También nos hicieron dos canales, uno grande y otro pequeño. El grande, para las gabarras que traen carbón y caliza y se llevan carbonato de sosa. El pequeño, para alimentar al grande si alguna vez se quedaba sin agua. Los trabajos duraron diez años.
En un arduo trabajo de investigación mirando en internet he podido deducir de qué era la fábrica a la que se alude en esta triste novela. Se trata del proceso de obtención industrial de carbonato de sosa por el método Leblanc. El carbonato de sodio es un compuesto muy apreciado en la industria, pues se utiliza en la fabricación de jabón y vidrio. Como se indica en el texto hacen falta carbón y caliza, entre otros reactivos.
El descubridor de este procedimiento, Leblanc, murió guillotinado, como todo buen químico francés que se precie.