La evolución de la fotografía ha estado ligada a la astronomía. Desde sus primeros días se ha utilizado como herramienta para avanzar en la investigación y observación de las nebulosas y estrellas. Esta relación ha creado impresionantes e increíbles imágenes. La exposición que acoge el gran espacio fotográfico de Arizona recoge algunas de estos pellizcos de la humanidad para trazar y comprender el universo en expansión.