ESTE DEL CHAD, ABRIL DE 2007
Último viernes del mes de mayo de 2020.
Tiempo de desescalada
Tras el horror, tras ver arder sus pueblos,
hombres ejecutados en las plazas,
mujeres atacadas en el vientre,
niños muertos de sed, tras el horror
miles de refugiados alcanzaron
un lugar donde había pan y sombra.
Después de caminar por el desierto
parecían bosquejos de personas,
exhaustos, como harapos desplomados
de las cansadas perchas del martirio,
fresca la sangre en la memoria aún.
Sin embargo en apenas cuatro días
salieron a buscar ramas y cuerdas,
ya con miedo en los ojos, ya con lágrimas,
salieron a buscar palos y lonas,
y levantaron juntos una escuela,
aulas pequeñas, míseras, mas aulas,
alzaron una escuela con sus manos
donde niños y niñas aprendieran
sílabas, cantos, números, mañanas.
Yo lloré de emoción aquella tarde.
Y nosotros, hermanos, tras los días,
las semanas, los meses del dolor,
tras docenas de miles de difuntos,
ahora que volvemos a las calles
como bosquejos de una sociedad,
a andar nuestras ciudades, nuestro mundo,
¿sabremos juntos levantar la escuela?
Gonzalo Sánchez-Terán