La sudafricana Tracey Rose (Durban, 1974) lleva treinta años siendo una de las voces más radicales del arte contemporáneo. Su trabajo está centrado en el poder de la performance y del cuerpo como lugar de rabia, protesta y resistencia, pero también de curación. Rose difunde su práctica artística a través de distintos medios, como vídeo, fotografía, escultura, instalación y dibujo. Casi un centenar de estas obras se exponen hasta el 11 de agosto en el Kunstmuseum de Berna, en lo que es la más extensa retrospectiva de la creadora hasta la fecha. La exposición, titulada Shooting Down Babylon –en referencia a una obra hecha en 2016 como reacción a la llegada de Donald Trump al poder– incluye algunas piezas nuevas creadas específicamente para la ocasión. Entre ellas, la continuación de su serie en progreso Mandela Balls. A pesar de la inevitable presencia en su trabajo de la realidad y la dramática historia de Sudáfrica, Rose extiende su voz hacia escenarios globales en los que se siguen reproduciendo situaciones de discriminación racista, política o sexista, no solo denunciándolas sino investigando cómo sanar a través del arte a quienes las han vivido.

Dónde: Kunstmuseum Bern, Berna, Suiza

Cuándo: Hasta el 11 de agosto