Home Mientras tanto De mi Diario : Semana 52 / 2021

De mi Diario : Semana 52 / 2021

 

Weiß/Colonia, 20.12.

Recién pasada la medianoche : Acabo de volver a ver The Tall Men [Los implacables, que en la traducción alemana del título es Tres rivales, de los que hay uno que no aparece ni en el guion ni en la peli: misterio]. No la veía desde que se estrenó en Huelva, allá por 1960. Es un western de la conquista del Far–West, con un Clark Gable que era mucho más actor de lo que hacían suponer los estúpidos papeles que le encajaban, a excepción del Peter Warne de Sucedió una noche (su único Oscar), el segundo oficial Christian en La tragedia de la Bounty (¡bastante mejor que el Marlon Brando de su remake!), y desde luego el Rhett Butler de Lo que el viento se llevó. Ah, y el Gay Langland de Vidas rebeldes, su canto de cisne, como el de Montgomery Clift y el de Marilyn Monroe, ¡qué peli tan luctuosa, por todos los dioses de la cosmogonía gringa! Dicho sea de paso, Clark Gable era gaditano, pero no de Cádiz, sino de Cadiz/Ohio.

En el cuaderno de esquelas de la edición finisemanal del KStAnz, esta vez la de Elisabeth Broel, a quien no conozco pero me entero por Miss Hortensia Google que era una artista audiovisual autodidacta, de Aquisgrán, cofundadora de la Feria de Arte de Colonia y de una editorial de libros de arte, y ha sido «arrebatada a la vida por el virus». La esquela en sí también es una obra de arte, y lleva un epígrafe de Shakespeare, del acto IV de La tempestad, cuando Próspero comenta la mascarada que acaba de tener lugar. En la traducción de Astrana Marín, a la que descalzo del coturno, dice así: «Nuestras diversiones se han terminado. Estos actores, como había prevenido, eran espíritus todos y se han disipado en el aire, en el aire impalpable. [] Estamos tejidos de idéntica tela que los sueños, y nuestra corta vida se cierra con un sueño».

Después de leer mi diario, WS me escribe con respecto a Neruda: «Lo peor de sus infames memorias no es lo que oculta, sino lo que dice: que violó una mujer, que un hombre se arrodilló a sus pies para darle las gracias por su poesía (hay que ser ególatra), que Stalin tenía una lista de escritores a defender (o sea, que a los otros podían matarlos sin problema). Su poesía es melosa, babosa y piojosa, pero él como persona debió ser simplemente despreciable». Suscribo cada adjetivo qué digo cada adjetivo, todas y cada una de las letras de este juicio.

Weiß/Colonia, 21.12

El primer episodio de la octava temporada de Maria Wern, que acompaño desde el 2008: sigue siendo una buena serie, y los personajes han crecido consecuentemente con ella. Luego pasaron una peli con Julia Roberts que no conocía, Ben is Back [El regreso de Ben], donde tanto ella como Lucas Hedges en el papel de Ben, el hijo drogadicto que vuelve al hogar, dan un do de pecho interpretativo que no sé cómo no les acarreó nominaciones para el Oscar.

Hoy encontré otra esquela fúnebre curiosa en el KStAnz, una pequeña, lamentando la muerte de un sevillano nacido allá en 1937 y fallecido acá hace quince días. Como epígrafe, unas palabras del difunto, en castellano: «Me voy de equipaje ligero / con los bolsillos vacíos / y la cabeza erguida». Me da la impresión de que sus hijas, alemanas, lo han citado mal, seguro que él más bien diría «Me voy ligero de equipaje», como su paisano, Antonio Machado.

Al ir a archivar la de Elisabeth Broel, descubierta en su página web en un tamaño mayor del que aparecía en el KStAnz, y con la reproducción de su obra (“Planta del pie izquierdo”) en los colores originales, registro que su viudo se llama Gernot Cepl. Como no se trata de un apellido corriente, y tenemos un matrimonio amigo Gertrude y Charlie Cepl, que viven cerca de Montse, decido telefonearles, atiende Gertrude, le cuento y le pregunto, y sí, ese viudo es su cuñado, hermano de Charlie, y no hace mucho estuvieron celebrando juntas las dos parejas, y Elisabeth se había hecho el análisis y dio negativo, pero muy poco después la asaltó el virus y se la llevó de la noche a la mañana. Así de rápido puede ser. Le doy el pésame y me da como un escalofrío.

Después de leer mi diario, me escribe mi compadre José María desde su refugio a la orilla del río Cauca: «Hablando de apodos y de hipocorísticos, te cuento que mi colección es abundante. Por ser pelirrojo me han llamado ídem, fosforito, llamarada, candelo, incendio, cabecincendio, locrio, cascuélocrio, zanahoria, mono. Por pecoso me han llamado ídem, zaratano, granadillo, caratejo, banano, chingletiao o chilgueteado. Por llamarme José me han dicho Chepe, Chepelín, Pepe, Jose, Joselín. A partir del José María: Josema, Chema, Semaría, Chemita. Cuando chico, peleaba hasta con la sombra por ello; ahora, ya no me inmuto sin antes discernir el contexto y el tono en que me llamen o digan alguno de ellos. Por la gorra, la barba, la pipa y algunos versos, me han llamado León de Greiff, lo que me abruma, pues no soy digno ni de limpiarle la pipa para la siguiente fumatina. Vos mismo, a partir de una foto con boina, me has «confundido» con Ernesto Cardenal, y así. En esta época navideña, desde hace algunos años, soy papá Noel para muchas personitas muy queridas, empezando por mi nieta y complementando con muchos niños  y otros seres de escasos recursos, a los que acompaño en las festividades navideñas, colaborando con algunas dependencias de la Administración municipal de Sabaneta». Como es natural le contesto ipso fuckto: «Bueno, tú sí que eres digno del Guinness Book of Records. De mí te cuento que un compatriota tuyo, el columnista y novelista Esteban Carlos Mejía me llama Océano desde que supo que «bada», en coreano, significa nada menos que la mar salada».

Weiß/Colonia, 22.12.

1:05 am : Tenía mucha curiosidad por ver Asesinato en el Orient Express en la versión de Kenneth Branagh, que tan mal le cayó a la crítica cuando se estrenó aquí, y es explicable en parte porque la diferencia de peso específico de los dos repartos inclina la balanza del lado de la de Lumet en 1974. Basta pensar que en el papel con que Ingrid Bergman consiguió un Oscar a la mejor actriz de reparto, en este de KB se lo tenemos que soportar a la insufrible Penélope Cruz. Pero lo que a mi juicio falla de modo fundamental en esta versión es la actuación del propio Branagh, y eso a pesar de ser muy buena, pero ello se debe a que Branagh es un gran actor sespiriano, mientras Hercule Poirot es la más ínfima porción de Shakespeare que se despacha en botica, Vamos, que no alcanza ni para el excipiente, y así ni modo, don Branagh.

Del Bistro Verde nos llegaron generosas porciones de pechuga y pata de ganso recién salidas del horno y de las que dieron buena cuenta Ulli, Diny y Carlitos, hasta sobró pechuga, que se la llevaron ellos para la cena. Yo me conformé con picotear en la tabla de quesos, que dejé casi íntegra, también para la cena. Nos entregaron su regalo, una botella de uno de los mejores espumosos alemanes, el Riesling seco de la edición Baum/Meister Kunst, un Riesling frutal (lo cual es toda una sorpresa), lo descorcharemos para saludar al 2021. Nosotros les regalamos un ejemplar del almanaque de Paul y otro del libro Der Große Boss [El Gran Jefe], que es la Biblia reescrita del modo más irreverente y divertido que se pueda pensar. Mi ejemplar comprado en 1984 me llevó a la conclusión de que debía dosificar la lectura, y como son 220 capítulos decidí leer uno cada día, y a partir de marzo 1985 usé como señal de lectura una postal que me mandó por esos días nuestra inolvidable Monika y donde se ve a Jesús atado a las cadenas y riéndose a carcajadas. Esta vez la encuentro señalando el primero de los dos capítulos que el autor le dedica al episodio de Judith y que comienza así: «Holofornes casi se cae de su silla de campaña cuando introdujeron a Judith en su carpa. ¡Cielo santo, qué pedazo de hembra! Y cuando ella quiso arrojarse a sus pies, se lo impidió: “¡Pero no, Madame! ¿A qué viene eso? Soy sólo un pequeño general a quien más bien le correspondería arrojarse a sus pies, la belleza precede al genio. Permítame que me presente: soy Holofernes”. El genial estratega le pide a Judith que se siente. Su sirvienta debe seguir de pie. Sólo se le permite depositar en el suelo la carpa plegable». Una gozada todo el libro, pero eso sí, a pequeñas diócesis diarias, como diría el camarero tan redicho de La del manojo de rosas, a quien por serlo le llamaban “el Espasa”.

Weiß/Colonia, 23.12.

2:30 am : Pasaron primero Crooked House [La casa torcida], una policial que no conocía, basada en una novela de Agatha Christie que a lo mejor he leído en los lejanos años de Huelva, pero no la recordé viendo la peli. Una bastante entretenida y que tiene como aliciente el que no la protagoniza ese narciso insoportable que es Hercule Poirot. E iba a buscar alguna sorpresa en otro canal cuando caí en la cuenta de que la peli Robin Hood que seguía (y que no era la de Errol Flynn ni la de Kevin Costner ni la de Russell Crowe) tenía un segundo título en alemán, El rey de las pantimedias, lo que me llevó a fijarme en los títulos de crédito y resultó que es una de Mel Brooks, recién ha terminado y todavía me estoy riendo. Tuve que cerrar la puerta del salón para no despertar a la pobre Diny con mis carcajadas.

Leyendo el KStAnz descubro que Punta Umbría aparece en él, como consecuencia de que 240 millones del Gordo han ido a parar allí, es la primera vez que sucede en la historia del pueblo. Seguro que Punta Umbría no ha sido mencionada en la prensa alemana (si es que entonces lo fue) desde algún lejano día de mayo de 1943, reportando el descubrimiento del cadáver del presunto comandante británico William Martin en la playa oceánica de Huelva.

Me llega un precioso regalo navideño de Pepe Oliver. Es una cajita como las de fósforos, sólo que su contenido es un poema artísticamente dobladillado del que aproximo unos bellos versos de su final: «Te escucho. Hasta el silencio puede convertirse en un suave batir de alas. estirado sobre las yemas de nuestros dedos». Además me manda un ejemplar de la traducción española de Poder y Resistencia, de Ilija Trojanow, compinche suyo, a quien le pidió que me dedicara ese ejemplar personalmente. Se lo agradezco y le comento: «Ya conocía el libro de lija Trojanow, desde su aparición en alemán, pero me hace ilusión tenerlo en español con dedicatoria personal del autor (digo, supongo que es él, porque esa letra de la dedicatoria no es la tuya. Gracias también por este detalle). En esta novela, por cierto, en algún momento se menciona a David Ricardo y al leerlo me hizo recordar una frase de Brecht que me hace mucha gracia por la parte que me toca«Marx no es otra cosa que un Ricardo llevado a sus correctas consecuencias»».

Weiß/Colonia, 24.12.

Llamadas a Huelva para felicitar a la Nena, a Mónica, a Elena (a esta en la criada respondona de su teléfono). Todos están bien, milyuna gracias sean dadas a los dioses tartesios.

De cena un bife de lomo con albóndigas de papa pasadas por la sartén, y todo regado por un buen Carménère, como está mandao. Hhhhhhhhhhhhhhmmmmmmmmmm

Casi medianoche: Mi regalo para Diny se me olvidó entregárselo antes de que se fuese a dormir: es un libro muy lujoso, de cocina, titulado Navidades en Ámsterdam, que ya vale su precio por las ilustraciones con fotos de esa ciudad que tanto amamos y en la que hemos pasado tantos días inolvidables y felices. Pero como decía la abuela Remedios, «Todos los santos tienen novena», se lo entregaré mañana o en uno de los ocho días siguientes, si también me olvido mañana.

Weiß/Colonia, 25.12.

1:30 am : ¿Es buena esta peli de Sydney Pollack, Absence of Malice [Ausencia de malicia, en alemán La reportera sensacionalista]? Quizás no, pero qué buenísima pareja Sally Field y Paul Newman. Ella acababa de ganar su primer Oscar, con Norma Rae, y aquí su duelo con Newman funciona pese a ciertas inconsistencias en el guion. Retengo este diálogo: Megan dice «Tengo libres todas las noches de esta semana menos la del viernes», Michael sugiere «¿Entonces qué tal el viernes?», y Megan, sin un apice de vacilación: «Okay».

Hoy se cumplen 121 años del nacimiento de Humphrey Bogart, y por ser una efeméride capicúa, pero no sólo por eso, repaso varias escenas de sus pelis, entre ellas la final de Casablanca, que sigue siendo uno de los momentos más icónicos de la historia del cine.

Vino Rebeca alrededor del mediodía y se quedó a pasar el día con nosotros, mejor dicho, con Diny, porque estas dos si se ponen a platicar pueden hacerlo hasta el Día del Juicio Final, por la tardecita. Y Diny volvió a echar la casa por la ventana, en honor de nuestra huésped: cenamos rosbif de un rosado que dan ganas de parafrasear a Juan Ramón: «¡No lo toquéis más que así es el rosa!», y bolas de sémola y papa con una salsa espesa donde la cucharita casi se queda parada en medio del cuenco. Y otra ronda de Carménère para Diny y para mí, Rebeca no bebe casi nada.

Rebeca nos hizo ver un vídeo de Instagram en el que Paul y varios amigos tuyos, todos víctimas del virus, hablan de sus experiencias, de una manera sólida y razonada, sin aspavientos pero sin minimizar los riesgos. De todos los que intervienen, Paul es el único que dice que lo que más le cabrea del confinamiento es no poder abrazar a sus abuelos (nosotros, claro; la abuela paterna, María, murió hace años, y nuestro buen Helmut un mes antes del confinamiento). ¡Bendito seas, Paul, por ese corazón tan grande!

Pasan en el canal Arte la Tosca con la Callas y Tito Gobbi, en el Covent Garden, Londres 1964. Pocas veces rayó tan alto el diapasón de la calidad en la historia universal de la ópera. Callas no ha habido más que una, ella, y se llevó a la tumba el secreto de su arte. Menos mal que podemos resucitarlo en base a las milagrosas grabaciones de entonces, que todavía no disponían de unos medios tan sofisticados como los actuales.

Hoy, por fin, pude escribrir las largas cartas que se merecían Carla, en Roma, y Kathyushka, en Chilango City. Dos amistades que se cuentan entre los mayores regalos que me dio la vida, y bien saben los dioses de todas las cosmogonías que no tengo ninguna queja de ella en materia de regalos: ha sido escandalosamente pródiga conmigo.

Weiß/Colonia, 26.12.

1:30 am : He vuelto a ver The Holiday [Vacaciones], una peli de programación obligada en esta semana, y he vuelto a sentirme espectador casi virgen, dejándome sorprender por una narración de la que conozco todos sus entresijos. Hasta me sorprendió el cameo con Dustin Hoffman, en la videoteca, cuando Miles [Jack Black] le muestra a Iris [Kate Winslet] el DVD con la famosa El graduado. Inolvidable en cambio lo que el viejo Arthur Abbott [¡amoroso Eli Wallach!] le cuenta a Iris acerca de lo que son los “meet cute [encuentros lindos]” entre personas: «Digamos que un hombre y una mujer necesitan ropa para dormir y ambos van al mismo departamento de pijamas masculinos. El hombre le dice al vendedor: «Sólo necesito los pantalones», y la mujer: «Sólo necesito la chaqueta». Se miran el uno al otro y ése es un «encuentro lindo»».

Como este año la constelación calendaria ha sido que la Nochebuena cayese en jueves, y como en Alemania la Navidad significa dos días festivos (25 y 26) y el 27 es domingo, estamos desde el 24 por la mañana sin prensa escrita hasta pasado mañana, lunes. Ayer, cuando llegó Rebeca, me acababa de levantar y luego de saludarla me vine al tajo sin desayunar, pero hoy estamos solos, y después de prepararme el té de menta nuestro de cada día y una tostada con salmón ahumado, me dio por repasar el KStAnz del 24 y llegué a la desconsoladora conclusión de que tal vez el del lunes 27 no difiera mucho del día de Nochebuena. Habrá sus pinceladas distintas (parece que se salvó el callejón sin salida con el Brexit a mano armada que deseaba el clon de the fake president en el 10 de Downing Street), ¿pero el resto?Ni siquiera es 28, por más que en Alemania, de todos modos, el día de las inocentadas es el 1.º de abril. ¿Qué tal como titular para el 28, en el Diario de Huelva?:

El semanario Marpo Colo, de Venecia

Huyendo de los carabinieri, prostituta local bate récords mundiales de natación

******************THE END*******************

Salir de la versión móvil