La democracia argentina ha cumplido treinta años después del fin de la dictadura que se extendió entre 1976 y 1983 y es hora de hacer balance. Una buena manera de hacerlo es visitar la exposición 30 años: Fotoperiodismo en democracia, de la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina. Los mandatos de Alfonsín y de Menem, así como los de los esposos Kirchner, aparecen retratados con sus luces y sus sombras: desde las leyes de punto final hasta la recuperación de la memoria histórica y los juicios a los torturadores de la dictadura; los cacerolazos en la crisis y el corralito de 2001 y la reestructuración de la deuda años más tarde. Lejos de mitificar las tres décadas de normalización democrática del país latinoamericano, los reporteros gráficos, en el documento de presentación de la exposición, dicen: “Las fotos de los últimos treinta años no hablan de un devenir idílico sino de la persistencia de los conflictos”. La violencia no terminó con la dictadura, ni el conflicto entre quienes detentan el poder y quienes aspiran a democratizarlo. En el piso de arriba del Palais de Glace, que está muy cerca del popular cementerio de la Recoleta, podemos ver la tradicional exposición anual de la ARGRA, con las instantáneas más relevantes del año 2013.