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Mientras tantocreer en Dios

creer en Dios


se encontró un pajarito caído en el suelo, esperó mucho tiempo cerca por si alguien venía

al final decidió cogerlo y vivir en casa

aprendió a volar e hizo una casa junto a las plantas, comía almendras y estudiaban juntos, acariciaba sus manos

una noche

poco a poco fue muriendo y se quedó quieto en las manos

(creemos que los gorriones no pueden vivir así, sin el cielo)

(se llamó Ratón y en el río Tajo navega)

tras su muerte todos los gorriones que ve tienen el nombre, Ratón, Ratonuco, Ratonucos, Ratones

no muere

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