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Mientras tantoDe mi Diario : Semana 46 / 2021

De mi Diario : Semana 46 / 2021


 

Weiß/Colonia, 7.11.

1:00 am : Empecé a ver Slow Texas, pero tiene un guion tan confuso, o así me lo pareció, que la dejé esperando ver poco después a Jodie Foster en The Acussed [Acusados], con la que ganó el primero de sus dos Oscar. La revista Complex situó la escena de la violación en esta película en el # 16 de su lista de “Las 53 escenas más difíciles de ver de la historia del cine”. Jodie tuvo que consolar a los actores masculinos que supuestamente la violaban, porque no paraban de llorar durante la escena. Dos de ellos abandonaron el set para vomitar. Y yo, que solamente he visto la peli una vez y me las prometía felices esta noche, tuve que renunciar porque delante estaba programado uno de los más estúpidos programas–concurso de la tele alemana, con un moderador que tiene de profesional lo que yo de archipámpano de las Indias, siempre se excede en su tiempo; esta vez fueron 45’ interminables, por lo que renuncié a ver la peli, me habría costado pasar hasta más de las 4 am ante el televisor. No me explico el éxito de ese cretino, la verdad. O mucho peor: miro en derredor y sí que me lo explico.

La verdad es que hubo un tiempo en que yo también quise ser un personaje de Aldous Huxley o de Jakob Wassermann: «Yo, por aquél entonces, devoraba montañas de Jakob Wassermann, y puesto que me habían destinado a la carrera de Leyes, saboreaba libros como Laudín y los suyos; yo sería Laudín y el mundo estaría lleno de Lúes, las tirantas de cuyos sostenes se caerían con facilidad», dice el narrador de mi cuento “Macho dulce”. Curioso que me lo ha hecho recordar el tercer párrafo de la columna de Fernando Araújo, hoy, en EE.

Estuve viendo y oyendo, con atención sostenida y creciente, Jenůfa, la ópera de Janáček, en la Royal Opera House de Londres, con una Asmik Grigorian (Jenůfa) y una Karita Mattila (Kostelnicka) ambas en estado de gracia, y un espléndido Laca, el tenor escocés Nicky Spence, amén de la orquesta de la propia ROH, magistralmente dirigida por el húngaro Henrik Nánási. Le escribo a Santi, que tanto me encareció verla: «Santi querido, te escribo con los ojos enrojecidos, acabo de verla y oírla y he llorado con esta Jenůfaque tanto me recomendaste. Es portentosa, asombrosa, grandiosa, gloriosa. En los pocos o muchos años que me quedan no se me olvidará, máxime que quiero comprar el álbum de DVD apenas salga al mercado, será mi autorregalo por el International Gift Day. La única disonancia fue el público de Londres: hay que ser bien brexits [=brutos, en inglés] para ponerse a aplaudir cuando sale de escena Buryja, la sacristana, obedeciendo al gesto del juez. Francamente, no es de recibo. Menos mal que enseguida se dieron cuenta de la brexity [=metida de pata, en inglés]. Casi se cargan la  última escena entre Jenůfa y Laca, tan hermosa. Gracias por este regalo que me has hecho, me salvaste el domingo. (Escribí “domino” en vez de “domingo” y el corrector me advierte del error, debí escribir “dominó”. Inteligencia artificial, dizque le llaman) Un abrazote, feliz resto del día, y cuídate mucho, que la cuarta ola llega ya con el motor que camina p’alante activao y el que camina p’atrás en punto difunto».

Weiß/Colonia, 8.11.

2:15 am : Un capítulo más de Furia, la serie noruega de espionaje, con suspense creciente, y una vez más vi después Denial [Negación], con ese trío compuesto por Rachel Weisz, Timothy Spall yTom Wilkinson, que es una gozada verlos actuar, y al resto del reparto. No me extrañaría nada que Denial llegue a ser una peli de culto.

Escribo mi columna para EE, sobre las minas en Camboya, y espero como siempre que los lectores colombianos sepan leer entre líneas lo que pienso acerca de las salvajadas cometidas por el ejército de su país contra niños indefensos, ametrallados desde el aire

Marcos sube a su cuenta Twitter este tuit que le regalé: «¡Aviso importante para los pueblos de Cuba, Nicaragua, Venezuela, Bielorrusia, Chechenia, Azerbaiyán, Zimbabue, Guinea Ecuatorial, Myanmar, Corea del Norte, Filipinas e tutti quanti: el 11.11. es San Martín! ¡Hagan bueno el refrán español!»

Weiß/Colonia, 9.11.

2:10 am : Estuve viendo el capítulo cuarto de Furia, la serie noruega de espionaje, y los dos capítulos finales de Pride & Prejudice (BBC 1995), que es, de lejos, mi serie predilecta. La próxima vez la voy a programar en la versión alemana, pese a los cortes que contiene: los supliré con mi memoria.

Recibo por correo quelonio una circular de la burgomaestra encareciéndome que organice una cita con mi médico de cabecera para una tercera dosis de la vacuna. Ya lo había hecho ayer, y acordado la cita para las 6 pm del lunes 15. «Hombre prevenido vale por dos», como decía mi abuela Remedios.

En La Modicana, también hoy mucho público, pero gente de parla discreta, no tanto ruido como el  martes pasado, que fue un viacrucis para Carlitos. Pidieron: Ulli risotto con setas, Diny y Carlitos pasta con salsa de parmesano y tocino de jamón, y yo repetí mi lucioperca (“¡Tan sólo me queda una ración!”, avisó la signora). Ulli nos cuenta que ayer tuvieron que estar cuatro horas fuera de su piso mientras desactivaban una bomba no explotada de la 2.ª guerra mundial, muy cerca de la casa donde viven; nos dijo también que existe un levantamiento cartográfico de los lugares donde puede haber todavía bombas como esa, y que en el dialecto burocrático lo llaman “el mapa caviar”. Menos mal, podrían haberlo llamado también “el mapa cagadas de moscas”.

De repente me desperté al sentir una especie de fogonazo y que saltaban los fusibles de todo el barrio. Ha pasado un par de veces desde que en diciembre de 1975 nos vinimos a vivir aquí. Pero esta vez no se reanudó la corriente al cabo de un par de segundos, y de repente sentí mi cuerpo agarrotado, como cargada de electricidad toda la espalda, lo que se traducía en una gran torpeza de movimientos y en querer levantarme de la cama por el lado opuesto al habitual. Entretanto podía distinguir luces tras el doble cortinaje de nuestro ventanal y cuando abrí finalmente la puerta del dormitorio estaba el piso poco menos que iluminado a giorno, y escuchaba en el fondo las voces que provenían de la tele. Diny se sorprendió al verme entrar como un fantasma en el salón y preguntarle qué hacía levantada a tales horas, pero de pronto me dio por mirar el reloj electrónico junto al televisor, y los guarismos no parpadeaban, como sucede cuando se corta la corriente eléctrica: marcaban las 17:57, de manera que me di cuenta de que todo había sido una pesadilla, como cuando otra siesta, hace un par de semanas, me desperté creyendo tener al lado a Dieter que venía para acompañarme al valle de Josafat. Regresé a la cama y traté de tranquilizarme reposando sobre la espalda y respirando de una manera profunda y tranquila. Con todo, no puedo desprenderme de una cierta intranquilidad sobre mi estado mental. Pero tampoco es para extañarse, viviendo en la tensión que estoy viviendo. Keep smiling, boy!

Weiß/Colonia, 10.11.

1:45 am : Acabo de ver The Zookeeper’s Wife [La mujer del director del Zoo, estrenada en España como La casa de la esperanza y en América Latina como Un refugio inesperado], una peli que no es lo bastante buena como para contar la heroica y emocionante historia real que cuenta, de una manera que el espectador se conmueva, pese a la gran actuación de Jessica Chastain.

Analizando el texto de mi artículo sobre Dostoievski, que si Dios quiere y la Virgen lo permite, se publicará mañana en Nexos, José Luis me comenta desde Managua: «Lo que sí hay –y ese es un rasgo no exclusivo suyo, pero sí de otras novelas europeas, sobre todo rusas, pero también germanas– es una rápida intimidad entre desconocidos. Me fascina ese ¿recurso, ocurrencia, excusa? en parte  porque es un reto a la verosimilitud: dos desconocidos se cuentan los más íntimos secretos en un tren (El príncipe idiota, Sonata a Kreutzer) o tras compartir una cena en un hotel (Veinticuatro horas en la vida de una mujer). Es fascinantee increíble aunque ocurra en la vida real». Le contesto: «En cuanto a lo que me decís de la facilidad para intimar con un extraño, es cierto, y a mí me ha pasado también, una vez la conté en el diario de mi viaje a Colombia en el 2008, cuando en el avión de Avianca me tocó al lado un paisa que me confesó que viajaba a Pereira para acudir el día siguiente al entierro de su hermano, a quien habían apuñalado en una reyerta callejera. Nos pasamos el vuelo contándonos sucesos luctuosos de los que fuimos testigos o afectados personalmente. Después de todo, lo más seguro era (es) que no nos viésemos más en la vida».

Encontré un tuit alemán con respuesta de otro, traduzo de inmediato ambos los dos (© by Cantinflas): @Googlehupf2P0 : Cuando alguien pregunta qué llevar a la fiesta de cumpleaños de un niño, cerveza es obviamente una respuesta equivocada.
@schnautzelchen : Desde luego: el profesional lleva aguardiente.

Weiß/Colonia, 11.11.

1:30 : Acabo de ver Jauja, y la he visto hasta el final por ser Viggo Mortensen su protagonista. Fue rodada en el inusitado formato 4:3, con el que se consigue un efecto inusual y hace que Jauja se vea como si la hubieran filmado en cámara lenta y reproducida en tiempo normal, pero al mismo tiempo rodada con una película imposible que la hubiese filmado en diapositivas. Pocas veces en mi vida me he aburrido tanto viendo una peli y pensando en la gran peli que hubiese sido sin esos tiquismiquis sofisticados. Algo así como Zama, la novela de AdB, pero en cine. Y por cierto, tengo que hacerme con el DVD de la Zama de Lucrecia Martel, me aseguró Santiago que es una peli espléndida.

Anoche, después de Jauja, volví a ver el primer episodio de la serie danesa basada en las novelas de Jussi Adler–Olsen con el comisario Carl Mørck como protagonista: “Misericordia” [La mujer que arañaba las paredes se titula en español la novela que la inspira]. Terminó casi a las 3:00 am, así es que me fui derechito al catre.

Hace un par de semanas, a propósito de mi proyectado tuit sobre San Martín, le escribí a José Luis: «En los tremendos años del hambre, pasado San Martín, siempre recibíamos chacina de la matanza, nos la enviaban nuestros tíos del pueblo, de Fregenal de la Sierra, de donde eran mis padres. Un pueblo aparte: en él nacieron Arias Montano, autor de la Biblia Polígota, y también Bravo Murillo, varias veces ministro, dos presidente del consejo de ministros y una del Congreso de los Diputados, un político a quien se debe la realización del Canal de Isabel II. Frexnenses fueron asimismo el gran impresionista Eugenio Hermoso, y Rodrigo Sánchez–Arjona, uno de los pioneros del teléfono en España (en la casa solariega de los Arjona, cerca de la de mis abuelos maternos, una placa recuerda que la primera llamada que se hizo en el país fue desde esa casa a Los Mimbres, una finca de los Arjona a 8 km de Fregenal). Arias Montano, por cierto, se retiró a vivir a uno de los parajes más bellos de la serranía de Huelva, Alájar, y allá lo fue a visitar—honor sin precedente, y en aquellos tiempos, sin carreteras ni medios de transporte como ahora—nada menos que Felipe II, de quien fue su confesor. // Oíme, José Luis, que conste que yo por estas cosas cobro, pero para vos siempre serán gratis». A lo que José Luis, hijo de madre extremeña, me contestó desde Managua: «Y te pagaré, Ricardo, con un single malt o algún blended whisky de primera. // Fregenal de la Sierra. Ese es uno de los nombres que más ha captado mi atención cada vez que leo el tablero de destinos que tiene la estación de Navalmoral de la Mata, el sitio casi a medio camino entre Madrid y Almendralejo donde el bus que hace esa ruta se detiene para que los pasajeros visiten el baño y el bar, o simplemente estiren las piernas. La última vez me lancé unos calamares a la romana y un vaso con zumo de naranja, y luego hice lo de siempre: pararme frente al tablero a mirar y fotografiar esos nombres que parecen salidos del Quijote, lugares que sueño con visitar. Cuando mi viaje en bus de Almendralejo a Sevilla pude ver algunos desde la ventanilla, en un día lluvioso con sabor a versos de Machado».

Por primera vez una mujer ha arbitrado en un partido de competición de la selección alemana (de la masculina, ça va sans dire!), es la croata Ivana Martinčić y lo ha hecho muy bien, sin que se notara su presencia en el campo más que cuando era necesario. Por ejemplo en el octavo minuto, cuando un defensa de Liechtenstein alcanzó a patear el cuello del centrocampista alemán Goretzka, dentro del área: sin vacilar un segundo, Martinčić pitó penalty y luego le sacó la tarjeta roja al infractor. Una Martinčić tendría que haber arbitrado la final del Mundial 2010 en Johannesburgo, enviando a los vestuarios a medio equipo neerlandés, cuyos ases jugaron aquel partido como si se entrenaran para una peli de artes marciales: Países Bajos contra España fue la final, ¡y tan en contra!, se diría que le quisieron pasar factura a La Roja por alguna cuenta pendiente desde la Guerra de los Ochenta Años.

Weiß/Colonia, 12.11.

2:00 am : Estuve viendo por segunda vez De óxido y hueso. Marion Cotillard es una de mis actrices preferidas (su Lady Macbeth es insuperable) y De óxido y hueso es una peli de a deveras emocionante y donde, como es costumbre suya, vuelve a dar un do de pecho. Hace poco declaró que odia rodar escenas de sexo, pero por primera vez disfrutó de esas escenas en esta pelí: «Suelen ser la peor parte de ser actriz, las hago temblando; me siento muy mal y quiero llorar la mayor parte del tiempo porque lo odio mucho, pero aquí fue totalmente diferente. Me involucré tanto con mi personaje que me alegré de que disfrutara de algo así. Es una película sobre el amor, sobre la carne, sobre el óxido y el hueso y el corazón y el sexo, así que sin las escenas de sexo la película habría perdido algo». Tiene toda la razón del mundo y de Jeré, como suelen añadir los jerezanos: y Stéphanie se lo debe haber agradecido desde el valle de Josafat donde moran los personajes de la literatura y del cine.

Visita de Rebeca. Mientras desayuno leyendo el KStAnz en el comedor, la oigo hablar con Diny en el salón y me doy cuenta de que tiene con su madre las mismas dificultades de comunicación que yo. No me consuela empero para nada saber que no soy el único.

Weiß/Colonia, 13.11.

2:00 am : Veo también por segunda vez The Salvation, al parecer estrenada en España con el título inglés original. Un comentarista en la ficha de imdb.com termina su sinopsis diciendo: «Sergio Leone creó el spaghetti–western. Quizá haya llegado el momento del smørrebrød–western». No creo que eso suceda, pero la peli me conmovió en su momento, y ahora de nuevo. Por cierto, esta debe ser la única peli de Eva Green en que no aparece un desnudo integral suyo. Cuando Bertolucci la descubrió para su hermosa Soñadores, dijo: «Es tan bella que resulta indecente». Y la hizo posar en desnudo frontal como la Venus de Milo, ¡hasta con los brazos cortados! Ah ¿qué no podrá conseguir el cine?

En el KStAnz veo una esquela fúnebre, donde el epígrafe comienza con un «Mi amor» y concluye diciendo «Eternas Gracias», ambas citas en español, y entre ellas una frase en alemán, la traduzco: «con infinito agradecimiento por tu amor, atención y cuidados, que siempre guardaré en mi corazón». El “mi amor” me dice que la viuda debe ser latinoamericana, y en efecto, veo que al final se pide que en vez de flores se envíen aportes a la cuenta de «nuestra Fundación YEAH, para la promoción de jóvenes y niños, en Chile». Ainda mais, por la dirección del duelo veo que la familia vive en Weiß. Ni idea de que teníamos cerca de nuestra casa una vecina chilena.

En un artículo del ABC madrileño que descubro al azar, sobre el gran Mariano Fortuny y Madrazo, pesco esta perla que no tiene pierde: «Estaba influenciado por sus múltiples viajes a Beirut, donde asistía a los festivales anuales wagnerianos, su gran admiración». Hace que recuerde un chiste gráfico alemán que conté hace poco en este diario, donde una pareja gringa llega al aeropuerto de la capital del Líbano y deja sorprendidos a los aduaneros a quienes les preguntan dónde tienen lugar los Festivales de Wagner. Claro que si unos gringos confunden Beirut con Bayreuth, están en muy buena compañía: además de Hollywood, como dije entonces, también del ABC Madrid, añado ahora.

*******************THE END*******************

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