Esta exposición es una exploración de tres modos distintos de tratar la disciplina del arte textil. El denominador común que subyace a las diversas manifestaciones artísticas plasmadas en esta exposición es la fibra natural. A partir de este elemento de origen vegetal y animal se manifiestan tres universos de una fuerza individual y pregnante que abordan el arte textil desde su propia individualidad. El primer proyecto conjunto de Kima, Silvia y Dolors tuvo lugar en el Centre de Documentació i Museu Tèxtil (CDMT), Itineraris17, en septiembre de 2017. En aquella exposición se cruzaron tres miradas artísticas que retaron la solidez arquitectónica del espacio desde las fibras aéreas. En el  Museo Nacional de Artes Decorativas, este nuevo reto se renueva. Kima Guitart lo encara, según sus palabras, “como su interpretación de las banderas budistas”, y agrega: “quizás son las únicas plegarias que en vez de pedir, dan”. Silvia Japkin hace una interpretación de los quipus incas como sistema de comunicación, proyectado por ella en una simbología cósmica. Por su parte, Dolors Puigdemont trata las texturas de sus memorias y recuerdos de la infancia a través de objetos concretos, como el lecho para hilanderas. Muy pocas materias tienen el poder y a la vez la ductilidad de sostener y comunicar en un presente y en un lugar tres historias poéticas tan lejanas geográfica e históricamente. Esta materia no podía ser otra que la fibra que nace de la tierra, hilándose en una estructura material en el espacio y en una historia en el tiempo.