrativa. Además, es su propuesta más personal y oscura, en mi opinión, y fue, además, la obra en la que viró definitivamente por lo que concierne a su propuesta visual que tenía hasta entonces. Ahora bien, es una obra muy dura, con unos de los finales más desoladores que pueden verse en el cine contemporáneo, así que no sé si sería una buena recomendación (jajaja).

 

  1. De tu libro se desprende la idea de que, al menos para David Cronenberg, el hallazgo de la voz propia es un proceso largo y complejo. Nos gustaría saber tu opinión sobre este asunto.

Encontrar la voz propia para un/a artista es de los fenómenos más complejos que hay. En primer lugar porque hay una herencia cultural, una tradición respecto a la cual te estás posicionando. El eco de esa tradición es muy contundente, muy abrumadora en muchos casos y, de lo que se trata, es de saber ponerla en distancia, o bien horadar en ella un hueco en el que poder hacer circular tu voz.

En segundo lugar, por el peso de los maestros, por un lado, y de los héroes y heroínas culturales, por el otro, que nos aprisionan con la admiración y reverencia que les profesamos (puede ser admiración como odio, da igual ya que amor y odio son dos caras de la misma moneda y nos impiden mantener la distancia necesaria). Es crucial saber desembarazarse de ese hechizo y admitir que cada uno tiene su propio lugar de enunciación, más allá de admiraciones e influjos

 

  1. Cronenberg es considerado un genio del séptimo arte. ¿Cuáles serían las razones para este unánime reconocimiento según tú?

Te voy a dar tres razones, pero podría darte miles: Es un genio porque a través de su arte te interroga, te interpela generando un microcosmos en el que te hace participe de la experiencia que te propone. Su cine es experiencial en el sentido que te hace cómplice de la experiencia, eres un integrante más del experimento que está poniendo en liza.

Es un genio porque, desde la simplicidad estilística, cuestiona aspectos clave de la condición humana, analiza como nadie los resortes de nuestro tiempo hasta el punto de ser considerado un verdadero visionario respecto nuestro presente.

Es un genio porque él emplea el cine para diseccionar lo real y analizar detalladamente, como si de un ensayo (sea biológico, filosófico, literario, etc.), los pilares que los sostienen.

 

Más del autor

-publicidad-spot_img