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AcordeónLas Galácticas de La Mina. El fútbol como ascensor social en uno...

Las Galácticas de La Mina. El fútbol como ascensor social en uno de los barrios más necesitados de Barcelona

“El Señor, Dios de los ejércitos”. Esta cita del Libro de los Reyes constituye el lema de la Orden de los Hermanos de la Bienaventurada Virgen María del Monte Carmelo. Los carmelitas.

El monasterio del Carme se construyó en la calle del Carme, 40, en Barcelona, en el siglo XIII. En 1874 el convento se derruyó. Hoy, en el solar donde se encontraba, los niños se divierten en un parque infantil con columpio y tobogán.

En 1993, el portalón acabó en la avenida de Pi i Margall de Sant Adrià de Besòs.

Sant Adrià de Besòs, localidad paredaña a Barcelona, no es conocida por este arco ojival con arquivoltas, sino por el busto del cantaor José Monje, Camarón de la Isla, “esencia del arte gitano”, en el paseo que lleva su nombre.

Seis barrios conviven en Sant Adrià: Sant Adrià Nord, Sant Joan Baptista, La Verneda, El Besós, La Catalana y La Mina. Y es La Mina la que acapara las portadas de los massmedia, casi nunca por algo bueno.

Los datos del Consorci del Barri de La Mina reflejan una sociedad con muchos déficits:

“En cuanto a los niveles de formación, la mayoría de la población de entre 18 años y 64 años, el 43%, tiene el graduado escolar; el 25% no ha terminado los estudios básicos; el 22,5% ha superado el bachillerato superior y el 0,3% ha realizado estudios universitarios”.

Un piso en la calle de Mart, de tres habitaciones, puede costar unos cien mil euros. El vendedor se cuida mucho de ofrecer datos relacionados con la seguridad: “Respecto a la ubicación, se sitúa en Barcelona, en la zona de Sant Adrià de Besos, justo delante de la comisaría de los Mossos d’Esquadra”.

El deporte ha ayudado a mejorar la imagen pública de un barrio con carencias.

Escrito pegado a una farola: “IE La Mina: campions de Catalunya de futbol sala després de jugar contra el Barça un emocionant partit”.

En septiembre del 2023 las mujeres irrumpieron en el panorama futbolístico.

Nació el Club de Futbol Tramontana La Mina femenino, formado por unas quince chicas, la mayoría con menos de veinte años. El Tramontana femenino, de categoría amateur, juega en la Federació Catalana de Futbol.

En la temporada 2023/2024 han quedado séptimas (de once equipos que compiten).

La Liga la ganó la Unión Deportiva Tibidabo Torre Romeu.

El resultado, lo de menos.

Aquí hablan 11 futbolistas que han roto techos, los de cristal y los de titanio. Que driblan el patriarcado.

Estas colosas:
Yamila (dorsal con el número 2).
Rafaela (dorsal con el número 49).
Alejandra (dorsal con el número 16).
Claudia (dorsal con el número 19).
Manuela (dorsal con el número 12),
Ester (dorsal con el número 8, y el 10).
Pol (dorsal con el número 11).
Emilia (dorsal con el número 3).
Janet (dorsal con el número 21).
Núria (dorsal con el número 4).
Eli (dorsal con el número 9).

Se han enfrentado a las tradiciones, a los puritanos y a los criticones.

Las del Tramontana han recibido palos
por ser chicas,
por ser madres,
por ser currantes,
por ser de La Mina,
por ser inmigrantes,
por ser lesbis,
por ser trans,
por ser gitanas,
por ser de talla grande,
por ser alocadas
y por ser mayores.

Las murmuraciones las han trocado en adjetivos que las elevan, ajenas a las agresiones y los pensamientos tóxicos.

Las del Tramontana han suscitado entusiasmo
por ser leonas,
por ser letales,
por ser asombrosas,
por ser procaces,
por ser luciérnagas,
por ser alcatraces,
por ser enamoradizas,
por ser estrellas,
por ser bailarinas,
por ser magnéticas
y por ser superheroínas.

Las Galácticas de La MinaLas Galácticas de La Mina.

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