Los científicos están de acuerdo en que el cambio climático es real y está causado por la actividad humana insostenible, como la quema de combustibles fósiles, pero ciertos actores siguen difundiendo información errónea, creando percepciones falsas perjudiciales que pueden sofocar una acción climática eficaz.
La acción por el clima es uno de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible.
En un debate sobre la lucha contra la desinformación: Un frente de actuación urgente, la asesora sénior de las Naciones Unidas sobre Integridad de la Información, Charlotte Scaddan, habló con tres expertos en clima sobre por qué es prioritario acabar con los datos engañosos al respecto: la embajadora de buena voluntad del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y activista climática, Vanessa Nakate; el cofundador de Red de Publicidad Consciente y miembro de Acción por el clima contra la desinformación, Jake Dubbins, y el meteorólogo de El Canal del Tiempo, Paul Goodloe.
Estos son algunos de los aspectos más destacados de sus intervenciones:
Diferentes categorías de mentiras
Jake Dubbins: Definimos la desinformación climática en tres grandes categorías:
Negación rotunda: sabemos que el cambio climático está ocurriendo y que está causado por el ser humano, pero se niega este hecho. Hay estafas y bulos climáticos, términos que son tendencia en las redes sociales.
El segundo aspecto que analizamos son las emisiones y la selección de datos, es decir, la elección de datos sin ofrecer una imagen completa para engañar a la gente. Y la tercera área son las falsas soluciones, es decir, sugerir acciones que no están en consonancia con el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático.
El año pasado, en la COP 27, realizamos una encuesta y descubrimos que estos mensajes calan en muchos países. Hicimos preguntas en seis países diferentes y descubrimos que el 23% de los estadounidenses cree que el cambio climático es un engaño urdido por el Foro Económico Mundial.
En los seis países encuestados, más del 20% cree que el cambio climático no está causado por el ser humano.
El ocultamiento también es desinformación
Vanessa Nakate: Por otra parte, las empresas de combustibles fósiles sabían que sus acciones estaban alterando nuestro clima y, sin embargo, continuaron con esas acciones y trataron de ocultar esa información al público.
Yo también lo veo como desinformación climática y lavado verde. Lo hemos visto en la industria de la moda y en cómo muchas empresas se esfuerzan por mostrar al público que son realmente sostenibles. Y, sin embargo, cuando miras los procesos de su cadena de suministro, te das cuenta de que en realidad no lo son. Siguen perjudicando a las comunidades y a las personas, siguen explotando la mano de obra.
Opiniones disfrazadas de noticias
Paul Goodloe: El cambio climático no es una opinión. Por desgracia, hay medios de comunicación que difunden información errónea o manipulada sobre el cambio climático y lo disfrazan de noticias, pero en realidad son opiniones. En El Canal del Tiempo, no tenemos una opinión. Nuestra misión es educar, informar. Hablamos de ciencia.
Desigualdad en la desinformación
Jake Dubbins: Cada vez hay más información sobre este problema en inglés en Norteamérica y en Europa, pero hay lagunas. La mayoría de las plataformas de medios sociales estadounidenses financian bastantes investigaciones sobre desinformación climática en Estados Unidos, pero no tanto en otras partes del mundo. En África, Asia y Sudamérica, la brecha es grande.
Necesidad de esperanza
Vanessa Nakate: Personalmente, y creo que también para los diferentes jóvenes del movimiento activista, nos encontramos en situaciones en las que tenemos que dar esperanza a la gente.
Tenemos que dar esperanza a los líderes y al mundo entero. Es una gran responsabilidad, ya que todo el mundo espera que les demos esperanza y, sin embargo, nadie nos la da, ni siquiera con el trabajo que están haciendo los jóvenes dentro del movimiento por el clima.
Necesitamos que nuestros líderes, nuestras empresas y el público en general también den esperanza a los jóvenes, porque el activismo puede ser agotador. Muchos han experimentado el agotamiento luchando con su salud mental a causa del cambio climático.
Hemos hablado y necesitamos que el mundo nos escuche.
Políticas contra la desinformación: X a la zaga
Jake Dubbins: Hace un par de años, en la COP26, reunimos a activistas del clima, líderes climáticos y empresas para redactar una carta en la que exigíamos que la ONU, pero también las plataformas de redes sociales, se ocuparan de la desinformación sobre el clima. Hace dos años no había políticas sobre desinformación climática en las plataformas tecnológicas. Ahora existen políticas al respecto en la mayoría de ellas, salvo en X, antes Twitter.
Los anunciantes no quieren que sus anuncios aparezcan junto a la negación del cambio climático, junto al acoso a activistas o mediante discursos de odio. Así pues, los anunciantes que invierten su dinero y financian literalmente la mayor parte del entorno mediático también pueden elegir. Pueden elegir invertir su dinero en una gran ciencia climática, un gran periodismo, o pueden invertir su dinero en la negación del clima y el discurso del odio.
El lado correcto de la historia
Paul Goodloe: Se trata de estar en el lado correcto de la historia. Hace cincuenta o sesenta años, el reverendo Martin Luther King tenía la desaprobación del 75% de los estadounidenses. Ahora, 50 años después de su muerte, es visto con un 90% de aprobación. ¿Qué va a pasar dentro de 30, 40, 50 años? Sigue presionando y soy optimista: cada vez más gente se situará en el lado correcto de la historia.