Home Mientras tanto Horror en el supermercado CLIII – Verano en Madrid I

Horror en el supermercado CLIII – Verano en Madrid I


Raquetistas de Kukai Danza – foto de Rafael Bastante / Madrid Destino

TIAGO.- Carol, yo quiero ser raquetista.

CAROL.- ¿Eh?

TIAGO.- Raquetista… Pelotari, pero mujer pelotari.

CAROL.- No entiendo nada.

TIAGO.- Es que el martes estuvimos todos en la Residencia de Estudiantes, viendo una propuesta de Veranos de la Villa.

GONÇALO.- Oh, “una propuesta”, hablas como todo un entendido en la materia.

CAROL.- ¿Y ese quién es?

GONÇALO.- Soy Gonçalo. Con ç. Encantado.

CAROL.- ¿Y qué haces aquí?

GONÇALO.- Me han dicho que aquí hay mucho teatro.

TIAGO.- Gonçalo ha venido a pasar el verano en Madrid.

CAROL.- ¿Me vais a llenar el supermercado de murciélagos?

TIAGO.- Eres una egoísta de mierda.

CAROL.- ¿Y a ti quién te ha enseñado a hablar así?

TIAGO.- Mi padre.

CAROL.- Lo que faltaba. ¡Marcelo! ¡Marceloooo!

TIAGO.- ¿Por qué le buscas?

CAROL.- Porque el supermercado está lleno de murciélagos, y alguno se tendrá que ir…

TIAGO.- Gonçalo es un amigo que hice en Fundão y no se va a ir. Se ha venido a Madrid a ver teatro.

CAROL.- Si cada vez que sales de Madrid te vas a traer un murciélago nuevo…

TIAGO.- Me traigo a quien me da la gana.

CAROL.- Tiago, te estás pasando…

TIAGO.- Cállate ya, pesada, que esto no iba de meterte con mis amigos… Esto iba de que quiero ser raquetista.

CAROL.- Pero, no te entiendo, ¿qué narices es eso de raquetista?

TIAGO.- Es una de las sorpresas de la programación de Veranos de la Villa, que hubo en la Residencia de Estudiantes martes y miércoles. Se hablaba de pelotas, de raquetas, de mujeres que querían trabajar y trabajaban, dando a la pelota contra la pared, en los frontones… Y algunas viajaban a Cuba para trabajar allí, y volvían con dinero. Y algunas ganaban mucho…


Raquetistas de Kukai Danza – foto de Rafael Bastante / Madrid Destino

GONÇALO.- Pero, a ver, ¿qué es Veranos de la Villa?

TIAGO.- Ya te lo expliqué ayer… Es un festival con muchas propuestas, exposiciones, danza, teatro, ópera, teatro de calle… ¡Es que “la cultura también es para el verano”! Eso es lo que pone en su web, que lo he mirado con el móvil de Carol.

GONÇALO.- Ah, en este supermercado, cuando queremos buscar algo en Internet, ¿lo miramos en el móvil de Carol?

TIAGIO.- Claro.

CAROL.- Tenéis un morro vosotros los murciélagos…

TIAGO.- A ver, Carol, es que no hay más gente aquí…

CAROL.- Está el jefe, se llama Lorenzo, le podéis quitar también el móvil de vez en cuando, que yo el mío también lo necesito para mis cosas… Caraduras.

GONÇALO.- Tiago, ¿por qué me insulta esta señora, si yo no la conozco de nada?

TIAGO.- Bueno, ella es así, ya te acostumbrarás… Iba diciendo que Veranos de la Villa se inauguró el 5 de julio con una cosa muy linda, en una explanada en el río, el Puente del Rey… Era un espectáculo aéreo que se llamaba Sylphes, de Aerial Strada, junto con la Orquesta Sinfónica Verum, y había unas bailarinas que volaban, era danza, pero en el aire, a 35 metros de altura… Yo, como estoy acostumbrado a estar alto, que soy un murciélago, no me parece tan impresionante eso de 35 metros, pero creo que a los humanos sí se lo parece… Y bueno, ahí estaba la orquesta tocando música inspirada en Vivaldi, pero compuesta por Max Richter, mientras unas ocho bailarinas hacían coreografías de grupo colgadas de la luna, muy sugerente todo… Si quieres, puedes mirar las fotos en el móvil de Carol…


Sylphes de Aerial Strada – foto de Chus Blázquez / Madrid Destino

CAROL.- Mi móvil es mío.

TIAGO- No la hagas caso… Cuando necesites mirar algo, se lo quitas.

CAROL.- Ni lo sueñes, Gonzalo.

GONÇALO.- Gonçalo.

CAROL.- ¿Y qué he dicho?

GONÇALO.- Gonzalo.

CAROL.- ¿Y cómo es?

GONÇALO.- Gonçalo.

CAROL.- ¿Y qué he dicho?

GONÇALO.- Gonzalo.

CAROL.- ¿Y cómo es?

GONÇALO.- Gonçalo.

CAROL.- ¿Y qué he dicho?

GONÇALO.- Gonzalo.

CAROL.- ¿Y cómo es?

TIAGO.- ¿Vais a seguir así toda la mañana?

CAROL.- Qué aburrimiento, me marcho…

TIAGO.- Pero sí aún no te hemos contado. ¡Quiero ser raquetista!

CAROL.- Eso ya me lo has dicho, pero no creo que puedas…

TIAGO.- ¡El año pasado siempre me decías que puedo ser lo que yo quiera! ¿por qué has cambiado de idea?

CAROL.- Bueno…

TIAGO.- Ahora quiero ser mujer raquetista.

CAROL.- Te va a costar, pero bueno…

TIAGO.- ¡Puedo ser lo que yo quiera!

CAROL.- Tienes razón.

GONÇALO.- ¿Por qué intentas quitarle quitar la ilusión, Carol?

CAROL.- ¿Quitarle la ilusión? No, eso no. Pero es un murciélago de casi dos años de edad… Ya me dirás si puede hacerse mujer raquetista.

TIAGO.- ¡Sí puedo! ¡Si quiero, puedo!

CAROL.- Pues muy bien. Hazte mujer raquetista.

TIAGO.- Ayer en los jardines de la Residencia de Estudiantes se recuperó la memoria de las mujeres deportistas en una nueva creación de Kukai Danza

GONÇALO.- Oh, “una nueva creación”, hablas como todo un profesional…

TIAGO.- Había bailarinas que tocaban instrumentos, y se iba alternando escenas de danza con entrevistas a mujeres que fueron raquetistas, hechas por Anne Igartiburu en directo y luego al final las bailarinas le dieron a las mujeres sus raquetas, y fue muy emocionante…

GONÇALO.- Y la obra se llamaba Raquetistas.


Raquetistas de Kukai Danza – foto de Rafael Bastante / Madrid Destino

TIAGO.-  Yo quiero ser raquetista.

CAROL.- Pues muy bien.

TIAGO.- Y la vimos todos.

CAROL.- ¿Todos? ¿Qué todos?

TIAGO.- Pues todos los murciélagos, nosotros dos, mi papá, que se llama Marcelo, mi mamá, que se llama Sabina, y también Finea, y varios murciélagos más de Fundão, y luego un par de murciélagos del otro lado del río Manzanares,. Y hasta la madre de Marcelo que vino desde Almagro, para decirle que tiene que ver la obra que ha ganado el Almagro Off, Primer Sueño: Pause, que estuvo ya en Nave 73. Y que la compañía La jabonería se ha llevado una mención especial con El Aquiles imposible, que estará en el ClasicOFF de Nave 73 la semana que viene.

CAROL.- ¿De dónde ha salido tanto murciélago?

TIAGO.- Bueno, no sé…

CAROL.- Y todos estáis durmiendo aquí en el supermercado.

TIAGO.- Bueno, donde duermen dos, duermen tres…

CAROL.- No son tres, son por lo menos diecisiete.

TIAGO.- Tres, diecisiete… ¿qué más da? ¿Acaso el supermercado es tuyo?

CAROL.- ¿Por qué te has vuelto tan respondón?

GONÇALO.- Será la pubertad…

CAROL.- Aquí no hay sitio para todos los murciélagos que se os ocurra traer. Este es un supermercado de barrio. Si queréis estar todos juntos, id a un centro comercial de esos de las afueras, que tienen supermercados de varias plantas… Allí tenéis hasta piscina…

GONÇALO.- Qué pesada es esta tipa, ¿no, Tiago?

TIAGO.- Ya te digo.

CAROL.- Vaya par de idiotas…

TIAGO.- Además, que no te he dicho, Carol, que Gonçalo quiere ser flamenco. Es que después de ver Raquetistas, vimos un doblete de la Compañía Antonio Gades en el Conde Duque, también en Veranos de la Villa. Primero Bodas de sangre, que era una versión en un poco más de media hora, muy sintética, con…

GONÇALO.- Uy, “muy sintética”, hablas como todo un profesional, Tiago…

TIAGO.- … con algunas de las escenas de Bodas de sangre, que claro, a lo mejor hay que conocer la obra, pero como yo la conozco, se la conté a Gonçalo y…

GONÇALO.- Es que el año que viene se cumplen cincuenta años del estreno de esta versión de Bodas de sangre de Antonio Gades.


Bodas de sangre
de la Compañía Antonio Gades – foto de Chus Blázquez / Madrid Destino

CAROL.- ¿Y por qué lo sabes?

TIAGO.- Lo hemos leído en tu móvil esta mañana, Carol.

GONÇALO.- Y que además, según dice la web, era la primera vez que Gades trabajaba con Carlos Saura.

TIAGO.- Te cuentan la historia de la obra de Lorca a través del flamenco, sale la escena de la madre y de la boda, y de…

GONÇALO.- No se lo cuentes, que se fastidie, que es una borde esta señora. ¡Que hubiera a verla a Veranos de la Villa!

CAROL.- Y tú eres un impresentable, Gonçalo, y si entras así en este supermercado, te va a ir muy mal.

GONÇALO.- Este supermercado no es tuyo, Carol.

CAROL.- Pero en este supermercado mando yo.

GONÇALO.- Eso lo veremos.

TIAGO.- Y luego vimos Suite flamenca, que es ya más flamenco, un número tras otro, algunos con todo el cuerpo de baile, otros con solistas, y luego una señora más mayor que era lo más.


La señora que era «lo más», Stella Arauzo, en Suite flamenca de la Compañía Antonio Gades – foto de Chuas Blázquez / Madrid Destino

GONÇALO.- ¿”Lo más”? Eso no te ha quedado nada profesional ni nada elegante.

TIAGO.- Yo hablo como me da la gana.

GONÇALO.- ¿A mí también me contestas?

TIAGO.- Es la pubertad.

CAROL.- ¿Y hasta cuándo está esta obra?

TIAGO.- Acabó ayer. Es que te lo pierdes todo, por mendruga.

GONÇALO.- ¿Mendruga? ¿Qué es eso?

TIAGO.- La mejor definición de mendruga es Carol.

GONÇALO.- Ah, ya lo entiendo.

CAROL.- No tenéis ninguna gracia, par de sinvergüenzas.

TIAGO.- Y viendo Suite flamenca fue cuando Gonçalo decidió hacerse flamenco. Yo, raquetista y Gonçalo, flamenco. ¿Qué te parece?

CAROL.- ¿Dónde está Marcelo?

TIAGO.- Ni idea, papá es libre. Estará durmiendo… ¿Para qué le quieres?

CAROL.- Tengo que hablar con él sobre esto.

TIAGO y GONÇALO.- ¿Esto? ¡Podemos ser lo que queramos!

CAROL.- No, si me refiero a lo de ocupar el supermercado, diecisiete murciélagos ocupando el supermercado…

GONÇALO.- Pues la otra noche al Patio del Conde Duque fuimos todos a ver a la Compañía Antonio Gades e hicimos derrapes y todo entre los bailaores y las bailaoras y nadie se quejó.

CAROL.- Pues quedaos a vivir allí, y no aquí.

GONÇALO.- ¡De eso nada! ¡Aquí se está más fresquito!

CAROL.- ¡Marcelo! ¡Marcelooooo!

@nico_guau

 


Suite flamenca
de la Compañía Antonio Gades – foto de Chuas Blázquez / Madrid Destino

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