(Se pueden leer los capítulos anteriores aquí y aquí.)
Rosa está sentada en el sofá, con la tele sin sonido y mandando un mensaje de audio a una conversación de WhatsApp. Luis está sentado cerca de ella (pero aproximadamente a metro y medio) con su móvil.
ROSA.- ¡Que se lo mandes a tu abuela! ¡Otra vez el mismo vídeo! ¡Vete al cuerno tú y tu WhatsAapp! ¡Panoli!
LUIS.- Mamá…
ROSA.- Que me dejes en paz, hijo… Y tú deberías hacer lo mismo… (Encuentra otro mensaje en el móvil.) Verás este… (Graba otro audio.) ¿Y tú qué quieres? ¿Dos años sin saber nada de mí y ahora como te aburres me escribes? Tengo muchas cosas que hacer, tengo material en casa para varias cuarentenas, no necesito tus vídeos de mierda, para cosas graciosas ya tengo a mi marido en un armario… ¡Mendrugo!
JULIÁN (desde el armario).- ¿Quién, yo?
ROSA.- Ya está tu padre desde el armario adjudicándose todos los insultos que digo… (A gritos a su marido.) ¿Ya te has despertado de la siesta, maldito vago? ¡Pues sí, tú también eres un mendrugo!
JULIÁN.- ¡Y tú eres insoportable!
ROSA.- ¡Cállate, asaltavainas!
LUIS.- Mamá, deja de pelearte con papá y escúchame… Si la gente te envía cosas es porque les importas…
ROSA.- Chorradas, se aburren y empiezan a pasar así hacia abajo el WhatsApp a ver quién les da un poco de conversación para echar el rato… Y cuanto más abajo en el WhatsApp, más tiempo hace que no hay comunicación… Pues conmigo han pinchado en hueso… Otro… (Graba otro mensaje.) A ver, Jorge, dime tú qué me importa a mí tu mierda de vídeo con corazoncitos inmundos que aplauden por una ventana… ¿Crees que soy tan ñoña como tú y tu esposa? No, hijo, no, a mí no me vengas con chorradas… Si te aburres coge un libro, nada de series, ni tele… ¡Un libro gordo! ¡Si es que aún te acuerdas de juntar las letras, claro! ¡Cateto!
JULIÁN.- ¡Y tú idiota!
ROSA.- ¡Pero que no le digo a él! ¿Es que no me puede dejar insultar a los demás tranquila?
LUIS.- Por cierto, te he traído un libro gordo, como me has pedido…
ROSA.- ¿Y tú qué haces con el móvil?
LUIS.- Respondiendo mensajes.
ROSA.- ¿Respondiendo mensajes de vídeos graciosos? ¡Coge un libro gordo!
LUIS.- Estoy respondiendo en general, a todos los que me han escrito… Acumulo los mensajes para responderlos todos juntos.
ROSA.- ¿Y no te apetece responder a alguno a mi manera?
LUIS.- ¿Con ordinarieces?
ROSA.- No son ordinarieces, es la verdad.
LUIS.- Hay muchas formas de decir la verdad.
ROSA.- Sí, y tú prefieres la de «gracias, espero que estés bien, ánimo, te mando un vídeo de gatitos chiquititos y amorosos, saldremos de esta, mira los aplausos desde mi ventana, qué bonito, todos juntos, bla, bla bla…»
LUIS.- Pues a veces sí.
ROSA.- Es vomitivo… Desde luego, si no fuera porque te pareces mucho a mí, diría que eres hijo de otra, y no mío. ¿Cómo está tu padre? Que sigue dando gritos desde el armario, eso ya lo sé, no hace falta que me lo digas…
LUIS.- Me ha preguntado por ti.
ROSA.- Pronto le dejaremos salir. Relajaré las normas de su cuarentena, saldrá, pero irá con una bolsa en la cabeza. Y ya se me ocurrirán más cosas. Soy una caja de sorpresas en cuanto a cuarentenas se refiere… ¿Qué libro me has traído?
LUIS.- Los miserables. Es bastante gordo. He ido a mi estantería de libros gordos y he cogido el más gordo…
ROSA.- Lo leí en francés cuando era joven.
LUIS.- Pues en francés no lo tengo.
ROSA.- No importa, si ya se me ha olvidado cómo era el francés… Calculo que, así de gordo, me durará una semana.
JULIÁN.- ¡Gorda tú!
ROSA.- ¡Cállate, lamecharcos!
LUIS.- Si al menos estás una semana viendo menos tele, quizá te recuperemos.
ROSA.- ¿Me recuperéis? ¿Qué dices?
LUIS.- Cosas mías… Espero que no cocines las hojas de este libro, no hagas lo mismo que hiciste con el Quijote…
ROSA.- Tengo recursos para varias cuarentenas, querido…
JULIÁN (desesperado desde su encierro).- ¡Tráeme un libro a mí!
ROSA.- ¿A ti? ¡Ni lo sueñes! ¡Chupasartenes!
Continuará.
@nico_guau
Chupi Llorente y Santiago Antón han grabado este capítulo de Cosas mías; lo podéis escuchar aquí: