¿Cómo se crea un genio? Bobby Fischer, Garry Kasparov y Magnus Carlsen ¿Cuáles son las cualidades de un genio? ¿Cómo ganar a un genio, ¿Son invencibles?
Bobby Fischer nace el 9 de marzo de 1943 en Chicago (Illinois), su madre era enfermera y se llamaba Regina Wender, y su padre era físico y respondía al nombre de Hans Gerhardt Fischer. Aunque existe una cierta controversia respecto de si este señor fue su verdadero padre biológico, dado que Regina y Hans no vivían juntos.
Cuando Fischer tuvo dos años se produjo el divorcio de sus padres, en 1945, una fecha que da miedo recordarla, el final de la Segunda Guerra mundial, Europa convertida en un vertedero, todas las cicatrices abiertas. Bobby Fischer se queda junto a su hermana Joan al cuidado de su madre. Cuatro años después, en 1949, la familia se trasladó a Nueva York a un pequeño apartamento de Brooklyn.
Aprendió a jugar al ajedrez por sí mismo. Autodidacta. A partir de unas instrucciones que leyó en un estuche, dónde aparecía el ajedrez junto a otros juegos que le regaló su hermana Joan.
Uno de sus compañeros de entonces lo define de esta manera: “Estaba siempre callado y poco interesado en las clases. Fisher era un buen chico, aunque muy inseguro en cualquier cosa que no fuera el ajedrez. Todo era ajedrez para él, cada momento del día”.
En enero de 1951 (Fischer contaba ocho años), gracias a un anuncio de un periódico se presentó a una sesión de simultáneas (un maestro juega contra todos los que quieran), contra el maestro Max Pavey… Fischer perdió. Aunque perdió le sirvió de estímulo para seguir estudiando.
Siempre tenía un ajedrez en el bolsillo. Un día el profesor un tanto molesto le dijo: “Fischer no puedo obligarle a escuchar la lección, ni puedo impedir que juegues al ajedrez, pero hazlo por mí y por favor deja el tablero”. Bobby, cortésmente, dejó el tablero a un lado, y se quedó sentado en un pétreo silencio. Todos sabíamos, incluido el profesor, que seguía jugando al ajedrez en su cabeza.
En 1957 participó por segunda vez en el Campamento Junior de Estados Unidos. El premio era una máquina de escribir. Lo ganó. Detalle que no le hizo muy feliz ya que…poseía dos mecanográficas exactamente iguales. Lejos de acudir a aquella su primera competición acomplejado o acobardado, el chaval flacucho de Brooklyn se presentó repleto de confianza en sí mismo.
Con 13 años en Filadelfia conquistaría el título juvenil, ganando ocho partidas, empatando una y perdiendo otra.
Fischer abandonó el Erasmus Hall High School para dedicarse por completo al ajedrez.
Su coeficiente intelectual, el mismo de Albert Einstein era de 186.
En 1960, Bobby Fischer con sus diecisiete años recién cumplidos jugó contra Mijaíl Tal, un Campeón del Mundo, y acordaron tablas. Tras la partida, Bobby se acercó al campeón y le soltó: “No juega usted mal”.
En 1962 juega contra otro Campeón del Mundo, Mijaíl Botvinnik, y aunque Bobby dominó toda la partida al final acordaron tablas.
En 1972, con 29 años vence a Boris Spassky y se proclama Campeón del Mundo.
Bobby Fischer fue Campeón del Mundo desde 1972 hasta 1975.
Murió un 17 de Enero de 2008, en Reikiavik (Islandia) de una insuficiencia renal.
En su documento de identidad, en el apartado de ocupación ponía ajedrecista.
Garry Kaspárov nació un 13 de Abril de 1963 en Baku, capital de la República Rusa de Azerbaidzhan. Su padre es un ingeniero judío llamado Kim Moiseyevich Wainshtein, y su madre de ascendencia Armenia responde al nombre de Clara Shagenovna Kasparova.
Su padre falleció cuando Garry tenía solo ocho años. Clara Kasparova se hizo cargo de su educación.
Su madre impulsó la afición de Kaspárov por el ajedrez, lo envió a jugar a los 6 años a la Escuela Botvínnik de Ajedrez.
Mikhaíl Botvínnik, considerado el jugador más grande de la URSS, fue Campeón del Mundo desde 1948-1957, 1958-1960 y 1961-1963, viéndole jugar en su escuela profetizó: “El futuro del ajedrez se encuentra en las manos de este joven”. Garry Kaspárov tenía once años de edad.
Garry intuyó que para poder competir en la élite, era necesario una preparación física conveniente. Practicaba salto de altura, fútbol, natación, ciclismo o hockey sobre hielo. Lógico, una partida de seis horas supone un desgaste físico enorme.
Al igual que Bobby Fischer, a los trece años ganó el Campeonato Juvenil.
Se le brindó la oportunidad de jugar un evento en el Torneo Banja Luka (Yugoslavia) que incluía catorce Grandes Maestros Internacionales muy fuertes. Kaspárov ganó el torneo. Algo ayudó su coeficiente intelectual de 190.
Su ambición era infinita y no estaba dispuesto a desaprovechar ninguna oportunidad.
En 1980, con diecisiete años se le calificó como Gran Maestro Internacional.
Dos años más tarde, en 1982, se convirtió en el segundo jugador más grande del mundo.
Y llego 1984. Después de aquello nada en el ajedrez fue lo mismo. Gracias al duelo que iba a tener lugar, el ajedrez fue portada en las revistas, y todo el mundo se despertaba pensando en el ajedrez… ¡Aquellos tiempos!… En un rincón estaba Anatoli Kárpov, el protegido, el abanderado del Estado, el niño bonito, bajito, regordete y con graves problemas de sudoración, aunque treinta años después sigue estando en la lista de los diez mejores jugadores de la historia.
En el otro lado el mozalbete, el intruso, la nueva sangre, el arrojo de los jóvenes, la insolencia de las nuevas generaciones. Anatoli Kárpov luchaba por su primer título mundial. No quería vencer a Kaspárov, querá devorarlo, destriparlo, desmembrarlo, pero el ogro de Baku (Kaspárov), era una mole de un metro ochenta y cinco, que corría y jugaba al tenis antes de los partidos. Después de seis meses y cuarenta y ocho juegos, el enfrentamiento terminó inconcluso. El Presidente de la federación Mundial de Ajedrez, el español Florencio Campomanes, canceló la contienda sin conocer a un ganador, dado que peligraba la salud física de los contendientes.
Al año siguiente el encuentro se reanudó y Kaspárov venció a Kárpov. Ganó así su primer Campeonato Mundial.
Un título que ha conservado por más de quince años consecutivos.
Magnus Carlsen nació el 30 de noviembre de 1990 en un pueblo llamado Baerum, cerca de la capital de Oslo (Noruega). Su padre se llama Henrik Albert Carlsen y es un ingeniero apasionado del ajedrez, su madre responde al nombre de Sigrun Oen.
A los cuatro años mientras estaban en la salita del apartamento sufriendo una de las comunes nevadas, Magnus Carlsen se acercó a su padre y le recitó los 430 ayuntamientos de Noruega, con su población y extensión, dejando clara su capacidad nemotécnica. No sabemos si tal hecho supuso alguna rotura en la vajilla o alguna insuficiencia respiratoria. El padre intentó enseñarle el ajedrez a Magnus, pero este no le hizo ni caso.
Un día Magnus Carlsen observó una partida de ajedrez entre su padre y su hermana Ellen, y despertó su animal competitivo y empezó a volcarse en el juego. Casi autodidacta. Porque le dio la gana. Porque le dejaron en paz. Durante la mayor parte de su infancia no le gustaba el ajedrez, a los ocho años la situación cambió porque quiso vencer a su hermana mayor Ellen.
El 26 de Abril 2004, Carlsen se convirtió en Gran Maestro a la edad de 13 años, 4 meses y 27 días.
En junio de 2004 participa en el Campeonato Mundial Ajedrez 2004, siendo el jugador más joven entre 128 participantes (sistema match eliminatorio). Saldría finalmente Campeón Mundial el uzbequistaní Rustam Kasimdhanov. Carlsen fue eliminado en la primera ronda por Levon Aronian.
Un año después se celebra el Campeonato de Noruega de Ajedrez. Carlsen terminó en primer lugar con quince años, demostrando una enorme confianza en sí mismo.
En 2006, en la BIEL quedó segundo por detrás de Alexsandr Morozévich.
En 2007, participó en el Torneo Corus Ajedrez en Holanda. Quedó en el puesto trece.
En el 2008, cumplida su mayoría de edad, dieciocho años, quedó subcampeón en el Torneo de Linares. Campeón: Viswanathan Anand.
Se estaba acercando.
En el 2009 hizo tablas con el Campeón del Mundo Garry Kaspárov, y se presentó al Torneo London Chess Center Classic. Otra vez segundo. Detrás de Krámnik y empatado con Ivanchuk.
Todavía tenía que limar algunas asperezas en el estilo posicional y trabajar mejor los finales.
Con veinte años y con un gesto que lo honra, demostró su humildad y contrató como mánager a Garry Kaspárov durante un año.
El 22 de noviembre de 2013 a los 22 años 11 meses y 23 días, se proclamó el segundo Campeón del Mundo más joven después de Garry Kaspárov. Demostrando una memoria extraordinaria y una capacidad asombrosa para resolver problemas. Ayudado quizás por su coeficiente intelectual de 185, solo un punto menos que Albert Einstein.
Magnus Carlsen tiene de ELO (puntuación oficial de partidas, partidas ganadas suman, perdidas restan) de 2.872 puntos. Superando los 2851 de Garry Kaspárov. Nunca antes se había llegado a esa puntuación.
Antes de la partida que le facilitó su título mundial Carlsen dijo: “Soy el mejor y puedo destronar a Anand como campeón”.
Hace poco le hicieron una entrevista, y el periodista le llamó perezoso, Carlsen respondió: “Quizás me llamen perezoso porque no tengo la ética del trabajo que otros tienen. Pero siempre pienso en ajedrez, constantemente”.
“¿Estás pensando en ajedrez ahora mismo?”, le dijo el periodista.
“Sí, estoy analizando la última partida que jugué en Azerbaiyán”.
¿Están aquí los secretos para ser un genio en ajedrez?. Se repiten edades, ¿Por qué los trece años en los tres marcaron una diferencia en su aprendizaje? Hay un divorcio, la muerte temprana de un padre, pero esto no ocurre en la familia Carlsen. Es cierto, la confianza en uno mismo, la preparación física. Los coeficientes intelectuales: 186 de Fisher, 190 de Kaspárov, 185 de Carlssen, una barbaridad.
¿Se puede ser un genio a los cincuenta años? ¿El que derrote a Magnus Carlsen será otro genio?
Quizás no hemos descubierto ninguno de sus secretos. O quizás sí.
Buenas noches.
Juan Bohigues