Almayso fue el seudónimo de uno de los pioneros de la fotografía madrileña que dejó un legado de lo que fue esta ciudad a finales del siglo XIX y principios del XX. Quién lo diría, Alfredo Mahou y Solana (1850-1913), uno de los hijos del director de la primera fábrica de cerveza Mahou, situada en la madrileña calle deAmaniel, fue el recolector de la escenografía madrileña. En esa fábrica fue donde desarrolló allí sus dos pasiones: la cerveza y la fotografía. En 1870 abrió en la capital española el primer estudio fotográfico. Lo bautizó con un acrónimo de sus iniciales, Almayso. No era un artista de la fotografía y no destaca por la técnica o la excelencia en la composición y el positivado, sólo miraba. Miraba y fotografiaba. La exposición recoge esas imágenes que retratan un Madrid bañado por la cerveza y sus figuras.