* Los dibujos son de Andrea Reyes de Prado.
Jueves, 1 de marzo
—En fin, soy rubio.
—Como solución a todos tus problemas.
—Es la causa y solución de mis problemas.
—Como el alcohol.
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«No es el amor lo más valioso que un ser puede entregar a otro, sino su vulnerabilidad». Lo escribe Miguel Ángel Barroso en una reseña en ‘ABC Cultural’.
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Viernes, 2 de marzo
—No sé cuántas páginas más le voy a dar a este libro. Primer capítulo: una madre apenada porque su hijo adolescente se va a la uni y la mañana anterior lo descubre diciéndole a su novia: chúpamela, zorra. Segundo capítulo, en primera persona, en un supuesto lenguaje de chavales que se conocen en la uni y hablan de fiestas y tías buenas. Yo no estoy para estas historias. No sé si seguir leyendo en el viaje de vuelta o descartarlo ya. La pena es que no tengo más libros en la mochila. Lo iba leyendo y decía: pero qué es esta mierda. Me daba vergüenza que la gente pudiera ver lo que leía.
—Parece que estoy viendo esa cara de asco que pones de vez en cuando.
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Domingo, 4 de marzo
Entrevista a Éric Vuillard en ‘Babelia’:
«El papel de la ficción cambia en función del momento político en que nos encontremos. Por ejemplo, cuando se vive en un periodo de fuerte autoridad, la ficción puede ser una manera de escapar a la censura. Hoy no nos encontramos en esa situación. Recurrir a la ficción puede ser engañoso. Como lector, me siento cada vez más ávido de realidad, de obtener claves de comprensión».
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* Es relativamente fácil adquirir el hábito de la lectura; es mucho más difícil llegar a ser un lector exigente y con criterio.
* Para plantear la cuestión de que lo “visual” ha triunfado sobre el “texto”, es necesario ignorar el hecho de que el texto es también un medio visual.
* Si la lectura fuera tan fundamental como les gusta afirmar a sus partidarios, ¿por qué necesitamos toda esta presión organizada para animarnos a coger un libro?
* ¿No podéis con la poesía? Que nos os avergüence admitirlo: no estáis solos. A veces para como si los únicos capaces de leer poseía por placer sean los mismos que la escriben.
‘Contra la lectura’ (Blackie Books) —Mikita Brottman.
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Lunes, 5 de marzo
En la entrevista de Alfonso Armada a Javier Marías:
«Yo escribo para los que leen, y tienen una comprensión lectora y pueden estar de acuerdo o en desacuerdo. Para los que ni siquiera escuchan, o se guían por lo que le han dicho que he dicho, para esa gente no escribo […] No tiene mucho sentido escribir en prensa si se limita a decir lo que la época ya piensa por todos, y cada vez más».
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Martes, 6 de marzo
—Volviendo al debate anterior, al final siempre son periodistas que quieren escribir reportajes «como una novela». Los novelistas (pienso en Didion, pero también Naipaul, o incluso Carrère, pero tambien Cercas) no tienen necesidad de escribir «como una novela», escriben no-ficción con mayor naturalidad. […] Es interesante la reflexión de Carrère sobre cómo hizo ‘El adversario’. Al principio quería que fuese como ‘A sangre fría’, mirada objetiva, muchos detalles, omniscencia, sin yo… Y no le salía. Hasta que dijo: voy a escribir «con naturalidad» mi experiencia siguiendo el caso. Y le salió el libro, en primera persona, contando elementos de su vida y su experiencia reporteando el caso.
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Miércoles, 7 de marzo
Del documental de Shane Salerno sobre Salinger me quedo, entre otras cosas, con esto que dice una mujer que relacionó con el escritor:
«Me dijo: ‘Jean, tienes que aprender a no decir lo obvio'».
Me ha recordado a esto de Marías sobre su padre en la entrevista con Armada:
«Cuando mis hermanos y yo hablábamos de algo y discutíamos de algo nos decía: ‘Ya, está bien. Pero piensa, piensa más, ¿qué más?’. Y le respondíamos: ‘No sé, ya está’. E insistía: ‘A ver qué más se te ocurre. Cuando creas que ya no se te ocurre algo más, piensa un poco más’. Y eso nos lo inculcó a todos y yo creo que es una buena cosa. Esfuérzate un poco más, no te quedes a gusto con lo primero que has pensado, ni siquiera con lo segundo. Mira si hay algo más, si se puede ahondar algo más en eso, y a lo mejor encuentras que sí. Esa es una buena enseñanza, yo creo».
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—Ahora mismo en el metro de París: por el altavoz han empezado a recitar un poema de Verlaine.
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Dwight Garner sobre Eve Babitz en su crítica a ‘El otro Hollywood’:
* La autora se podría haber limitado a salpicar de nombres su trayectoria a lo largo del libro, pero no es tan perezosa. Está demasiado ocupada interesándose por todo.
* Decide que lo que tiene que hacer con su vida es no ser aburrida. “Madre”, dice siendo adolescente. “Creo que voy a ser aventurera. ¿Te parece bien?”
* Con respecto a una determinada clase de adolescente californiano, cuenta: “Cuando llegan a los quince años y llega la belleza, es muy emocionante. Se parece a cuando alguien recibe una herencia y, como pasa con las herencias, es divertido estar cerca cuando la gente tiene el dinero en sus manos por primera vez, y ver cómo lo gasta y en qué”.
* Pierde la virginidad mientras bebe Rainier Ale.
* Leer a Eve Babitz es como estar en la carretera un cálido atardecer con lo que ella llamó en otro libro “aire acondicionado 4/60”, es decir, conduciendo a 60 millas por hora con las cuatro ventanillas bajadas. Uno puede sentir el aire en el pelo.
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Jueves, 8 de marzo
David Remnick en el documental de la HBO sobre Ben Bradlee, el mítico director del ‘Washington Post’:
«Nunca lo olvidaré. Visitábamos mi esposa y yo a unos amigos en la playa. Ben tenía casi 90 años. Llevaba una camisa de vestir, abierta. Estaba bronceado, peinado hacia atrás. Y me di cuenta de que solo moviendo un dedo Ben podía hacer que mi esposa me dejara”.
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Viernes, 9 de marzo
—Te acabo de tirar la botella de tónica que tienes en la nevera. ¿Motivo? Caducada desde agosto de 2017.
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Entrevista a Edouard Louis en ‘Babelia’:
«El mundo ya tiene suficiente ficción. Hasta los Gobiernos crean ficción. Yo no me opongo programáticamente a la ficción, pero cuando empecé a escribir me dije que no podía permitírmela».
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Sobre Salinger:
«No estaba nada contento con las revistas generalistas; o bien cambiaban los títulos de los textos o bien quitaban secciones o las reescribían, y siempre sin permiso del autor. [Sus relatos] aparecían de formas que él no se esperaba. Estaba muy decepcionado con casi todos los editores, y por supuesto ni siquiera había llegado todavía a las editoriales de libros.
Habló de sus editores y del tremendo grupo de parásitos que estaban hechos. Dijo que los editores nunca estaban del lado del escritor. Que los únicos editores que le merecían algún respeto, y de hecho le merecían un gran respeto, eran los del ‘New Yorker’: Harold Ross, William Shawn, Gus Lobrano y William Maxwell. No paraba de deshacerse en elogios hacia el ‘New Yorker’ y de decir que era el único lugar donde quería publicar».
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Lunes, 12 de marzo
—Me acaba de mandar un audio de 3.15. Y todo para algo que me podrá contar en 10 segundos. […] Lo estoy escuchando. Llevo 1,7.
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«Observamos aquí algo frívolo y auto-indulgente. Está claro que a todos nos gustaría ‘creer’ en algo, nos gustaría apaciguar nuestras culpas privadas con causas públicas, nos gustaría deshacernos de nuestro yo aburrido, nos gustaría, quizá, transformar la bandera blanca de la derrota en casa en una valiente bandera blanca en una batalla fuera de casa. Y está claro que está muy bien hacer todo esto; así es cómo, desde tiempos inmemoriales, se ha avanzado. Pero me parece que todo esto está muy bien sólo mientras no nos engañemos a nosotros mismos sobre lo que hacemos, y por qué. Está muy bien sólo mientras recordemos que todos los comités consagrados a una causa específica, todos los piquetes de huelga, todos los audaces manifiestos en el ‘New York Times’, todas las herramientas de la ‘agitprop’ en todo el espectro político no nos otorgan ninguna virtud automática. Está muy bien sólo mientras reconozcamos que la finalidad puede ser, o no, adecuada, puede ser, o no, una buena idea, pero que en cualquier caso no tiene nada que ver con la ‘moralidad’. Porque, cuando empezamos a engañarnos a nosotros mismos y a pensar que queremos algo o necesitamos algo, no porque obtenerlo sea una necesidad pragmática para nosotros, sino que obtenerlo sea un imperativo moral, es entonces cuando nos sumamos al bando de los locos del momento, y es entonces cuando cuando en este país se escucha el delgado sollozo de la histeria, y es entonces cuando tenemos un problema grave. Y sospecho que ya estamos ahí».
(Joan Didion, Sobre la moralidad, 1965)
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Martes, 13 de marzo
Hoy en la visita de los niños al periódico:
—¿Qué hacen los periodistas?
—Veis las noticias en las pantallas las 24 horas y después las contáis.
—Ese es el problema, que vemos las noticias por la pantalla.
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Miércoles, 14 de marzo
—A mi sobrino le ha regalado un conejo de Amazon, dice R.
—Qué es un conejo de Amazon.
—Un conejo. Normal. Pero que te lo trae Amazon.
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—Cristiano Ronaldo es el futuro Michael Jackson.
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Viernes, 16 de marzo
* Las ideas son el principal recurso de los periodistas y, por lo general, el más escaso en el mercado, pero a veces aparecen.
‘La vuelta al mundo en 72 días y otros escritos…’. Nellie Bly.
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Domingo, 18 de marzo
* Estoy tan harta de pedantes y de engreídos demoledores que podría ponerme a chillar.
* Lane no podía abandonar una discusión hasta que se resolvía a su favor.
* Estoy harta de ego, ego, ego. El mío y el de los demás. Estoy harta de que todo el mundo quiera llegar a alguna parte, hacer algo notable, ser alguien interesante.
‘Franny’. J.D. Salinger.
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* No sé de qué os sirve saber tanto y ser tan listos si eso no os hace felices.
* Si le vas a declarar la guerra al Sistema, dispara como una chica buena e inteligente.
* El resto, exagerando muy poco, eran libros. Libros que se leen. Libros que se van dejando. Libros con lo que no se sabe qué hacer. Pero libros y más libros.
* Por una costumbre que tenía desde hacía varios años, reprimió cualquier pequeño matiz de alegría que hubiese podido aparecer en su voz.
* Tú crees que todo el mundo está hecho de hierro o algo parecido.
‘Zooey’. J.D. Salinger.
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Lunes, 19 de marzo
—Cuando dices de un libro que en él «se mezclan la pasión, la intriga y el retrato de una época» es que no lo has leído.
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Martes, 20 de marzo
—Hola, señor.
—Jaime, esa niña te ha llamado señor.
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Miércoles, 21 de marzo
«I was a rising star in that world from 1953 onward,” he said. “I was regarded as the brilliant young critic till Susan Sontag came along and eclipsed me, partly because of her looks, I can tell you.” He added, “I’m not famous for my modesty, whether false or otherwise».
Podhoretz.
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—No soy tan fotogénica como Didion.
—Eso lo dices porque no tienes un Chevrolet. Te compramos uno y ya verás.
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En el tiempo que llevo en ABC, Alfonso ha dirigido el máster, incluyendo mi promoción, ha publicado entrevistas y reportajes, ha dirigido el Cultural y ha hecho de guía en las las visitas de los colegios al periódico. Es habitual ver llegar a un montón de niños traviesos directos al ‘rosco’. El ‘rosco’ son las mesas centrales, en forma circular, donde se sientan los subdirectores y se piensa el periódico. Siempre les dice lo mismo: ¿Sabéis lo que es un periódico?, ¿sabéis lo que es un columnista? Luego les explica la redacción: esa sección de ahí, las más grande, donde está Jaime, es la más importante del periódico. Las mesas están vacías porque los redactores están en la calle buscando noticias. Me gusta poner el oído porque en algunas respuestas de los niños hay verdades que los gurús nunca sabrán. A vosotros, ¿qué cosas os interesan?, les preguntó una vez. ¡Los videojuegos! Pues en esa sección de allí, les respondió, señalando al Cultural, hablamos de videojuegos. ¡Hala, yo quiero leer periódicos! Luis, coordinador del máster y compañero inseparable de Alfonso, a veces viene a comentar conmigo la jugada: ¿Has oído lo que ha dicho el niño? Luis me contó una muy buena. Estaban en la biblioteca y Alfonso les preguntó: ¿Esto qué es? Un tanatorio, dijo una niña. La última que tengo apuntada es de hace unos días. ¿Qué hacen los periodistas? Veis las noticias en las pantallas las 24 horas y después las contáis, dijo un niño. Ese es el problema, que vemos las noticias por la pantalla. Esta semana hemos tenido visitas de niños todos los días. Visitas que han durado más de lo habitual. Los niños no tienen ni idea de lo afortunados que han sido. Así es Alfonso. Hasta el último día enseñando. Y no solo a los niños.
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Jueves, 22 de marzo
En una entrevista de Jerry Williams a Hunter S. Thompson en 1972:
—Bueno, ¿usted había indicado en una de las columnas que [George Meany] estaba muy enfermo y tuvo un derrame?
—Oh. Formaba parte de mi estilo.
—¿En serio? Lo leí varias veces y no estaba seguro de si sólo estaba bromeando al respecto o si de verdad ocurrió.
—¿Dije un derrame? Dije burbujas en el cerebro. Supongo que eso es un aneurisma…, sí, un derrame cerebral. Bueno, en efecto, políticamente, sí, tuvo un derrame. Ése es uno de los problemas con mi columna.
Se lo paso a M., que me responde:
—No me sorprende. Nunca me ha gustado. Tom Wolfe también ficcionaliza, pero ‘The Right Stuff` es una obra maestra, me da igual que haya ficción (como Alexievich, o Kapuscinski).
—Doble vara de medir.
—¡No! Buenos y malos escritores. Buena y mala literatura, mejor dicho.
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Lunes, 26 de marzo
Entrevista a Martin Parr en ‘El Mundo’:
«Hay una gran hipocresía en la fotografía humanitaria. Van a la guerra, a las zonas con hambruna, hacen sus fotos y sus retratados nunca las ven. Su elemento de explotación está clarísimo, igual o mayor que el mío. Pero camuflan su hipocresía bajo el argumento humanista del periodismo activista. Yo lo he visto mucho en Magnum: el subidón que sienten muchos compañeros al viajar a estos lugares desgraciados. […] Yo llevo la hipocresía en la sangre, pero ellos también. Es el esnobismo del periodista activista. Nadie cuestiona sus motivos. Pero cuando yo fotografío un turista o un supermercado sí que se me cuestiona».
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Martes, 27 de marzo
Hunter S. Thompson: «Conozco lo suficiente para tener curiosidad».
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Miércoles, 28 de marzo
El ‘Por qué escribo’ de Hunter S. Thompson.
Público: Doctor Thompson, ¿cuáles son los principales objetivos de su escritura y qué es lo que ha estado tratando de conseguir a lo largo de su carrera?
H. S. T.: Dinero.
[Aplausos, risas, etcétera].
H. S. T.: No, no quiero que piensen que estoy bromeando porque es verdad. ¿Qué creen que estoy tratando de conseguir?
Público: Algún otro objetivo además del dinero.
H. S. T.: ¿Como qué? Mire lo que me ha hecho la fama. Que se queden con la fama, que yo me encargaré de la fortuna a partir de ahora. Eso le confunde, ¿no? Una respuesta así.
Público: Sí.
H. S. T.: ¿Qué esperaba que dijera?
Público: No lo sé. Es sólo que cuando dijo que su objetivo principal es el dinero suena muy contradictorio.
H. S. T.: ¿Por qué? ¿Qué otra cosa hay?
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Ayer tuiteé con mucha euforia la entrevista que le hicieron en ‘El País’ a Christopher Wylie, que ha filtrado la información del escándalo que ha puesto contra las cuerdas a Facebook. Puse esto: «Hacía tiempo que no leía algo tan interesante en un periódico».
V. me ha reconocido hoy mi astucia: «Me gustó tu tuit ayer crítico con la prensa mundial. Fuiste contundente contra la prensa mundial. Pusiste el tuit en el cielo. Espero que tu tuit no caiga en saco roto y la prensa mundial espabile”.
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Jueves, 29 de marzo
“He bloqueado a Xoel López de mi Spotify”.
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Sábado, 31 de marzo
En L’alinea, una librería en el centro de Bayona, hay una pequeña sección dedicada a literatura española. Estos son los autores:
María Barbal.
Mercè Rodoreda.
Xavier Moret.
Juan Antonio García Marcos.
Félix Urbayen.
José Luis Sampedro.
Rosa Montero.
Fernando Clemot.
Arturo Pérez-Reverte.
Rosario Raro.
José Carlos Llop.
Andrés Barba.
Juan Marsé.
Javier Azpeitia.
Pablo Martín Sánchez.
Miguel de Cervantes.
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Lo que he leído en marzo:
– ‘Contra la lectura’ (Blackie Books) —Mikita Brottman.
– ‘La vuelta al mundo en 72 días y otros escritos…’ (Capitán Swing) —Nellie Bly.
– ‘Río revuelto’ (Gatopardo) — Joan Didion. 15 marzo.
– ‘Franny y Zooey’ (Alianza editorial) —J.D. Salinger.
– ‘Nos parece mejor’ (Libros del K.O.) —Nacho Carretero.
