Con Vitalina Varela, en la que los lindes entre ficción y realidad se difuminaban de manera tan fabulosa como inquietante en un barrio chabolista de Lisboa, el cineasta portugués Pedro Costa ya mostró hasta qué punto quería llevar la verdad de su cine, ajeno a tantas modas y poses. Como escribió recientemente Tereixa Constenla en el suplemento cultural de El País, Babelia, “Costa no comparte ‘la carga romántica’ que envuelve el cine ni la visión del director como un pensador” (…) ‘Cuando muestro mis películas en Los Ángeles, les intriga cómo están hechas, y siempre les digo que no hay secretos, que hay una racionalidad que tiene que ver con lo que el mundo es y con la eliminación de mentiras como que el cine es muy caro y que solo algunas personas con mucho talento lo pueden hacer’”. El artista Javier Codesal, autor del ensayo Canción de Pedro Costa, es el comisario de la exposición del mismo título que le dedica el Centro de la Virreina en Barcelona, y que luego viajará a la Fundación Luis Seona de A Coruña. La muestra gira en torno al rostro y la voz. Según el comisario, Vitalina Varela “culmina de algún modo un trayecto visual y narrativo” del director portugués. Cinco de las diez obras que se muestran, agrupadas en Canciones para evitar el suicidio y Nuestras voces no cantarán más, han sido realizadas expresamente para esta exposición.

Dónde: La Virreina, Centro de la Imagen, Barcelona

Cuándo: Hasta el 23 de marzo, 2023