He estado durante un año solo leyendo desde Berceo hasta las primeras obras de la Generación de los 50 o del medio siglo.
Hacía un año que no leía nada actual en español.
Volví con Fármaco (2021), de Almudena Sánchez (1985-2087). Seguí una indicación de José de Montfort, siempre atento a lo que va surgiendo.
Es un libro sobre la depresión. Obra valiente y necesaria, escrita con elegancia y belleza.
Al finalizar me acordé de un poema de Luis Rosales (1910-1992).
A la izquierda el original, a la derecha ligeramente modificado por mí y las influencias de la realidad y las lecturas.
:
Se te ha olvidado andar y hay que aprenderlo
de nuevo.
Ven. Comienza,
ve juntando este sol,
¡alguna tarde
tenemos que nacer!
Amarillean
las nubes en el cielo y no me escuchas;
vas a mi lado y tiemblas;
el pie va tras del pie como la ola
va detrás de la ola.
Estás inquieta.
Se te ha olvidado hablar, se te ha caído
la voz y no la encuentras,
la buscaré contigo y las palabras
vendrán:
Vamos a hacer la primavera,
vamos a hacer el mar poquito a poco,
la luz, la paz, la guerra,
como si no se hubiesen desprendido
ya una vez de tu voz y en ti nacieran.
¡Vamos a hacerlo todo
de nuevo!, hasta que puedas
reunir tu corazón como se hace
la firmeza del mundo con arena.
Se te ha olvidado andar y hay que aprenderlo
de nuevo.
Ve. Comienza,
ve juntando este sol,
¡alguna tarde
tienes que nacer!
Amarillean
las nubes en el cielo y no me escuchas;
vas, y tiemblas;
el pie va tras del pie como la ola
va detrás de la ola.
Estás inquieta.
Se te ha olvidado hablar, se te ha caído
la voz y no la encuentras,
la buscarás y las palabras
vendrán:
Vas a hacer la primavera,
vas a hacer el amor poquito a poco,
la luz, la paz, la guerra,
como si no se hubiesen desprendido
ya una vez de tu voz y en ti nacieran.
¡Vas a hacerlo todo
de nuevo!, hasta que puedas
reunir tu cabeza como se hace
la firmeza del mundo con arena.