(Ningún animal ha sufrido daño en la escritura de esta escena.)
(Se advierte que la lectura de tonterías sin moderación puede tener un efecto laxante.)
CAROL.- No puedo…
TIAGO.- ¿Por qué?
CAROL.- Porque estoy desarrollando una cosa que coge la cara de tu foto de perfil de guasap y la cara de la foto de perfil de guasap de la persona a la que le envías la cosa, y pone ambas caras dentro del cuadro El matrimonio Arnolfini, y… (Ríe.)
TIAGO.- ¿De qué te ríes?
CAROL.- Es muy gracioso, Tiago.
TIAGO.- Pues yo no le veo la gracia.
GONÇALO.- ¿Y si alguien en vez de su cara como foto de perfil, tiene un paisaje lunar?
CAROL.- Ya habló el aguafiestas.
TIAGO.- ¿Y si alguien tiene otra parte del cuerpo como…?
GONÇALO.- ¿Como qué?
TIAGO.- No lo digo, es que sería una ordinariez si lo dijera…
GONÇALO.- Cobarde…
TIAGO.- Venga, Carol, déjanos tu ordenador que vamos a buscar una cosa…
CAROL.- Que no, que tengo que terminar esto.
GONÇALO.- ¿Y si en vez de tener la cara como foto de perfil…?
CAROL.- ¡Cállate ya!
GONÇALO.- Vale, hija, vale…
CAROL.- No me trates de esa forma tan condescendiente… Lo de hija se lo llamas a tu hija. Cuando la tengas.
SABINA.- ¿Qué es condescendiente?
Gonçalo no dice nada. Carol sigue pegada a su ordenador. Tiago se decide a hablar.
TIAGO.- Bueno, ya que no me dejas el ordenador, os contaré lo otro que os iba a contar esta mañana.
GONÇALO.- Venga, empieza.
TIAGO.- Me han ofrecido un cacho.
GONÇALO.- ¿Un cacho?
TIAGO.- Sí, un cacho.
MARCELO.- ¿Un cacho de qué?
CAROL.- (Al oír a Marcelo.) Anda, si estáis todos los murciélagos hoy por aquí…
FINEA.- Nos ha citado Tiago para decirnos no sé qué cosa.
TIAGO.- Ya os lo he dicho, me han ofrecido un cacho.
SABINA.- ¿Qué es un cacho?
RAMÓN.- Un trozo.
JORGITO.- Un pedacito.
CAROL.- Bueno, ¡pero es que estáis todos aquí! ¡Qué poder de convocatoria tienes, Tiago!
SABINA.- ¿Qué es convocatoria?
TIAGO.- Deja de preguntar tontadas, mamá.
SABINA.- No son tontadas.
TIAGO.- Me han ofrecido un cacho y he tenido que decir que no.
MARCELO.- ¿Un cacho de un pastel?
TIAGO.- Sí, digamos que se le puede llamar un pastel.
FINEA.- ¿Pero un cacho de qué pastel? ¿Una tarta de cumpleaños? ¿De quién es el cumpleaños?
TIAGO.- Del Canal.
SABINA.- ¿Qué es el Canal?
JARGITO.- Algo de la tele, seguro.
FINEA.- ¿Qué canal de la tele cumple años?
TIAGO.- Me han ofrecido programar un cacho del Canal.
MARCELO.- ¿Qué? ¿El Canal? ¿A ti?
TIAGO.- Me han ofrecido ser el séptimo programador de los Teatros del Canal.
MARCELO.- ¡Lo impugno! ¿Quién narices eres tú para programar el Canal?
RAMÓN.- ¿El séptimo programador? ¡Parece una profecía!
JORGITO.- ¡Cuando el séptimo programador del Bosque de Birnam avance hacia ti, sal por patas!
RAMÓN.- Nadie que haya nacido de mujer podrá hacerte daño…
JORGITO.- Pero, cuidado conmigo, que como soy murciélago, no he nacido de mujer…
RAMÓN.- Oye, Jorgito, podríamos hacer nuestra versión de Macbeth.
TIAGO.- En concreto me han ofrecido que me encargue de la programación de espectáculos de murciélagos.
MARCELO.- ¿No tienen ya suficientes programadores?
RAMON.- ¿Cuántos programadores tienen?
MARCELO.- ¡Han perdido ya la cuenta, de tantos como tienen!
SABINA.- ¿Qué es un programador?
JORGITO.- Podríamos presentarles a esos programadores nuestra versión de Macbeth.
MARCELO.- Pues en unos sitios se lee que tienen 6 programadores, y en otros 16. Pero tampoco está muy claro si los 6 o los 16 son programadores, asesores, o proponedores, creo que su misión va a ser proponer propuestas a una persona que está por encima de ellos y que decidirá qué se programa…
SABINA.- ¿Qué es un proponedor?
MARCELO.- Y no se sabe si luego además van a salir a la calle a buscar más propuestas, porque a lo mejor con los 16 proponedores no tienen suficiente.
CAROL.- ¿Eso también lo dicen?
MARCELO.- No, eso lo digo yo.
FINEA.- Ah, pues yo quiero proponer cosas…
RAMÓN.- Podrían colgar un buzón en algún sitio de la fachada, para que la gente, de camino al súper, pueda echar una propuesta.
CAROL.- Como en el 15M.
MARCELO.- Pues creo que precisamente como el 15M no va a ser.
SABINA.- ¿Qué es el 15M?
MARCELO.- Se han dividido entre los 6 proponedores principales las partes de la programación…
SABINA.- Ah, ¿los cachos?
MARCELO.- … la lírica, el teatro internacional, el teatro del siglo XX y XXI, el clásico, las artes vivas, y el teatro medieval y renacentista.
SABINA.- ¿Qué son las artes vivas?
JORGITO.- ¿Y la danza dónde quedan en todo eso?
MARCELO.- Lo de la danza aún no se sabe, porque dicen que Blanca Li, que se quedará dirigiendo Madrid en Danza, asesorará a los asesores sobre la danza, igual que los demás directores de festivales, que también asesorarán a los asesores.
SABINA.- ¿Los asesores asesoran a los asesores, es decir, a ellos mismos?
RAMÓN.- ¿Y la música?
MARCELO.- Supongo que igual,
SABINA.- No entiendo nada.
MARCELO.- Y algunos de los 16 programadores o asesores tienen ya edad de estar jubilados.
SABINA.- Pero, ¿son 6 o son 16? ¿Son, asesores, programadores o proponedores?
MARCELO.- Y, además, dicen las malas lenguas, que alguno no puede caminar solo, tiene que ir del brazo de alguien.
RAMÓN.- Si volaran, como nosotros, no tendrían ese problema con caminar…
MARCELO.- Y el presupuesto ha subido en 2 millones de euros. Ahora se ha llegado a 6,6 millones de euros.
SABINA.- ¿Tú sabes contar tan alto, Tiago?
JORGITO.- Yo sé contar del 1 al 5, y ya por encima de eso, me pierdo…
SABINA.- Tú no eres Tiago.
JORGITO.- Anda, ya lo sé, vaya tonterías dices, Sabina…
MARCELO.- Además, la permanencia en cartel de las obras programadas va a ser mayor, y los 6 asesores principales van a estrenar producciones de Canal dirigidas por ellos mismos, que van a estar mucho tiempo en cartel; por eso hay gente que dice que, con esas 6 producciones, junto con los festivales, Madrid en Danza, Teatralia, Festival de Otoño, Suma Flamenca… pues que no queda tiempo para programar otras cosas.
SABINA.- ¿Y tú vas a trabajar en los Teatros del Canal, hijo?
TIAGO.- Pues es que he dicho que no.
SABINA.- Mejor, porque eso es tan grande que uno se pierde.
GONÇALO.- ¿Has dicho que no?
TIAGO.- Sí, es que…
JORGITO.- Pero, ¿cómo has dicho que no? ¿Entonces quién nos va a programar nuestra versión de Macbeth?
RAMÓN.- Con lo que nosotros te queremos Tiago…
TIAGO.- Sí, claro, cuando estoy cerca del poder, todos me quieren…
MARCELO.- Pues mira, me parece fenomenal que hayas dicho que no, porque es que tú no tienes ni idea de teatro de murciélagos, si de verdad quieren saber algo sobre el teatro de murciélagos, que me contraten a mí…
TIAGO.- Eres un maldito envidioso, papá, no dejas paso a las nuevas generaciones… Todo lo quieres para ti
MARCELO.- ¿Yo? ¿Y la mitad de los proponedores, qué? ¿Dejan paso a las nuevas generaciones?
SABINA.- ¿Qué son las nuevas generaciones?
TIAGO.- A ver, os explico por qué dije que no
MARCELO.- Si es que me parece fenomenal que hayas dicho que no, porque ese trabajo era para mí, no para ti. Esta misma tarde me presento allí a aceptar yo el puesto.
RAMÓN.- ¿Nos programas nuestras versión de Macbeth, Marcelo?
FINEA.- Tú no puedes aceptar ningún puesto, inmundo, porque no te lo han ofrecido a ti…
MARCELO.- Yo acepto lo que me da la gana, inmunda.
FINEA.- ¡El inmundo lo eres tú!
MARCELO.- ¡Tú más!
Finea y Marcelo se empiezan a tirar de las orejas.
SABINA.- Eh, yo también quiero…
Sabina, para no ser menos, se enzarza a pelearse también.
RAMÓN Y JORGITO.- ¡Eh, que aquí inmundos somos todos!
Ramón y Jorgito se meten también en la pelea.
TIAGO.- Bueno, Gonçalo, pues ya que estos ya están peleando, te cuento a ti lo que pasó…
CAROL.- ¿Y a mí?
TIAGO.- Vale, a ti también… Primero de todo me dijeron que me producían un espectáculo, que podía contar con varios miles de euros para la producción de un espectáculo de murciélagos. Varios miles de euros, que yo no sé qué hacer con los euros, porque yo soy un murciélago y no uso euros… Y luego me dijeron que el sueldo para el puesto de programador, que eran 100.000 euros, lo iban a dividir entre los 7, y que tocaríamos a la séptima parte… Pero, claro, pensé, pobres, ellos necesitan euros para vivir, yo no… Porque vivo de gratis en este supermercado, y no pago en los teatros… Así que, si yo me quito del confuso sistema este de programadores, en vez de dividir entre 7, dividirán entre 6, y tocarán a más.
MARCELO.- Tú eres imbécil, hijo.
TIAGO.- Y tú eres un inmundo, papá.
MARCELO.- Pues sí, eso es verdad.
GONÇALO.- Todo es mentira, Tiago.
TIAGO.- Sí, la vida es una mentira.
GONÇALO.- No, si me refiero a lo que nos has contado. Es mentira.
TIAGO.- ¿Lo de que me han ofrecido ser programador de un cacho de Canal?
GONÇALO.- Sí.
TIAGO.- No es mentira.
GONÇALO.- Sí lo es.
TIAGO.- No.
GONÇALO.- Sí.
Tiago y Gonçalo se agarran por las orejas y se empiezan a pelear. De repente se insertan dentro del otro grupo de murciélagos peleándose. Ya no se sabe ni de quién es cada oreja…
CAROL.- ¿Podéis ir a pelearos un poco más allá, que tengo que terminar mi cosa esta para guasap?
No sé de qué color es la sangre fría de los murciélagos, pero ten cuidado si pasas bajo ellos en el supermercado, no te vaya a gotear.
@nico_guau