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A mi antojo: octubre 2017

 

* Las ilustraciones son de Andrea Reyes de Prado.

 

Domingo, 1 de octubre

 

Reportaje de Eduardo Lago en ‘Icon’:

 

Entrando en otra habitación anuncia: «Lo que van a ver aquí no se lo enseño a todo el mundo». Gay Talese se refiere a la sucesión de armarios donde guarda sus prendas de vestir. Cuanto hay en ellos está meticulosamente registrado y etiquetado. En el primer armario, donde caben varias personas de pie, se encuentra su colección de sombreros, confeccionados en exclusiva para él en Colombia, Panamá o Francia. Gay Talese muestra la etiqueta de uno tipo fedora en la que se puede leer: «Hecho a mano especialmente para Gay Talese». La pregunta es inevitable: ¿por qué le da tanta importancia a llevar sombrero? «Mi padre decía que un hombre sin sombrero no está vestido del todo», responde. Al fondo del armario hay varios raíles en los que se alinean infinidad de corbatas, dispuestas conforme a una cuidadosa gradación de colores («amarillo, verdoso, negro azulado», recita el escritor).

 

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Sit around

Sit around

In the yard

Where they are

Where they go

When it’s cold

Outside

Company comes to make you feel accepted

You do what the company wants to, asks for

When it’s cold outside

 

When Company Comes, de The Feelies.

 

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Lunes, 2 de octubre

 

—Lo que más me preocupa es que el Atlético no pase la liguilla de Champions. Es un aliado útil para cargarse al PSG en cuartos.

 

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Gérard Depardieu y Santiago Segura en ‘El País Semanal’:

 

Se ríen juntos hasta de Leonardo DiCaprio, por sus excesos frente a la cámara en su papel de superviviente en El renacido, también rodada en parte en Argentina. “Leo era un gran actor, pero ahora hace mierda con perfume como El renacido, con todos esos gruñidos”, arranca el francés. “Le dieron el Oscar por poner cara de frío y de que lo está pasando mal cuando tiene frío. Eso no es actuar. Eso es como la anécdota de Laurence Olivier y Dustin Hoffman, que tenía que hacer la escena de la tortura de Marathon Man y desapareció un día entero y luego volvió con ojeras, sin dormir. Y Olivier le dijo: ‘¿Por qué no pruebas a actuar?”.

 

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Martes, 3 de octubre

 

— Es que este es un barrio conflictivo, está en un nivel 7. Hay muchos robos. Y luego entre todo esto hay algún ángel, como tú.

 

El carpintero.

 


 

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Pla, en 1934, a propósito de la revolución de Asturias:

 

«Debe ponerse de manifiesto, porque es un hecho trascendental, que en la prensa de Madrid, tradicionalmente desafecta a Cataluña, se ha iniciado una ofensiva general contra nuestras cosas, que ya no tiene por objeto la crítica a Esquerra, sino que se refiere a Cataluña como un todo».

 

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Miércoles, 4 de octubre

 

Escribe Antonio Lucas en su columna de hoy:

 

La soledad es multitud. (Le tomo por un rato esta frase a un joven y ágil compañero de ABC, Jaime G. Mora). Me gusta lo que esas palabras traen por dentro, su manera de apuntar al lugar de los solos. No únicamente quienes no tienen compañía, sino los solos.

 

—Joven y ágil. ¿Te ves joven y ágil? —me pregunta A.

—Qué va.

—Suena a que eres un señor mayor pero aún te ven joven y ágil.

—Un viejo en un cuerpo de joven.

—No, tú no eres viejoven.

—¿Qué soy entonces?

—Me refiero a que eres como se suele ser a tu edad, que no pareces ni más mayor ni más joven.

—¿Soy tan típico?

—No. Digo en lo general, que no eres viejoven, tampoco serías lo contrario. Me estás poniendo de los nervios.

—No soy típico pero soy típico para tener 30, no entiendo.

—Vamos a ver: un poco de paciencia que me acabo de levantar.

—Inténtalo.

—Haces cosas típicas que se hacen, en general, en los 30 años. Pero dentro de tu personalidad tienes rasgos menos frecuentes.

—Entonces soy un viejoven.

—No, porque no son característicos necesariamente de gente mayor. Un viejoven es el que hace cosas propias de personas más mayores.

—Soy infantil, entonces.

—Me estás tomando el pelo.

—Dices que soy un treintañero adolescente.

—Yo no he dicho eso.

—Es el titular de la conversación.

—Joder Lucas qué bien habrías estado calladito.

 

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Jueves, 5 de octubre

 

Milena Busquets:

 

«Considero que la imaginación es la mayor de las virtudes (no sólo para los escritores, para todo el mundo) porque es una cualidad que actúa sobre todo: sobre la cabeza, sobre el corazón y sobre la inteligencia. La imaginación es la capacidad de meterse en la piel del otro, de entender. De ir a tomar copas con unos amigos y de darse cuenta de que uno de ellos está un poco raro. Entonces, al llegar a casa, coges el teléfono y aun arriesgándote a hacer el ridículo (pero ¿a quién le importa hacer el ridículo pasados los 14 años?) le llamas para preguntar cómo está, para asegurarte de que todo esté en orden».

 

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Entrevista a Carlos Zanón en ‘Babelia’:

 

—La suya debe de ser la novela que más barrios recorre en una ciudad en la que siempre se bromea con escribir “la gran novela sobre Barcelona”. ¿Por qué?

 

—Tal vez porque es una ciudad que nunca ha tenido poder, nunca ha habido corte. Es una ciudad de derrotas, de perdedores y eso genera literatura… Tiene dos lenguas, dos culturas pero muy mezcladas, muy libres. Nos gusta recrearla, inventarla. Cualquier cosa que expliques sobre Barcelona es como cualquier cosa que expliques sobre Elvis: puede ser.

 

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Viernes, 6 de octubre

 

Chaves Nogales, 26/X/1934:

 

Hay que poner las cosas en su punto. No porque los revolucionarios merezcan atenuantes para sus crímenes, sino porque creo firmemente que, a la larga, todos esos detalles de barbarie, positivamente falsos, provocarán una reacción favorable a los revolucionarios. Si se ha dicho que en Sama se comieron un cura y luego resulta que no se lo comieron, sino que lo asesinaron y dejaron el cadáver abandonado dos días en una calle, parecerá que el crimen es menos execrable que lo que realmente fue. Sospecho que alrededor de si se lo comieron o no va a entablarse la batalla de la ferocidad o no ferocidad de los revolucionarios, y como al final va a comprobarse que no es verdad que se lo comieran, quiero prevenir a mis lectores contra una acción favorable a los mineros, que no estaría justificada. Hay que prescindir de ese cartel de crimen que explica la revolución como los charlatanes explican el crimen de Cuenca. La opinión española no es, ni mucho menos, el auditorio de una plazuela aldeana. Estas versiones escalofriantes que ha acogido la Prensa de toda España —nuestro periódico inclusive— han producido ya un movimiento de contracción en la opinión pública asturiana, que dificulta la misión informativa. Cuando uno llega a un pueblecito cualquiera de las cuencas mineras diciendo que es periodista, inmediatamente se ponen en guardia todos los vecinos, los de la derecha y los de la izquierda, y el empeño de todos es demostrarse a uno que allí no ha pasado nada y escamotean cualquier detalle del que pudiera deducirse un acto de crueldad. Yo he visto a caracterizados individuos de Acción Popular y aun a bizarros fascistas de Sama y La Felguera indignarse por el agravio que se hacía a aquellos pueblos al suponer que los revolucionarios habían cometido los actos de barbarie que se les han atribuido. Así se da la paradoja de que gentes de orden y de humanísimos sentimientos le digan a uno, indignadas:

 

—No, señor. Eso no es verdad. Asesinaron a los sacerdotes, pero nada más.

 

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Sábado, 7 de octubre

 

“No nos separamos nunca / la gente cree que se deja / la gente cree que se separa / la gente se equivoca nunca se deja nunca / entre los seres existe una fuerza / algo bajo la vida visiblea / algo más allá de los gritos de los llantos y de las separaciones / una fuerza que se calla / una fuerza que se queda ahí sentada silenciosa cuando todos se han ido / cuando se han dicho todas las palabras / cando se han dado todos los golpes o todos los besos / una fuerza muy dura / muy dura / que mantiene a las personas juntas / uno cree que se va / cree que da media vuelta / para vivir otra vida escapar / hacer tabla rasa / bajar el telón / no se baja nada / la fuerza está ahí / donde quiera que vamos / está delante de nosotros / nos mira / vemos una imagen un perfume una canción y todo está ahí / otra vez nuevo y emotivo feliz y lleno de promesas”.

 

‘Ensayo (Pascal Rambert), en el teatro Pavón.

 


 

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Domingo, 8 de octubre

 

Entrevista a José María García en ‘Papel’:

 

—Sonría—, le interrumpimos.


—No hay cosa que más me joda en el mundo que un fotógrafo diciéndome que sonría.

 

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—Pascal Rambert en ‘La clausura del amor’: «Por supuesto tu pecho y tu mirada por supuesto me han excitado muchísimo / también me ha excitado muchísimo tu cerebro / la fuerza sin igual de tu cerebro esa fuerza de impacto / además seguramente era ahí mi amor donde residía el amor / en la fuerza de impacto de tu cerebro / yo pensaba que era tu sexo / pero no era en la fuerza de impacto de tu cerebro / y en tus muñecas / ahora tus muñecas me dejan frío / el amor es un cadáver y tú llevas su piel.

 

—»El amor es un cadáver y tú llevas su piel». A veces hay frases tan buenas que parece que cobran forma física. Que se pueden tocar casi.

 

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Típica frase del cultureta pedante: “La primera vez que vi [inserte aquí título de película de culto] no me gustó”.

 

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Lunes, 9 de octubre

 


 

—Jaime, vas con dos periódicos en las manos. Solo tú y A. vais así por la redacción, leyendo los periódicos.

 


 

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Martes, 10 de octubre

 

En la entrevista de ‘Jot Down’ a Jorge Ilegal:

 

—Pero te diré que también tengo sueños visionarios, producto de la experiencia diaria. Muchas canciones las escribo dormido. Me levanto y fluyen. son noches de estas turbulentas. Cuando duermes de colocón se dispara más la parte subconsciente, que es la más inteligente que tenemos, y de ahí salen muchas cosas.

 

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Entrevista a Vicente Molina Foix en ‘Babelia’:

 

—Yo solamente he amado, lo que se dice amar, una vez en mi vida. Las otras veces no es que hiciera cabronadas, al menos no intencionadamente. No. Yo no sabía amar, o quizá no me interesaba tanto amar durante un periodo.

 

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—He pasado una noche de película de Woody Allen.

 

—¿De película de las antiguas o de las nuevas?

 

—No lo sé, pero ha sido todo dantesco. Llego casi sin batería a casa, a la una y pico. Se me apaga el móvil. Lo pongo a cargar, pero no se enciende. Lo cambio de enchufe, lo pongo en otro… lo llevo al enchufe del otro lado de la cama y, al hacer eso, el somier se desengancha y me caigo. Pum. Qué coño. El móvil sigue sin cargarse y yo hostiado. Me pongo a arreglarlo, pesa la leche, no puedo. Me araño en el brazo. Las dos de la mañana. Aparto el colchón y lo termino consiguiendo. El móvil siguen sin encenderse. A ver cómo me levanto yo al día siguiente sin la alarma antinuclear de mi teléfono. El iOs 11 de los cojones. Pues tendré que coger el cable que tengo en el coche. Así que algo de la habitación, sin darme cuenta de que tenía activado un modo de alarma que salta en todos los puntos de la casa salvo mi habitación. Entro en el salón y la cámara de seguridad empieza a hacer fotos con flash. La alarma sonando a tope. Dos y cuarto de la mañana. Me llaman de la alarma al móvil, que está apagado. Me llaman al aparato que hay para comunicarse. «Di la palabra clave». Palabra clave. «Ha sido un error. Todo bien». «Buenas noches». Me pongo unas chanclas y bajo en pijama a por el puto cable. Por fin el móvil se enciende. Desactivo las alarmas que había puesto en el iPad y por fin me puedo dormir. No he dormido ni cuatro horas.

 

—Es de película antigua, claramente. De las buenas.

 

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—¿Qué piensas de lo que ha dicho Puigdemont?

 

—He visto ahora un anuncio de Durex contra la marcha atrás. El anuncio dice que la marcha atrás no es segura, que una de cada tres mujeres se quedan embarazadas por no usar preservativo. Eso es lo que ha pasado hoy en el Parlamento de Cataluña.

 

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Jueves, 12 de octubre

 

—Vámonos de aquí, por favor.

 

En la feria del libro antiguo de Recoletos.

 

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Sábado, 14 de octubre

 

Manuel Vicent en ‘El País’:

 

 

Cuando un artista es muy poderoso, acaba siempre por crear un público a su propia imagen y semejanza. En la muestra del pintor Ignacio Zuloaga, que se celebra en la sala Mapfre de Madrid, se puede comprobar una vez más esta relación mágica. Consiste en que la mayoría de espectadores de la obra de un gran artista suele tener un diseño físico muy parecido a las figuras de los cuadros. Esta misteriosa atracción mutua se da a menudo en los grandes eventos artísticos en galerías y museos. El arte joven produce espectadores jóvenes, la pintura abstracta atrae a espectadores desinhibidos, la estética pop se ve rodeada de espectadores alegres y desenfadados, el realismo social engendra espectadores serios y comprometidos, el informalismo genera estetas informales, las instalaciones, performances y happenings disparatados acumulan siempre gente loca alrededor, que juega a convertirse ella misma en obras de arte.

 

 

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Domingo, 15 de octubre

 

En el ‘Cultural’ de ‘ABC’:

 

¿Cómo de difícil resulta el desafío de colarse en la historia real y abrir caminos ficticios? «Esto lo aprendí directamente de Alejandro Dumas. Se trata de tomar la historia, utilizar el marco y falsificar el cuadro».

 

Lo dice Pérez-Reverte.

 

 

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Miércoles, 18 de octubre

 

«En el instituto salí varios meses con una chica que no volvería a ver después de irme a la universidad, pero curiosamente aún sé de memoria el teléfono de casa de sus padres. Hablábamos durante horas, aunque hoy ya no queda en pie ninguna de aquellas frases».

 

Se lo leo a Juan Tallón.

 

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Jueves, 19 de octubre

 

—¡Felicidades papá!

 

—¡Muchas gracias! ¡Cuánto tiempo! ¿Qué tal todo?

 

—Soy Jaime, macho, apúntate mi número, que no hace tanto tiempo que no nos vemos.

 

—Jajaja. Me has pillado. Jajaja. No tenía ni idea de quién eras. He puesto eso porque sonaba muy neutro. Jajaja. Y así por la conversación poder deducir quién coño eras. Por cierto, ¿Jaime Qué?

 

 

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Viernes, 20 de octubre

 

En el perfil de Macron escrito por Carrère: “Everyone has one – a place of shadow and secrecy, a melancholic zone – and as a writer, my job is to see them”.

 

 

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Sábado, 21 de octubre

 

Algunas frases rescatadas de ‘The Deuce’:

 

* El sexo lo es todo.

 

* No empieces la revolución sin mí.

 

* Necesito ducharme para quitarme la ciudad de encima.

 

* Esa chica te va a controlar, Vince.

 

* Yo qué sé, soy de Brooklyn.

 

 

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Domingo, 22 de octubre

 

—Yo defiendo la verdadera por encima de todo, no como tú, que defiendes la mentira.

 

—No, lo que digo es que hay que saber ver la realidad conforme a derecho.

 

 

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Lunes, 23 de octubre

 

En ‘The Night Of’:

 

“Las mujeres así nos destruyen. A veces no hay otra que golpear primero. ¿Sabe lo que le digo? Es un hecho que mujeres así creen que son un regalo de Dios, y que el resto no somos más que un juguete hasta que encuentren otra cosa, como ella. A veces, al desafiarlas, se anulan”.

 

 

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En la entrevista al escritor Mircea Cartaresco en ‘Babelia’:

 

«Solemos olvidar que la realidad es una construcción de nuestra mente, la más compleja y más fantástica construcción. La realidad no son los acontecimientos que nos pasan cada día en nuestra dimensión física, sino todo lo que está pasando en nuestra mente, en nuestros sueños y en nuestra imaginación. Y todo lo que no sabemos sobre el mundo: todo es realidad».

 

 

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Martes, 24 de octubre

 

En ‘Juego y distracción’ (lo veo en el Instagram de M.):

 

«Sonríe. Es invencible. Es como una partida de ajedrez en que sus piezas me derrotan continuamente, pero hace mucho que hemos dejado de competir».

 

 

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—Matrimonio, m. Primera causa de divorcio en el mundo —escribe hoy en su verbolario Rodrigo Cortés.

 

—Esto me ha recordado a la escena con la que abre una de mis películas favoritas: ¿Qué clase de personas se sientan en un restaurante y no tienen nada que decirse? Los matrimonios.

 

 

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Miércoles, 25 de octubre

 

«Yo cada vez que escribo me estoy peleando con la literatura».

 

César Mallorquín con los Cowboys de Medianoche.

 

 

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Sábado, 28 de octubre

 

En el documental de Netflix sobre Didion:

 

(¡Ya tengo cuenta en Netflix!, veremos qué pasa con mi vida social)

 

—Cuando al fin encontré a mi contacto, me dijo: «Tengo algo en casa con lo que vas a alucinar». Cuando llegamos, vi a una niña en el suelo de la sala de estar que se lamía los labios concentrada. Lo único extraño es que llevaba pintalabios blanco. «Una niña de cinco años», me dijo mi contacto, «colocada de ácido».

 

—¿Cómo te sentiste cuando viste a una niña que había consumido ácido?

 

—Bueno, fue… No lo negaré, era buen material. Bueno, en resumidas cuentas… das tu vida por momentos así… si estás… trabajando en un artículo.

 

 

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Domingo, 29 de octubre

 

Leo en la exposición de Magnum en la Fundación canal esto de Cartier-Bresson: «Sacar una buena fotografía de una hoja de contactos es como ir a la bodega y subir una buena botella para compartirla”.

 

 

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Lunes, 30 de octubre

 

En la entrevista del ‘XL Semanal’ a Javier Marías:

 

«La gente de los años setenta y ochenta era así, mucho más moderna y abierta que la de ahora y, desde luego, mucho más libre. Ahora reina la pacatería disfrazada de otras cosas. En el final de los sesenta y principios de los setenta, la revolución sexual y la llamada al amor libre hacía que la gente tuviera mucho desenfado. En este asunto hemos retrocedido mucho”.

 

 

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Me he colado sin permiso en un intercambio tuitero entre @molinos1282 y @lhermoso_, que hablaban sobre el documental de Didion.

 

—¿Soy el único al que el documental le ha parecido muy normalito? —he dicho—. Casi nada de lo que cuenta es novedoso, por mucho que emocione verla hablar con esas manos. Y es complaciente … Me interesa por qué esa distancia con la hija … No lo explica … Me interesa ese matrimonio, que tiene más de tóxico que de historia romántica. Tampoco lo explica … Todo es qué guay es mi tía. Lícito, pero le quita valor al trabajo … Un documental de ese estilo con Zafón como protagonista nos parecería un truño … El interés del documental se sostiene únicamente por Didion, no por la forma en que está hecho ni por lo que revela.

 

Molinos: «A ver, no es una cumbre de la cinematografía documental, pero es emocionante … Como dice Griffin Dune, él quería hacer una carta de amor a Joan, y es lo que ha hecho … Él no pretendía hacer investigación, ni descubrir nada, sino hacer un homenaje, un recorrido. Y eso es lo que hace … Lo disfruté porque la adoro y para mí muchos de sus escritos han sido fundamentales. Pero es verdad que le falta ritmo … A mí me gustó que resaltaran al principio el ensayo del amor propio y el de John Wayne porque me marcaron».

 

Hermoso: «A mí me ha emocionado porque la quiero mucho. Pero es verdad que hay partes que se hacen pesadas … Y que no he descubierto nada que no supiera. Aun así lo he disfrutado … Yo ya esperaba que fuera complaciente. Eso no me ha sorprendido. Tal vez abusa del material de archivo … Me da la sensación de que también ha querido reivindicar a la Didion de antes. Decir que es mucho más que lo que ha escrito sobre el duelo … Este documental sirve para convertirla en fenómeno pop para gente que no la ha leído».

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