Es la sangre lo que mantiene vivos nuestros cuerpos. La hemoglobina carga oxígeno en los pulmones y lo distribuye recorriendo venas y arterias para que llegue a los tejidos. Cuando la sangre regresa a los pulmones, lo hace empobrecida, incapaz de dar más vida.
La semana pasada comenzaron mis cortas vacaciones. Bajé a Almuñécar, en la breve y accidentada costa granadina, a visitar a unos amigos que se iban el sábado a Marbella, donde actuaba Julio Iglesias; uno de los conciertos más aburridos que se pueden ver en el planeta.
El concierto se enmarcaba dentro del Festival Starlite, que tiene un variopinto cartel formado por Bryan Adams, Jamie Cullum, Alejandro Sanz, David Bisbal, Sara Baras, Paco de Lucía, UB40, Noa o, el que más me sorprendió, un concierto formado por Alejo Stivel, en representación de Tequila, Nacho G. Vega, en representación de Nacha Pop, Rafa Sánchez, en representación de La Unión, y Nacho Campillo, en representación de Tam Tam Go. Como plato fuerte, Hombres G. El título de este concierto, en un alarde de creatividad sin precedentes, era Una noche Movida. Una banda base, formada por algunos buenos amigos y músicos, acompañaba a los cuatro artistas que interpretaban dos temas cada uno de su conocido repertorio y preparaban el terreno a los Hombres G, verdaderos protagonistas del concierto. Bajo el marco de la Movida, ¿qué es lo nuevo que nos pueden ofrecer estos artistas?
Hoy ha saltado una alarta de Google en mi teléfono. Me avisa de un concierto que se celebrará en Benidorm el día 21 de septiembre. Titula un periódico: Los mitos del pop-rock de los 80 se dan cita en Benidorm en el Iberia Festival. Loquillo, Jaime Urrutia, Nacha Pop… Llevamos más de treinta años inmersos en un interminable día de la marmota.
¿Hasta cuándo? ¿Cuánta leche ha de dar esta teta para que dejen de ordeñarla?
Ya he hablado muchas veces a favor, pero hay que pasar página y dar carpetazo a la Movida para que la sangre vuelva a correr bien oxigenada y dé vida al cuerpo moribundo de la música española.
@Estivigon
