Las opiniones eran que todo estaba cada vez peor en París, que el tráfico era monstruoso, que la vida estaba cada vez más cara, que en París había demasiados extranjeros que no entendían las leyes del tráfico y que les quitaban el trabajo a los franceses.
Rayuela (1963), J. Cortázar
Entonces hacer el amor era eso, un pez negro pasando y pasando obstinadamente. Una imagen como cualquier otra, bastante cierta por lo demás. La repetición al infinito de un ansia de fuga, de atravesar el cristal y entrar en otra cosa.