El escultor Antony Gormley se planta en los Alpes. Este proyecto del artista británico en colaboración con el Kunsthaus Bregenz lleva su trabajo a plena naturaleza. 100 figuras realizadas en bronce a tamaño real, que representan al propio Gormley desnudo, se pueden ver esparcidas por diferentes puntos de las montañas de Vorarlberg, a más de 2000 metros de altitud. Según el propio Gormley, es una forma de plantear una de las cuestiones esenciales de la existencia humana: ¿qué hacemos aquí? Para aquellos que no puedan desplazarse hasta las montañas austriacas, el museo de Bregenz acogerá una exposición de fotografía