Me quedé sentado muchísimo tiempo, y la noche se fue haciendo más fría, los grados fueron bajando de uno en uno.
Los grados no tienen otra forma de bajar que de en uno en uno, tal y como prescribe el teorema del valor intermedio: si una función es continua en un intervalo, entonces toma todos los valores intermedios comprendidos entre los extremos del intervalo.
No pueden bajarse dos grados a la vez si asumimos que la temperatura es una función lineal, si observamos una bajada así se debe a una baja sensibilidad del termómetro. Esta linealidad de la temperatura se pone de manifiesto más claramente en los termómetros de mercurio, donde no puede haber saltitos