Todo el que empieza a jugar al ajedrez, tiene aprender cuanto antes, que hay circunstancias que pueden impedir que una pieza sea movida porque está “clavada”.
Los profesores en las escuelas conocen por experiencia, el gesto de extrañeza que ponen los niños cuando se les muestran ejemplos en los que una pieza no puede moverse debido a que dejaría a su propio rey en jaque, es decir, bajo la amenaza de una pieza enemiga y por supuesto que entre los adultos, ¿quién no ha escuchado en más de una ocasión? “¡no puedes mover esa pieza, está protegiendo a tu rey!”.
Esta particularidad del ajedrez, ha sido (y es) enormemente utilizada por los creadores de estudios, composiciones y todo tipo de problemas y también se produce con muchísima frecuencia en la partida real como la posición que les muestro a continuación.
Las blancas tienen una torre de menos, pero se las ingenian para ganar rápidamente la partida, utilizando como recurso el tema de hoy: “la clavada”.
La primera jugada es la clave (y la más difícil).
Blancas juegan y ganan
Tiempo concedido: 15 minutos
La solución en el próximo artículo
Solución al Reto 17
Las blancas ganan con una secuencia forzada
1.Dxd8+ Rxd8 2.Axb2
Si ahora el negro captura el alfil con 2… Txb2, sigue
3.0–0–0+ y cae la torre
Probablemente fue el enroque largo lo que se le escapó a su rival.
«Hay jugadas que si no las ves, no las ves; no importa el tiempo que emplees»
[Tigran Petrosian, campeón del mundo 1963-1969]
Luis Pérez Agustí