El pasado 11 de agosto, Proyecto Gran Simio solicitó a la Ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico que activara un canal público de Televisión Española dedicado exclusivamente a temas medio ambientales y que sea una plataforma de educación, información y exposición de temas relacionados con la naturaleza y las consecuencias del cambio climático.
Para Proyecto Gran Simio, las consecuencias del cambio climático y la necesidad imperiosa de dar información puntual, verídica y científica a los ciudadanos, se hace cada vez más necesario e imprescindible. Los científicos nos alertan de un colapso civilizatorio, de seguir con nuestro crecimiento demográfico, económico, abuso de recursos y generación de residuos. El último informe del IPCC que se ha filtrado y no será público hasta primeros del 2022, nos alerta de las graves consecuencias que en menos de treinta años se va a producir en el mundo y que la sociedad va a tener que enfrentarse con mucho dolor y sacrificio y es por ello se necesita de manera urgente una educación ambiental sin precedentes en la historia de la humanidad. Ya hemos sobrepasado muchas de las alertas rojas que nos advertían desde hace décadas y no hemos hecho caso. Muchas de las especies según el propio informe desaparecerán ya irremediablemente, las hambrunas se extenderán a lo largo del mundo y los refugiados medioambientales se contarán por millones y los conflictos bélicos estallarán por el control del agua.
El Cambio Climático está detrás de las grandes inundaciones, los incendios forestales, las sequías y las anormales nevadas de este año. La pérdida de biodiversidad nos aboca a la Sexta Gran Extinción y a la aparición de pandemias, cada vez más frecuentes. El agotamiento de recursos, es causa de la mayoría de guerras actuales; principalmente por petróleo, gas, etc. La acumulación de residuos, ya tiene formadas gigantescas islas en nuestros océanos.
El equipo de científicos encabezado por Stephen Emmot, encargado de estudiar el impacto que tendrá para el planeta alcanzar una población de 10.000 millones de personas (probablemente a mediados de este siglo), dibuja un escenario apocalíptico, que nadie está dispuesto a aceptar.
El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) ha emitido 5 informes advirtiendo sobre las consecuencias de no poner remedio a esa amenaza. La Unión Europea ha lanzado su Estrategia para preservar la biodiversidad de cara al 2030 y por si fuera poco, ante la urgencia, la Naciones Unidas ha lanzado el “Decenio para la Restauración de los Ecosistemas” en un esfuerzo para salvar lo poco que nos queda.
Nuestros gobernantes son plenamente conscientes de estos problemas; pero no se atreven a abordarlos por el coste electoral que tendrían. Proponer una disminución en el consumo de carne o eliminar los automóviles de gasoil, supone un aluvión de críticas, aun contando con el apoyo científico y de instituciones internacionales. Se apoyan los vehículos eléctricos, cuando estos dejan huellas de sangre ya que para las grandes baterías eléctricas se necesitan minerales como el Cobalto, el Litio o el Niquel que devastan grandes extensiones de terreno violando los derechos humanos (asesinatos, esclavitud, violaciones a mujeres y niños, trabajo infantil, etc.). El cambiar todo el parque automovilístico por coches eléctricos destruye la biodiversidad de nuestro planeta y es a costa de la sangre y explotación de recursos mineros.
No se pueden afrontar estos retos sin contar con TODOS y cada uno de los ciudadanos, independientemente de su sexo, religión, ideología o condición social. Nuestra sociedad necesita incorporar a su cultura, el respeto por la naturaleza; y eso requiere que todos hagamos sacrificios. Muchos ciudadanos de nuestro país, ya realizan esos esfuerzos; la prueba de ello es su participación en el reciclado, la separación de residuos o el veganismo. De no tomarse medidas drásticas ante el cambio climático, podríamos encontrarnos con revueltas sociales que algunos podrían tratar de sofocar con la intervención del ejército. El cambio climático nos podría llevar a un golpe de estado. Es imperioso que los políticos tomen medidas drásticas y estas no son posibles sin una concienciación ciudadana dispuesta a aceptarlas y unas multinacionales que se bajen de su pedestal capitalista para trabajar juntos por un mundo más civilizado. No es justo que sólo el ciudadano tenga que pagar las consecuencias de lo que se nos avecina. La casi totalidad de la culpa es precisamente por los políticos que no han sabido o querido poner medidas para abordar desde hace décadas lo que ahora llega sin remedio y sin vuelta atrás.
Para avanzar en este camino, es imprescindible la concienciación ciudadana; en todos los niveles; no solo en la educación escolar; ya que no podemos cargar, nuestra responsabilidad, sobre los hombros de nuestros hijos e hijas. Nuestra generación es la primera, en la historia de la humanidad, que va a dejar a sus hijos un mundo peor que el que recibió de sus padres.
En esa concienciación ciudadana debería jugar un papel imprescindible la televisión pública.
El Eurobarómetro dice que “3 de cada 4 europeos piensa que el Medio Ambiente afecta a su vida cotidiana”. También recoge que en un 65% de los casos, los ciudadanos buscan informarse sobre temas ambientales en la televisión.
El Ecobarómetro de Andalucía recoge que 7 de cada 10 ciudadanos se siente bastante o muy preocupado por el medio ambiente.
En la carta enviada a la Ministra Teresa Rivera, PGS le deja claro que los ocho años que nos quedan para el 2030 son decisivos. Necesitamos un canal de Televisión Pública donde no sólo se exponga documentales; también programas de investigación, debate y todo tipo de medios que ayude a comprender la situación del planeta y lo que cada empresa, político o ciudadano pueda hacer, para evitar o mitigar lo que nos viene encima o al menos para ser conscientes de la situación real a la que nos vamos a afrontar. De hecho se necesitaría toda una cadena dedicada a ello.
Se ha pedido que la Ministra atienda la petición de un canal específico de televisión pública sobre medio ambiente donde se pueda debatir las soluciones, informar de las consecuencias, ver documentales, entrevistas a científicos, ecologistas y animalistas, y donde el Ministerio de Transición Ecológica podría igualmente volcar todas sus actividades en dicho canal para informar a los ciudadanos de su trabajo. El tiempo se acaba, ya hemos sobrepasado muchos de los límites y en consecuencia no hay vuelta atrás para algunas de las líneas marcadas como límite. La alerta roja ha sido disparada, pero aún queda una esperanza en la que podamos mitigar los efectos catastróficos que se avecinan. En esa esperanza tenemos que ir de la mano de las multinacionales, de los políticos y de los ciudadanos. Si algún eslabón de esta cadena se rompe, será el fracaso de la humanidad y la Tierra tendrá que continuar con otros ecosistemas diferentes aunque sea sin nosotros. Por ello la importancia del cambio, un cambio radical en todos los ámbitos. Lo podemos hacer. Se ha hecho con la pandemia actual. Se puede hacer con voluntad política y empresarial. Lo sufrido por el covid sólo es algo mínimo de lo que nos viene encima por el cambio climático.
El Doctor Félix Rodríguez de la Fuente fue un gran comunicador de Televisión Española y a pesar de la situación política en la que se vivía, ésta le cedió muchos programas y financió muchos de los viajes para mostrar a nuestra sociedad el valor de la naturaleza y la importancia de la biodiversidad de nuestro planeta. El ya no está con nosotros, pero nos dejó un legado y unos mensajes que han quedado olvidados en las cintas de Radio nacional o los programas de televisión. Debemos recuperar esa educación televisiva que a muchos de los que hoy estamos y trabajando en la conservación de nuestro medio ambiente, nos impactó de niños y nos dio la semilla para ser lo que ahora somos. No pedimos lo mismo. No pedimos que se financien documentales, viajes, etc. Solo pedimos un canal de TVE donde se vuelque en él todo el amor a la naturaleza y sea referencia imprescindible para nuestros jóvenes que tomarán el timón de nuestra Tierra si es que aún la nave no ha escorado o se ha estrellado contra los arrecifes de la pasividad y de la ignorancia.
El Senador Carles Mulet, que siempre ha estado apoyando las iniciativas del Proyecto Gran Simio y en base a lo expuesto, ha realizado una pregunta parlamentaria al Gobierno sobre esta cuestión, estando por el momento a la espera de su respuesta.
Mensaje de Félix
“Estoy profundamente convencido de que, si las nuevas generaciones no afrontan los ingentes problemas de la conservación del medio ambiente con una nueva, pujante y apasionada filosofía, nuestro mundo seguirá su irremediable carrera de degradación y de agonía. Solo el amor a la naturaleza, la pasión por la vida y la certeza de que formamos parte de una comunidad total que va desde la más pequeña de las bacteria hasta el hombre nos darán fuerza para defender el único hogar que tenemos, un pequeño planeta perdido en una remota galaxia al que hemos dado en llamar Tierra”
VER LLAMAMIENTO DEL NATURALISTA Y AMIGO DE RODRÍGUEZ DE LA FUENTE, LUIS MIGUEL DOMÍNGUEZ:
https://www.youtube.com/watch?v=Fu1WtrAuoTA
