Realidad fragmentada y multiplicada por particulares cajas creadas especialmente para un único propósito: encontrar la belleza de la luz, fotografiar el momento irrepetible en que se escapa. Esa es la propuesta de la artista catalana Rosó Cusó en su exposición Iluminados que estará hasta el 7 de marzo en la madrileña Twin Gallery. Su obra invita al espectador a jugar con los colores, la luz y los elementos que la proyectan e incluye un video realizado con un tomoscopio, una variante del caleidoscopio clásico.