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Divina justicia

Historias en tres minutos. Videos que abordan temas que invitan a la reflexión.

 

El sol abrasador quema el asfalto. La carretera arde, desgastándose, poco a poco, pero de una manera continua. Los coches avanzan a gran velocidad. El sonido de la rueda deslizándose por el reblandecido asfalto suena de una manera pegajosa, como si el alquitrán de la carretera se pegara formando un solo cuerpo con la rueda, un cuerpo mortal e indiferente al mundo que deja atrás. Un leve sonido, se acerca… Angustiado bajo el calor. Paso tras paso. Sin entender nada. Todo ha cambiado de un momento a otro. Jadeos. Completamente aturdido por el miedo y el cansancio, por la sed y la desesperación, se tambalea. Los coches pasan rápido. Muy cerca y a la vez muy lejanos. Nadie para. A nadie le importa. Las heridas del caminar se acentúan. La carretera se vuelve un camino eterno, frío, alejado de todo conocido. Más allá de las fuerzas se intenta continuar, para sobrevivir. Pero el cansancio hace mella y un mareo traiciona tu cuerpo, y entonces… Notar como revientas por dentro, cayendo al suelo, y agonizar hasta que la muerte te lleve, ahogado en tu propia sangre…

 

Miles de animales, especialmente los perros, son abandonados cada año en verano en las carreteras. Los que no mueren al instante, por un golpe de un coche, pueden llegar a agonizar varias horas, incluso días…

 

Desde aquí nos gustaría ofrecer nuestro a apoyo a todas las organizaciones y asociaciones en defensa de los animales, especialmente a “Perrikus” y “Galgos sin fronteras”, que rescatan, operan y recuperan con gran esmero todos los perros que encuentran, para después mantenerlos hasta que una familia digna los adopte.

 

En referencia a este tema, hoy presentamos la primera historia en 180 segundos de la sección 180º. Algo parecido a un cuento:

 

Divina Justicia

Donde se trata el problema de los abandonos. Nuestro especial agradecimiento a Federico Luppi,y a Hector Colome, que al conocer el tema, se prestaron a colaborar con nosotros, así como el perro Pancho.

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