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Mientras tantoArte64 ¡Maldita intermedia!

Arte64 ¡Maldita intermedia!


 

                               Schuster – Carls (Bremen, 1914)

 

                                  Las negras juegan y ganan

Ante el tablero, las jugadas intermedias son tan sorprendentes, molestas y mortíferas –para el bando atacante, se entiende– que algún ajedrecista con bastante sentido del humor (que haberlos haylos, aunque no lo parezca a primera vista…) no ha dudado en calificar estas jugadas defensivas de intermierdas.

Una de ellas se dio en la partida Schuster – C. Carls, una Caro-Kann disputada en Alemania el mismo año que vio surgir la primera Guerra Mundial. Tras 1.e4 c6  2.d4 d5  3.Cc3 de4:  4.Ce4. Cf6  5.Cg3 h5  6.Ag5 h4, las blancas tuvieron la mala idea de eliminar el Cf6 con 7.Af6:? para poder aprovechar la casilla e4 con su Caballo situado en g3, en vez de proseguir con la secuencia pacífica 7.C3e2 Db6  8.Dc1 Ce4, con ligera ventaja negra.

Poniéndose en el lugar del Maestro alemán Carl Carls (1880-1958), ¿podría usted indicar cómo las negras lograron imponerse en tan solo 5 jugadas, con un juego de lo más enérgico?

 

 

Solución de “Maniobra zigzagueante”:

 

 

Tal como se lo indicábamos, el intento de salvar el Alfil mediante 1.Af2? solo conduce al mate en 7 jugadas tras 1…g1=D  2.Ag1: Rg1:  3.Rc3 Rh1  4.Rd3 Rg1, etc.

La enérgica maniobra matadora de la Dama se inicia con…

 

1.Df6!   

Cortando el acceso del monarca a la columna f y apuntando a la importante casilla h4. Tras la del texto, el acercamiento del Rey blanco conduce a un mate tan forzado como expeditivo:

1…Rg1:  2.Rc3 Rh2/h1  3.Dh4+ Rg1  4.Rd2 Rf1  5.De1 mate!

 

Una secuencia contundente que no era tan difícil de prever y calcular.

 

René Mayer   (remay47@yahoo.es)

Twitter: remay @remay99353001

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