Dentro de los Encuentros fotográficos que cada año convierten la ciudad francesa de Arlés en cita ineludible para los amantes de la fotografía, bajo el título de La Pointe Courte, de la fotografía a la película, la cineasta francesa muestra los queridos escenarios del puerto de Séte. Escribe Carol Sandrine, la comisaria de la exposición: “Agnès Varda sentía un cariño particular por Sète. Sétoise por adopción como refugiada adolescente allí durante la Segunda Guerra Mundial, regresó a la ciudad todos los años hasta principios de los años sesenta. Comenzó en 1947 como fotógrafa aficionada, luego se convirtió en profesional. Su Rolleiflex capturó a amigos, marineros, los muelles de la ciudad del sur, las ecuánimes de agua en los canales… además de los pescadores y las estrechas travesías de Pointe Courte, el barrio obrero junto al Estanque de Thau que sirve de escenenario para La Pointe Courte, a su primera película, rodada en 1954. Las hojas de contacto de Agnès Varda revelan su viaje fotográfico. Cuando comparamos las más de 800 fotos que hizo en Sète con la minuciosa selección que la joven Varda hizo en 1953 para preparar su película, empezamos a acercarnos a su mirada. No se trata de fotogramas del rodaje o del decorado, sino de imágenes anteriores a la idea de la película o que forman parte de su concepción. Estas fotografías de referencia y exploración, reunidas en nueve hojas, de contactos fueron su inspiración para escenas, atmósferas, incluso tomas particulares. Sus temas y motivos favoritos se confirman con su reaparición en grabados contemporáneos o posteriores”. El agua y sus polisémicos reflejos.

Dónde: Cloître Saint-Trophime, Arles, Francia

Cuándo: Hasta el 24 de septiembre