Lunes por la mañana. Carol se aburre como una ostra. Manoli, en su caja, cobra a los clientes mecánicamente, sin ninguna gana. A Carol se le ocurre la genial idea de ir a ver a Manoli, y comienza a andar hacia la caja de esta. Manoli atiende a una clienta, que se marcha. Y Carol llega a su caja con el móvil bajo el brazo. Manoli la mira, mira. Y Carol la está mirando. En su caja, cabreada, mueve Manoli los brazos, y enseña, muy alterada, un listado de teatros. Huye Carol, Carol, Carol, que si te pilla Manoli, hará con tu corazón una entrada pa’l teatro.
MANOLI.- ¡Eh! ¿Dónde crees que vas?
CAROL (ya casi en su caja).- Es que de repente me has dado miedo.
MANOLI.- ¿Yo?
CAROL.- Sí, tú, con esa cara que pones… Y esos aspavientos con los brazos.
MANOLI.- ¿Qué cara? ¿Qué aspavientos?
Carol imita a Manoli en la cara y el movimiento de brazos. Manoli ríe como si fuera una bruja de cuento.
CAROL.- He ido a verte porque me aburría.
MANOLI.- Muy bien, y yo he venido ahora a verte a ti para que decidamos qué hacer esta semana.
CAROL.- ¿Decidir? A mí se me da fatal decidir.
MANOLI.- Pues decido yo, entonces. Vamos a ir al Festival de Cine Alemán, para recordar los viejos tiempos en que iba a clase de alemán y aprendí dos palabras.
CAROL.- ¿Hay teatro en el Festival de Cine Alemán?
MANOLI.- No, como su propio nombre indica, lo que hay es cine.
CAROL.- Entonces no voy, porque yo tengo que ver teatro.
MANOLI.- ¿En serio? ¿Me vas a dejar sola?
CAROL.- Bueno, es que si coincide con las obras que quiero ver, y para las que estoy sisando de la caja del súper…
MANOLI.- Pero, ¿y si lo bueno de esta semana está en el Festival? La primera película es el martes con Gundermann, sobre un músico alemán que murió en los años 80. Y luego el miércoles podemos ver dos o tres seguidas, y el jueves, y el viernes… Y el sábado y el domingo también. El domingo vemos Jim Botón, basada en una novela que yo me leí de joven…
CAROL.- Sí, todo muy bonito.
MANOLI.- Nos podemos pasar las tardes enteras metidas en el Festival de Cine Alemán.
CAROL.- Que ya te he dicho que yo no voy a ir.
MANOLI.- ¿Cómo que no?
CAROL.- No voy a traicionar al teatro yendo al cine.
MANOLI.- Pero, Carol, no digas chorradas…
CAROL.- Que no, que te digo que no…
MANOLI.- Pues yo voy a ir aunque sea sola.
CAROL.- Pues muy bien.
MANOLI.- No pienso ir contigo al teatro a ver nada esta semana.
CAROL.- Júralo. Júralo sobre la caja registradora.
MANOLI (pone la mano sobre la caja registradora).- Juro que esta semana voy a ir únicamente al cine y ni una sola vez al teatro.
CAROL.- Muy bien.
MANOLI.- ¿Te vienes al cine conmigo aunque sea un día?
CAROL.- No… Voy a ir al teatro.
MANOLI.- ¡Qué extremista te has vuelto!
CAROL.- Ya ves…
MANOLI.- ¿Y qué vas a ver?
CAROL.- Pues varias obras.
MANOLI.- ¿Cuáles?
CAROL.- Para qué lo quieres saber, si has jurado ir al cine toda la semana.
MANOLI.- Bueno, pues por hablar de algo, pero realmente me da igual… No me importa lo que vayas a ver.
CAROL.- Ya… Pues por eso no te lo voy a decir.
MANOLI.- Bueno, pues allá tú.
CAROL.- Allá tú con tu Festival de Cine Alemán.
Manoli vuelve a su caja. Carol queda pensativa. Unos minutos más tarde va hacia Manoli y se lo cuenta todo.
CAROL.- A ver, que he pensado que te lo voy a contar, total, qué más da…
MANOLI.- No, si no es necesario…
CAROL.- Pues ahora te fastidias, que te lo cuento…El viernes quiero ver Los Remedios, que está en Ex Límite; es una obra del actor Fernando Delgado-Hierro que habla de su infancia y de la de otro actor y amigo suyo, Pablo Chaves, en el barrio sevillano de Los Remedios.
MANOLI.- Pues muy bien…
CAROL.- Y no la vas a poder ver, porque se acaba esta semana. Y luego está el aniversario de la compañía Ultramarinos de Lucas, con tres espectáculos en la Cuarta Pared, y voy a ir jueves y sábado. Y luego vuelve La noche justo antes de los bosques con Juan Ceacero al Conde Duque, y voy a ir el miércoles y además está en el Español Los bancos regalan sandwicheras y chorizos y voy a ir el domingo. Y el lunes hay en el María Guerrero una lectura dramatizada de una obra de Carlos Contreras Elvira que se llama La vida entera. Fíjate si tengo cosas para ver. ¿Te da envidia?
MANOLI.- Eres una lista. Lo haces para ponerme los dientes largos. Me haces jurar y luego me cuentas la cartelera teatral. Pero no me importa, porque yo adoro el cine alemán.
CAROL.- Pues muy bien.
MANOLI.- Pues genial.
CAROL.- Pues eso.
MANOLI.- ¿Y el martes qué ves?
CAROL.- ¿El martes?
MANOLI.- Es que no lo has nombrado en tu lista de cosas para ver.
CAROL.- Ah, pues espera que miro mi agenda. (Saca unos papeles del bolsillo y los consulta.) Oh, mira, pues no tengo nada ese día, pues tal vez me toque las narices… Me lo voy a apuntar… (Escribe sobre los papeles.) Tocarme las narices.
MANOLI.- Oh, ¿y el martes no te vienes a la inauguración?
CAROL.- ¿Qué inauguración?
MANOLI.- ¡La del Festival de Cine Alemán!
CAROL.- Sí, hombre, abandonar el teatro por el cine, ni loca…
MANOLI.- ¡Pero si esa tarde no tienes teatro!
CAROL.- Bueno, pero no. Me tengo que tocar las narices, ya lo he apuntado en la agenda.
MANOLI.- Yo he jurado que no iría al teatro esta semana, pero tú no has jurado que no irías al cine.
CAROL.- Que me dejes en paz, que siempre tratas de convencerme de todo, pero no, no te pienso ni escuchar…
Oscuro.
(¿Aguantará Manoli sin ver teatro toda la semana? ¿Irá Carol con Manoli el martes a ver la película? ¿Por qué ha dejado Manoli de ser la más extremista con el tema del teatro y ha pasado a serlo Carol? Para saber todo lo que pasa en este terrible supermercado, pulsar aquí.)
@nico_guau
