Escribiendo sobre África titular así un post podría parecer que voy a escribir sobre tantos y tantos africanos que consiguen llegar a Europa y no tienen su documentación en regla.
Pues no, de lo que voy a hablar es de burocracia, es verdad, y de papeles, pero más bien de papelería…
Esta mañana, tempranito, estaba intentando fijar la programación en la Biblioteca OLVIDO de la proyección de los partidos de la próxima Copa Confederaciones de fútbol, un campeonato menor para entretener los veranos impares.
Como siempre estaba regañando al irresponsable de ‘comunicar’ o dar publicidad de esas actividades por no haberlo hecho ya. Lo mismo que tampoco había colocado los carteles para las películas del sábado y del domingo.
Es fatigante el calor y las condiciones de vida, y no tener recursos para financiar todo esto, pero lo más cansino es tener que decir TODAS las cosas que hay que hacer TODOS los días.
Así que le digo a Aziz, un tipo de lo mejor que tengo en la biblioteca, quizás un poco cansado por todo el lío que hemos tenido la semana pasada con el MINI FESPACO (Festival Panafricano del Cine y la Televisión), que me imprima la lista de partidos y fechas, horas, de los mismos para hacer la programación de proyecciones.
Y me dice que no es posible, que hasta que no llegue la responsable de personal y le dé un papel no puede imprimir nada.
Me quedo con la boca abierta porque hemos vuelto a las andadas.
Las impresoras, la fotocopiadora, la impresora de fotos, están sin papel si no está alguien del ‘despacho’ que se lo pueda dar…
Ya tuve unas buenas broncas al abrir la biblioteca, porque todo era burocracia escrita sin ningún sentido salvo perder el tiempo en cosas absurdas y evitar trabajar en cosas útiles.
Por ejemplo, un enorme cuaderno de registros de la correspondencia que pudiese llegar a la biblioteca con un montón de casillas a rellenar y a firmar y lo mismo para el correo saliente.
En la fila de abajo se puede observar, 3ª columna, mi nombre, 4ª hoja blanca, 5ª, cantidad: 1, 6ª, no pagado, y mi firma
Todo siempre por escrito y quedando constancia con testigos y firmas y cada uno llevándose su copia.
Si le tienes que dar la bronca a alguien es por escrito, ‘demande d’explications’.
Y no es que forme parte de un procedimiento para un despido procedente, nooooo, que despedir a alguien es prácticamente imposible, salvo asesinato, violación o similar (y con testigos).
Es sólo para que quede constancia.
Anuncio típico que puede aparecer en la prensa. En el se ‘invita’ a un monsieur, que no va por el curro desde el 19 de abril, que como no aparezca antes del 15 de junio le vamos a abrir un expediente disciplinario…, así que cuidadito con lo que hacemos…
Lo de la burocracia, burocracia de verdad, no lo de España, aquí en Burkina es terrible.
Es una manera de poner difícil el desarrollo del país, lamentablemente es algo que está tan anclado en su mentalidad como la magia, la brujería o la religión.
Para organizar el pasado MINI FESPACO OLVIDO, la directora, Asséto, se sacó de la manga 13 comisiones diferentes a cual más inoperativa y teniendo que resolver yo mismo sobre la marcha la mayoría de las cosas. Pero eso sí se daba ‘importancia’ a un montón de gente.
Las comisiones del FESPACO OLVIDO, me colaron en las 2 últimas supongo que para que tuviera mi minutito de gloria ya que soy el pagano
Ejemplo: el mismo sábado, cuando terminó la última proyección desastre, se reunió la ‘comisión’ de venta de entradas porque había que liquidar el 50 % a la organización de FESPACO, que aportaban las películas.
Después de más de una hora, de reloj, reunidas 3 personas, el contable, la responsable de informática y un voluntario estudiante de la Universidad (Contabilidad-Economía, no Filosofía y Letras) que hacía de jefe de los azafat@s no consiguieron entregar un estado definitivo, que lo dejaban para el día siguiente.
Eran más de las 12 de la noche y los de FESPACO vendrían a las 7 de la mañana, antes de partir para Ouagadougou y todos estábamos cansados, pero ¡coño!, que no era hacer el presupuesto anual, ni un plan quinquenal.
Así que aturdido, aburrido, hasta las narices y hasta las mismísimas me armé de una calculadora, una hoja de papel (cogí una hoja usada de la papelera para no tener que rellenar el formulario ni firmar por la entrega) y un BIC de mi propiedad (ya había cerrado el ordenador y me daba pereza volver a abrir el Excel) y en 3 minutos le di al contable el informe del estado de la nación festivalera.
Esto es como en el chiste, más vale hacer uno mismo las cosas que mandarlas hacer, pero estoy cansado y un día voy a peder, yo también, los papeles…
GALERÍA DE RETRATOS DE JAVIER NAVAS
