Argentina y España están unidas por muchas causas y circunstancias pero esta vez el teatro es el lazo de unión. El arquitecto y el emperador de Asiria es la primera coproducción entre el Teatro Español y el Complejo Teatral bonaerense. Una obra que se compone en una metáfora de la sociedad que no busca los valores de la filosofía, ni de la sabiduría ni de la justicia sino la constante vital de caer en los mismos errores e imitar los imperativos ficticios de las imposiciones sociales. La directora de la obra, Corina Fiorillo, asegura que la que obra de Fernando Arrabal, creada hace 50 años, parece que fue escrita ayer. El tono de sátira y humor inunda los diálogos sobre la introspectiva lucha contra nosotros mismos.