No vale todo ¿O sí? Libertad de expresión ¿De quién? De las S.A que quieren audiencia, que quieren clicks, que son inocentes y sólo ofrecen «lo que el público demanda».
¿Demandamos violencia? Nos levantamos por la mañana pensando: me apetecería ver un secuestro de tres adolescentes ligeritas de ropa y por supuesto de cascos, cómo las atan como animales, y cómo las agreden y las violan sin ningún tipo de piedad.
Por si se han perdido el capítulo de INOCENTES, la web de Telecinco les ofrece los mejores momentos: «mafioso viola a Carla», o «encerradas y atadas».
¿Violencia gratuita? No lo creo. Violencia rentable, violencia morbosa, violencia para conseguir clicks, conseguir audiencias. Violencia contra las mujeres por parte de varones sin el menor sentimiento humano de identificación con el sufrimiento ajeno. Violencia tolerada institucional y socialmente. Contenidos sin ética ni escrúpulos en el proceso de deseducación y ofensa continua a la dignidad e inteligencia del público en el que se afanan algunos medios.
No todo vale. Hay ámbitos que por su influencia social no pueden defenderse como si fuesen «artistas individuales en la libre expresión de su talento». En la sanidad, en la educación y también en la comunicación hay una responsabilidad pública. Nos va el futuro en ello como sociedad, y les va la vida y su integridad física a las mujeres que siguen sufriendo violencia.