Artículo escrito por Bárbara Álvarez Solanilla
La sociedad europea ha quedado conmocionada con las muertes producidas la semana pasada en Francia a causa de una operación terrorista perpetrada por yihadistas. Todos temen que episodios violentos como el acaecido hace unos días, al que el viejo continente no está acostumbrado, se convierta en tónica en un futuro próximo. En las próximas líneas, El Inquirer esboza algunos puntos claves del los recientes atentados y sus consecuencias inmediatas para la seguridad europea.
¿Quién es Charlie Hebdo?
La revista Charlie Hebdo es un semanario satírico de izquierda que surgió en Francia en 1992 y que tomaba su nombre de una publicación anterior llamada Hara-Kiri (que existió entre 1969 y 1981).
Desde su creación este semanario ha provocado la indignación y la ira de todos los colectivos religiosos por sus viñetas humorísticas, especialmente a partir del año 2006 con la republicación de unas viñetas de Mahoma que habían sido originalmente publicadas en un diario danés.
Charlie Hebdo es un medio completamente independiente y carente de publicidad que se financia a través de la venta en kiosco, las suscripciones de los socios y las donaciones de particulares.
Su director Stéphane Charbonnier, conocido como Charb, falleció en el atentado del pasado 7 de enero de 2015 después de llevar más de cinco años amenazado de muerte. Cabe destacar que la publicación se enfrentaba constantemente a juicios por sus publicaciones y también que todos ellos los ha ganado en base al principio de la libertad de expresión.
¿Quiénes eran los autores del atentado?
Los tres hombres que atentaron contra la sede del diario, matando a 12 personas antes de huir, eran Cherif (32) y Said (34) Kouachi, dos hermanos de nacionalidad francesa y que aseguraron pertenecer a Al Qaeda, y Hamyd M. (18) de nacionalidad desconocida.
Armados con fusiles Kaláshnikov entraron en la sede del diario a las 11.00 de la mañana del miércoles, poco después de que comenzara la reunión semanal del medio y acabaron con la vida de Charb, así como de varios redactores y un invitado.
¿Qué pasó en la imprenta a las afueras de París?
Dos días después del atentado en la sede de la revista, en el que murió Hamyd M., los hermanos Kouachi se atrincheraron (en su huída de la policía y tras permanecer escondidos en in bosque) en la imprenta Dammartin-en-Goële en un polígono industrial, también a las afueras, en la que asesinaron a todos los que allí se encontraban. Sólo un hombre que estaba en otra planta y pudo esconderse sobrevivió convertido en el rehén no deseado de los hermanos Kouachi.
Tras varias horas de negociaciones fallidas y debido a que otro hombre, colaborador de los hermanos, había tomado rehenes en una tienda de comestibles judía en Vincennes, al este la ciudad, la policía inició la operación que se saldó con la muerte de los dos terroristas.
¿Qué pasó en la tienda de comestibles judía?
En paralelo, Amedy Coulibaly (32) se encerró en una tienda de comestibles Kosher con una decena de rehenes y amenazó con matar a una persona cada dos horas hasta que la policía liberara a los hermanos Kouachi, que en esos momentos estaban sitiados en la imprenta.
En el interior del comercio había al menos una decena de personas entre las cuales alguien consiguió burlar al terrorista y mantener contacto telefónico con la policía durante todo el tiempo que duró el secuestro.
Coulibaly, que resultó ser el autor de la muerte de una policía municipal gala el día anterior, pedía en un vídeo a la comunidad musulmana que sigan su ejemplo y “se movilicen contra occidente por la guerra santa”. Aseguraba además actuar coordinado con los hermanos Kouachi, algo que de momento se desconoce. Como han informado varios medios franceses, lo cierto es que había una estrecha relación entre los diferentes terroristas, sus parejas eran amigas, frecuentaban los mismos lugares y tenían como “maestros” a los mismos líderes espirituales extremistas.
¿Cuál ha sido el balance de la operación policial en París?
Tras varias horas de negociaciones fallidas con el secuestrador y en vista de que éste había comenzado a asesinar a los rehenes, el presidente de la República, François Hollande junto con el primer ministro Manuel Valls y el ministro del interior Bernard Cazenueve dieron luz verde a la intervención policial que se saldó, por un lado, con la muerte de los hermanos Kouachi y la liberación del único rehén que había en la imprenta con éxito, mientras que por otro lado el coste humano de la segunda operación fue mayor. Cinco personas murieron, cuatro rehenes y el secuestrador. Además dos agentes resultaron heridos.
La operación aún sigue abierta y Francia permanece en máxima alerta por amenaza terrorista. También se busca a la novia de Coulibaly, Hayat Boumeddiene, implicada en el asesinato de una policía gala, que tras el secuestro en la tienda Kosher se ha convertido en la mujer más buscada de Francia y que, según informaron las autoridades galas el domingo 11 de enero, habría viajado a Siria.
¿Cómo ha reaccionado Francia?
Con gran unidad y respeto, sin hacer uso de la demagogia ni aprovechar lo ocurrido para captar votos o arengar el malestar social. Desde Marine Le Pen, líder del derechista Frente Nacional, hasta los familiares de las víctimas, pasando por los miembros de la redacción de Charlie Hebdo y el presidente François Hollande, el mensaje ha sido unánime: No dejar que el miedo y el odio por lo ocurrido lleve a castigar a la comunidad musulmana. Los musulmanes no son terroristas. El islam no es yihadismo, y en palabras del presidente Hollande: “El mundo musulmán no es esto, esto son tres iluminados que nada tienen que ver con el Islam”.
Este ha sido un mensaje clave en un momento muy delicado pues en Francia el 7,5% de la población es musulmana y a la vez el 73% de los franceses tiene una mala imagen de los musulmanes, con lo que un mensaje negativo o cargado de odio podría ser el desencadenante de una conflicto interno en el país que tendrías graves consecuencias.
¿Cuál ha sido la reacción internacional?
La sociedad occidental se ha volcado con lo ocurrido. Desde todos los países de Europa han surgido movimientos y manifestaciones de apoyo bajo el lema Je Suis Charlie como la que tuvo lugar el domingo 11 de enero a las 12.00h en la puerta del Sol en Madrid.
También el domingo 11 de enero se celebró en París una manifestación multitudinaria contra el terrorismo en la que participaron miles de personas y más de 50 líderes internacionales agrupados bajo carteles en los que se podía leer “yo soy Charlie, soy judío, soy policía”, entre ellos, los presidentes de Alemania, Francia y España, para mostrarse unidos frente a la amenaza yihadista en Europa.
@basolanilla