Fue por aquellos años 90, con la aparición de los primeros ordenadores personales, cuando nacieron los músicos digitales. Trabajaban con programas denominados trackers que permitían hacer música utilizando librerías de sonido. Pocos años más tarde, Internet les ofreció a estos artista, el espacio para poder enseñar sus creaciones.
A mí me cuesta entenderlo porque me crié en un mundo diferente, pero es un hecho que en Internet encuentras personas que trabajan por amor al arte, romanticismo, vanidad o qué se yo la razón por la que lo hacen. Cada vez me resulta más evidente una brecha entre dos mundos; el real, en el que hay que trabajar a cambio de dinero para poder sobrevivir, y el digital, en el que se intentan llevar a cabo los sueños.
Este es un medio diferente. Es un hecho conocido lo mal que se está adaptando la industria musical a este nuevo mundo donde rigen nuevas reglas. Estas macro empresas, evidenciando su torpeza y su estrechez de miras, simplemente han intentado reproducir su modelo de negocio sin tener en cuenta que este entorno es el ideal para el desarrollo del ingenio humano. Por eso, como alternativa legal e independiente, nacieron las Netlabels. Son sellos discográficos que, según explica Fran Rodríguez, de la Netlabel Escala, distribuyen sus contenidos de forma gratuita. “En nuestro caso, bajo licencia Creative Commons; de libre descarga y sin canon”.
Habitualmente, la distribución es online, pero, en ocasiones, lanzan ediciones físicas de manera comercial. Eso sí, intentando mantener la filosofía “free” hasta donde ya no es posible. Entonces, se estrujan el cerebro para que el resultado sea lo más barato posible. Fran Rodríguez nos cuenta algunos secretos de su próximo lanzamiento: “De manera inminente, Escala va a sacar su referencia número 20 (así es como ellos llaman a los discos que graban). Se trata de un doble recopilatorio, con temas nuevos de los artistas más representativos de la música electrónica nacional e internacional dentro del mundo Netlabel. Este último trabajo lo sacaremos para libre descarga y en una edición limitada en formato físico. El reto era ajustar los costes al máximo; hacer un packaging muy económico y minimalista. Unos amigos arquitectos (http://comocrearhistorias.com/) se han encargado de diseñarlo. Idearon la manera de doblar una cartulina A4 para que cupiesen los dos cds. ¡Increible! ¿Por qué en formato físico, cuando siempre hemos sacado todas nuestras referencias en digital? Porque sacar algo palpable nos hacía ilusión, es como tener un hijo… :)”.
Así es. Más allá de las murallas de lo convencional, existe un mundo diferente. Un mundo en el que las reglas se escriben día a día. Un mundo en el que nadie vale más que nadie. Un mundo en el que se pueden escuchar todas las voces. Un mundo en el que los artistas pueden crear, producir y distribuir su obra. Un mundo que, como el Romanticismo a finales del siglo XVIII, quiere romper las reglas y acabar con los estereotipos. Un mundo en el que, quien quiera, puede intentar realizar sus sueños.
@Estivigon
Para saber más sobre Netlabels:
http://es.wikipedia.org/wiki/Netlabel
http://phlow.de/netlabels/index.php/Main_Page
http://www.netaudio.es/blog/