“Se mandan dibujos como cartas. Cada uno espera en silencio la enigmática respuesta del otro. En una caja de madera viajan de Unquillo a Martínez, de Martínez a Unquillo, un retrato, un jarrón con flores, un gato… y media página en blanco. Dibujos a medio camino que el destinatario debe terminar”. Este es el juego que Carlos Alonso y Guillermo Roux y que da lugar a una exposición de obras conjuntas en forma de postal. El nombre de la muestra, que retoma el verso del himno nacional argentino, reivindica la libertad en la creación artística y la ruptura de barreras impuestas por lo convencional., algo latente en el abandono de la individualidad de ambos artistas en pos de la experimentación y de la creación de un “nuevo yo”.