Vamos a ver. DIGO QUE VAMOS A VER, gente, bienvenidos al tour de “las librerías favoritas de Ciro Altabás en Madrid ”, vuestra pasión por la palabra escrita es algo digno de elogiar y, ¿cómo?, sí, bocata calamares al final de la excursión. Uno por persona, claro – ¡¡Que estamos en crisis, pero no tanto!!
Saliendo de la estación de Atocha nos encontramos con La Central de Madrid. No confundir con Pepe, que es el Central del Madrid, ¿eh, chaval?, ¿¿EH??, ¿¿PEPE??, ¿no? Tú es que debes ser más del Barça. El caso es que esta es la Central del Reina Sofía y tiene unas tres plantas dedicadas a literatura de todo tipo, infantil, arquitectura, diseño, novela, inglés, francés. Y luego tiene unas gomas de borrar con forma de sacapuntas que son la monda. ¡La monda!
Ahora estamos en la zona de Huertas, aquí han vivido algunos de los míticos escritores de este país como Cervantes, Lope de Vega o el propio Altabás. Hay librerías cada tres metros y tiendas majas como Fast Cool con libros de diseño y libretas del Principito y camisetas y muñecos de trapo. Muy cuco todo. Además, si miran al suelo de las calles podrán leer poemas y cosas así. Como éste, que es muy bonito: Volverán las oscuras golondrinas, en tu balcón sus nidos a colgar, y otra vez con el ala en sus cristales jugando llamarán. De Bécquer. Ojo a los matrimonios, que después de enseñar esto en otro grupo una mujer le dio una bofetada a su marido, “me dijiste que ese poema lo habías escrito tú!”, ¿eh?, ¿EH? No debe funcionar bien el micro, ¿se me entiende bien?
Esto es el barrio de Chueca, llamado en honor del antiguo Presidente del Gobierno, Fernando Chueca, que se fugó con su Ministro de Economía a Francia. O algo así. Era otra época. Otra época. No como ahora, que hay mucha más libertad… ¡salvo en mi casa, que manda mi mujer! En Chueca nos encontramos la librería Sins Entido, con tebeos de esos que les gustan a los modernos, en blanco y negro y autobiográficos y de buuuuh en el colegio no me hacían caso. Dos hostias bien dadas, si me preguntan a mí. Dos hostias y se les quitaba toda la tontería.
Tebeos de superhéroes y demás los podemos encontrar en la calle de la Luna. Ahí hay muchas tiendas con cosas más modernas tipo Mortadelo o Carpanta. ¿Te gusta Carpanta, chaval? Qué tímido es, que no dice nada. Paralela a Gran Vía tenemos la librería Graphic Book, diseño, publicidad, fotografía, etcétera. Estupenda. Y si callejeamos un poco por el barrio encontraremos unas señoritas que pueden hacer que gastes tu dinero a lo loco… ¡pero es que hay apretones que no se curan leyendo!
Similar a Graphic Book, de libros de diseño y tal tenemos también Panta Rhei en la zona de Fuencarral. Este es un barrio muy moderno, donde te cortan el pelo por cuarenta euros y te lo dejan “dabuten”. Se dice así, ¿no? “Mola mogollón”, ¿eh? Mi Paqui coge la maquinilla y por cinco euros deja bien guapos a los vecinos, pero claro, eso no es “guay del paraguay”…
También en Fuencarral está Tipos Infames, que además de libros, sirven vino. Lo cual es una idea cojonuda. Perdón, no quería decir tacos, que luego se me ofenden. Es una idea “chachi”. De hecho, vamos a hacer una paradita aquí a visitar al señor Roca y me van pidiendo un pajarete.
Señora, pues si usted no es Carmen Sevilla, que sepa que es igual, pero pastada. Claro, que no puede ser Carmen Sevilla, tendría que ser su hija, ¿eh?, ¿usted conoce la Golden?, ¿le gusta el baile elegante?, cuando termine el tour le llevo, que está aquí, en Gran Vía, y en la puerta me conocen y me hacen descuento.
Bien, siguiendo con el concepto de mamarse leyendo libros, tenemos J&J Books and Coffee. La planta de arriba es una cafetería y la abajo, una librería de segunda mano en inglés. Me van pidiendo un sol y sombra. Además, hacen noches de intercambio QUE NO ES LO QUE ESTÁN PENSANDO, y se encuentran cosas muy curiosas; los que sepan inglés, claro, los de mi quinta somos más de francés. ¡¡Y a mí me gustaría pasarme al griego, pero mi Paqui no me deja!!, ¿eh?, ¿EH?, ¡que están muy callados ustedes!, debe ser por el madrugón.
Estamos cerca de Plaza España. Y esta es la librería Ocho y Medio. El director de cine Federico Fellini solía venir a esta librería siempre que venía a Madrid, y le gustó tanto, tanto que llamó a una de sus películas con ese nombre. No, no la he visto. A mí me gustan las películas en cristiano. Y aquí, en el paseo de las estrellas de Madrid, termina el recorrido. Pueden comerse sus bocadillos al solecito en el Parque, que se está tan ricamente. Y los que estén interesados, mañana por la mañana, a las diez, organizo un tour por video-clubs de cine de autor que es, vamos, ¡¡bocatto di cardinale!!