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Mientras tantoDe mi Diario : Semana 30 / 2022

De mi Diario : Semana 30 / 2022


 

Weiß/Colonia, 24.7.

1:45 am : Por chiripa caí en la transmisión de Rififi un par de minutos antes de la secuencia del robo, que es la única que me interesa en esa peli, el resto es relleno, milyuna veces rumiado y previsible; pero el robo es como esa maravilla del Parque Güell en la mediocridad mesocrática de Barcelona.

Íbamos a ir a almorzar al chino de Rodenkirchen con Ileana y Francis, que llegaron ayer de Berlín y han venido a Colonia, antes de regresar a Madrid, para reencontrarse con Arzola y con el propósito de que nos conociéramos de córpore insepulto, no en vano estoy colaborando de manera regular con su revista desde abril del 2020. Pero ni modo. Diny no se siente bien, yo tampoco, el calor es aplastante, no nos atrevemos a salir de casa. Cancelamos la cita por teléfono y me abandono en la cama.

Mi horóscopo en el KStAnz para la semana que comienza mañana: «El poder cósmico te respalda, serás capaz de llevar a cabo hazañas inusuales en esta semana. El éxito no sólo volará hacia ti por tu enorme actividad, sino también por tu actitud positiva básica. «Para el optimista, la vida no es un problema, sino que ya es la solución». Un refrán que ahora puedes añadir a tu repertorio sin dudarlo». Me cago en la tapa del órgano durante la misa pontifical del mediodía de este domingo. Y el autor del horóscopo debe dar gracias a sus dioses de que no sé su nombre ni donde vive.

Después de leer mi diario, Manu me ha dejado un comentario al pie: «No creo de ningún modo, por mucho que avance la ciencia, que las máquinas tengan sentimientos, conciencia humana». Al respecto se me ocurren un par de cosas: los robots inteligentes, como HAL en 2001: Odisea del espacio, sí se conocen a si mismos, lo cual significa en términos humanos posesión de una consciencia, y en cierto modo muchos de nuestros sentimientos no son sino respuestas al mundo exterior a partir de nuestro plan genético predeterminado ab ovo. Desde ese punto de vista, en numerosas de nuestras conductas (muchas más de las que somos conscientes) nos comportamos como lo haría un robot. Lógicamente, un robot no puede odiar ni amar, pero sí estaría en condiciones de responder a la pregunta “¿Quieres casarte conmigo?” Lo único más humano que el robot no puede hacer, por muy inteligente que sea, es improvisar: su propia naturaleza impide que pueda ir más lejos de la última consecuencia de sus conocimientos inter–relacionados. Todo un tema en el que pensar y pensar. La magnífica teleserie sueca Real Humans ilustró bastante al respecto, y en ella los hubots [neologismo a partir de humano y robot] sí conocían al menos un sentimiento: la venganza.

Weiß/Colonia, 25.7.

Estuve viendo de nuevo el DVD de Short Cuts [Vidas cruzadas], porque antier noche, al subir mi diario a Fronterad y buscar un hipervínculo de la escena de Apocalypse Now subrayada por la música de Wagner, la “Cabalgata de las walkirias”, me entró la sospecha de que los helicópteros cabalgando la amanecida de Los Ángeles de Short Cuts son una broma de Altman dedicada a Coppola, la policía de L.A. hace huir de sus helicópteros a losangelinos como los de la Lufwaffe gringa a los vietnamitas. De repente he descubierto el Mediterráneo, la pólvora y el agua tibia, todo de una sola vez. Y después un episodio de la serie policial gringa protagonizada por Jesse Stone, una de las pocas series gringas que me gustan porque se trata de un solitario californiano en Nueva Inglaterra: imagino lo que debió ser para un guardia civil de Huelva que lo destinaran a Euzkadi en los tiempos de ETA. Ah, casi me olvido de reseñar que programé el DVD de Short Cuts porque estuve zapeando a la busca de alguna peli que valiese la pena, y me apareció en pantalla Abrazos rotos, y por más que me cae requetemal Almodóvar  y más que requetemal Penélope Cruz, y para más inri la peli estaba doblada, decidí fisgar un par de escenas a ver qué tal, hasta que apareció un rostro que me precipitó a cambiar de canal ipso fuckto: es uno de los ególatras más detestables que he tratado en mi vida, y soy experto en el tema. Fui uno de sus mejores amigos, y digo “fui” aunque no creo que los tenga si no es en pretérito.

Vino Rebeca para acompañar a Diny en la adquisición de unos nuevos audífonos, en vista de que los probados en los pasados meses demostraron ser ineficaces. Después quisieron almorzar en el chino, olvidando que los lunes cierran, como La Modicana y Marano, y no se les ocurrió acudir al Bistro Verde, que es el único abierto este día. Se tuvieron que conformar con comer unos bocadillos en una panadería de Sürth. Las envidio porque los bocadillos de las panaderías alemanas son mi debilidad. Es decir: una de mis mil y una debilidades.

Me manda Pepe Oliver un poemario de Erika Martínez, a quien no conozco: es una edición bilingüe, siendo de Pepe la traducción. Como objeto es bello, Habrá que leerlo.

Gran parte de la tarde sacrificado a la contabilidad doméstica de cara a mi declaración de ingresos del 2020, que debo entregar a más tardar el lunes 1.º de agosto: el plazo improrrogable de presentación a la implacable Hacienda es el 31. Dizque estamos en plena revolución electrónica, pero me parece que también en una elefantiasis del papelerío. ¡Hay que ver el que se ha juntado en los tres últimos años!

Weiß/Colonia, 26.7.

1:30 am : Me las prometía felices a partir de las 8:15 pm: daban Topkapi, de  Jules Dassin, basada en la estupenda novela de Eric Ambler; a continuación Un condenado a muerte se ha fugado, ejercicio impecable de narración en off, de Robert Bresson; y anunciaban como guinda del pastel la Sabrina de 1995 pero lo que pasan es la versión de Billy Wilder, insoportable cuando se la compara con la de Sydney Pollack. Me quedé sólo a ver la escena con la carta en que Sabrina decide suicidarse, para constatar una vez más el fallo del guion. Es una de las pocas pelis flojas de don Billy, no la salva ni Audrey Hepburn. Y es que, como él mismo sentenció de manera inmortal, «Nobody is perfect!»

Puntual a las 9:00 am llegó la consejera de CARE, la institución especializada en Asistencia Social, para instruirnos acerca del interrogatorio a que nos someterían desde ésta, a las 10:00, por teléfono. Y en verdad que se necesita estar bien aconsejado, porque algunas de las preguntas son trampas de la AS para evitar engaños, que de todo hay en la viña del Señor. A decir verdad, el interrogatorio fue tan exhaustivo que sólo eché de menos la pregunta de si entraba en nuestros planes asesinar al presidente de la República. Pero la fiel Rebeca estuvo a la altura (y hasta por encima) de las circunstancias, y el resultado es que clasificaron a Diny en el nivel de asistencia 3+ (de una escala de 5), o sea, con rápida recalificación al nivel 4 de acuerdo a cómo se desarrolle el proceso de su deterioro mental.

Almorzamos hoy en La Modicana con Rebeca, quien tuvo el diálogo fácil con Ulli, a quien conoce desde que ella era niña y Ulli & Carlitos una pareja recién formada. Ulli pidió su ensaladota habitual, Rebeca una pasta con salchicha y brócoli, Carlos otra pasta de la que no retuve el nombre, mientras que Diny y yo pedimos espaguetis con setas, riquísimos. Lógicamente, el tema de la conversación giró en torno a la Asistencia Social. Todos estuvimos de acuerdo en que las cosas se habían resuelto de manera satisfactoria. Alabado sea el santísimo sacramento del altar.

Dediqué gran parte de la larde a la contabilidad doméstica y logré poner en orden y clasificar todo el papalerío, incluida una notable cuota destinada a la papelera. Empiezo a ver la luz al final del túnel.

Weiß/Colonia, 27.7.

2:00 am Pasan de nuevo la temporada primera del Departamento Q de la Brigada de Homicidios en Copenhague, con el comisario Carl Mørck y su ayudante sirio Assad. Las novelas de Jussi Adler–Olsen suelen ser bastante complejas, por lo cual la necesaria tijera de la adaptación no les puede sacar todo el jugo, pero los episodios están bien tramados e interpretados, es una serie interesante y que muestra aspectos inimaginables de la vida cotidiana de los daneses, ese pueblo dizque tan feliz.

Vino Babette para sacar de paseo a Diny, fueron hasta el Rhin y luego comieron unas creps que para Diny fueron ya cena suficiente. Ni Babette ni Katya pueden olvidar nunca cómo se sacrificó Diny por Sigrid, su madre, atendiéndola hasta su muerte. Fue la tercera persona a la que Diny acompañó hasta el final de sus días. Primero Gerd, el marido de Riki, su mejor amiga, que estaba todavía dándole el pecho a Godelieve cuando se le declaró a Gerd el inoperable cáncer de cerebro que nos lo arrebató a sus cuarenta años: Diny se fue a vivir con ellos a Wijchen, un pueblo muy lindo, cerca de Nimega, y yo me quedé con nuestros hijos en Colonia, un par de meses duró la inútil batalla contra el mal. Eso fue a mediados de los años 70. Luego, en el 95, la lenta consunción de Monika, a la que cuidaron por turnos diarios de seis horas Diny y dos amigas más, amén de Jorge, que había sido su último novio, como ella los llamaba. Y por último Sigrid, años después, cuando Babette recién acababa de hacerla abuela y la pobre Sigrid ya no tenía fuerzas para sostener a Jan, su primer nieto, en sus brazos. Ahí terminaron 25 años de amistad y buena vecindad, testimoniada por la incomparable bondad de Diny.

Seguí a la tarde con la contabilidad doméstica e hice el borrador de mi declaración de ingresos y de gastos en el 2020. Para mi alegre sorpresa, ese año todavía había hecho pagos adelantados a Hacienda por un valor de casi 1.800 €, además de que tuve casi 3.000 € menos de ingresos (las devaluaciones del peso colombiano y el mexicano se hicieron notar en mis honorarios, ultramarinos la mayor parte dellos, como decimos los clásicos). Con suerte, hasta puede que el Fisco tenga que reintegrarme algo de lo ya cotizado. Oremus.

En las canchas inglesas de la Eurocopa femenina estamos viendo más colas de caballo que en un concurso hípico internacional. Pero esta semifinal Alemania vs. Francia ha sido un partido tan digno de verse como una semifinal de varones. Ahora bien, si Alemania ganase la final en Wembley contra Inglaterra, sus jugadoras recibirán 60.000 € c/u. Sus colegas varones, de haber ganado la final de Moscú en el 2018, habrían ganado 400.000 € per cápita. Este hecho me inspira un juego de palabras: en materia de pagos laborales, la inequidad respecto a la mujer no es otra cosa que una iniquidad. Una más.

Weiß/Colonia, 28.7.

1:45 am : Otro episodio de la saga del joven Morse, y el próximo miércoles no habrá ninguno, la serie se reanudará el miércoles 10. Nunca terminaré de entender el despelote de la programación en la TV alemana. Eso sí, hay que reconocerle el mérito de que con toda seguridad es un despelote sistemático. Sólo que el sistema es un libro cerrado con siete sellos.

Gary Lineker hizo famosa su frase según la cual «El fútbol es un juego simple: 22 hombres corren detrás de un balón durante 90 minutos y, al final, siempre ganan los alemanes». Me hace gracia la referencia anónima a la misma, comentando la derrota de Francia, ayer, en la Eurocopa femenina, por el diario Las Últimas Noticias de Alsacia: «Y al final, siempre gana Alemania. Pero mientras que los franceses han conseguido mandar a freír espárragos este viejo adagio desde hace ya algunos años, las francesas todavía tienen que seguir siendo pacientes»

Reflexionando sobre la palabra «oscuro», escrita sin b, recuerdo haberla visto por primera vez como parte del título de una novela increíble publicada en pleno franquismo y que se titulaba Lola, espejo oscuro. Eran nada menos que las memorias de una puta de lujo. No sé si la volvería a leer y como no la tengo en mi biblioteca, tendría que comprar un ejemplar de segunda mano, está ya descatalogada: después de esa Lola española vino la Lolita gringa y le robó el show a la andaluza.

Termino la contabilidad doméstica relacionada con Hacienda y el 2020, ya tengo cita con la asesoría fiscal para el lunes a las 2 de la tarde. Se me va a quitar un peso enorme de encima.

Weiß/Colonia, 29.7.

1:45 am : Tercer episodio (y creo que último, por ahora) de la primera temporada de la serie policial danesa sobre el Departamento Q. La voy a echar de menos.

Pasó Rebeca para lavarle el pelo a Diny y luego acompañarla a hacer unas compras. Se lo repito de nuevo, que no olvide que está de vacaciones y lo que debe hacer es descansar. Pero ella lo sabe, y sin embargoNo me merezco esta hija de lujo.

Vino Oskar a tomarme el pelo, cosa que no hacía desde una ristra de meses, de manera que mi cara la adornaban ya un par de patillas como de viejo bandolero calabrés. O camarero de las cuevas de Luis Candelas, en Madrid. Al irse, Oskar se encontró en la escalera con Diny y Rebeca, que regresaban de las compras en Rodenkirchen. Gran alegría para Diny, que tanto echa de menos a los nietos, y ese es uno de los cada vez menos datos todavía positivos de su memoria.

Comparto con mi compadre José María, él en su retiro a la orilla del Cauca, yo en el mío a la orilla del Rhin, la afición por la buena música clásica. Él, después de leer mi diario, me escribe: «Supongo, como en otras ocasiones y temas, que sabes que el tema musical de 2001: Odisea del espacio (la he visto un montón de veces), realmente se llama Así habló Zaratustra, obra hermosísima de Richard Strauss. Me encanta, igual que «La cabalgata de las Walkyiras» y la «Tocata y fuga» en re menor, al órgano, de Bach. Son mis favoritas, junto al apasionante Adagio de Albinoni». Le contesto que si bien coincido en gustos musicales con él, al 100%, «mis piezas favoritas son la 7.ª de Beethoven en la versión en vivo de la orquesta del Concertgebouw de Ámsterdam dirigida por Carlos Kleiber; el Bolero, de Ravel, de una originalidad que no ha marchitado su popularidad, y en la versión de la Filarmónica de Múnich dirigida por Sergiu Celibidache;  y el primer movimiento de la sinfonía Leningrado, de Shostakovich, en especial la segunda parte (la Marcha), cuando se apaga todo sonido, el asedio y sitio de la Wehrmacht han reducido la ciudad al silencio, y las cuerdas empiezan suave, suave, muy suave, y la orquesta –de la mano maestra de Maris Jansonss– se va incorporando, es un tema popular que Shostakovich convierte en un himno de la resistencia, un canto a la vida, y como seguramente sabes, Leningrado  nunca se rindió. Si no la conocés, oí el primer movimiento y no te importe el largo silencio, casi un minuto, a los seis de comenzar, es el homenaje de Shostakovich a los muertos del primer sitio, y luego vienen la resurrección y la vida ¡y cómo! Te mando además otro enlace, y después de abrirlo dime si alguna vez oíste un «Bolero» tan bolero como este de Celibidache, ¡el maestro baila literalmente en el podio! Y porque no hay dos sin tres, atento ahora a Carlos Kleiber y su 7.ª de Beethoven en vivo: parafraseando a Lope, “Esto es música, quien la oyó lo sabe”».

Weiß/Colonia, 30.7.

Anoche, de repente, me quedé dormido durante un episodio de Crímenes en las Shetland, ¡con lo que me gusta esta serie!, y cuando me desperté ya había terminado, así es que me fui derecho a la cama, «como quien se desangra», diría mi tocayo Güiraldes, las palabras finales de Don Segundo Sombra. Y hoy continúa esta desgana absoluta, este estado medio catatónico en que estoy viviendo los últimos días, también a causa del sol y el calor, que siempre han sido mis enemigos. Me haré algo de comer, repasaré las anotaciones de la semana antes de subirlas al blog de Fronterad y lo dejaré programado para la medianoche, como todas las semanas. El colmo es que el Rhin se está quedando seco. Hay ya tramos, entre Weiß y la orilla opuesta, donde el ferry para peatones y ciclistas sólo tiene 20 cm de agua bajo la quilla. Mi hermoso y querido río Tanto se me está yendo, y todo a la vez.

*******************THE END******************

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