Entre la samba y el tango
el blog de Nazaret Castro
América de venas abiertas, cordilleras inmensas, dolores y silencios, ritmos imposibles, alegrías, carnavales y guerras. América sin tiempo, desencajada y resistente, dadaísta por mandato divino, atesoradora de secretos inefables y riquezas malditas. América sagrada y rebelde, dormida y despierta. América desperezándose tras una larga noche de quinientos años.
América mestiza y valiente, fogosa y explosiva. Amante traicionera, amiga leal. América de flautas y tambores, de samba y tango. América andina, sabia y eterna. América generosa y fértil en los mil colores de la montaña jujeña, los cielos inmensos del Valle del Elqui, los atardeceres sublimes de Alagoas, las playas sagradas del Yucatán.
América doliente y rasgada. América humillada y traicionada, despojada, saqueada, agonizante. Silenciosa y silenciada. América rebelde y resistente, agazapada, atenta. América esperanzada.
América alegre, mestiza, rebelde, cálida, inmensa, sabia. América de mil colores, sabores y tambores. Joven y eterna. América Esperanza.
* Con los amigos de la Córdoba Dadá, conmemorando su quinto aniversario.