Cada cierto tiempo, Claudette Schreuders abandona la Ciudad del Cabo, en Suráfrica, donde tiene su estudio, para mostrar sus delicadas y conmovedoras esculturas de madera. La galería neoyorquina de Jack Shainman lleva años volcada en su proyección. En su nueva exposición, Note to Self, que incluye litografías y esculturas, vuelva a hablar de las ambigüedades que le plantea la búsqueda de su propia identidad en su país tras el fin del apartheid.