Surgidas de los laboratorios anuales organizados desde Espacio Teatro Contemporáneo (ETC), la sección de investigación de Cuarta Pared, llegan tres obras que ofrecen una visión propia del futuro. Durante los últimos meses los directores, actores y dramaturgos presentes en este pequeño ciclo se han dedicado al desarrollo de utopías y distopías que en forma de obra teatral pretenden llevar hasta el público una experiencia intensa. La primera de las obras será El humor está prohibido, de Carlos Be, una comedia fallida que reflexiona en torno al concepto de lo perfecto a partir de un universo distópico gobernado por el Estado de la Perfección desde New London 0. Le sigue Donde no existen las parejas ni las familias, de Sergio Martínez Vila, un mundo devastado por la guerra y los cambios climáticos da lugar a una sociedad dominada por La Ley que articula comunidades agrarias en una estructura horizontal. Finalmente Robota (la anatomía de un cíborg), de María Velasco, un proyecto que explora la futura relación con las máquinas a partir de un androide que habita un mundo deshumanizado en un espectáculo de bunraku (teatro japonés de marionetas).
